Cicatrices Invisibles

19. Ayuda

19. Ayuda

Odiaba las reuniones sociales que su padre organizaba cada sábado, las odiaba. Ahora más que nunca detestaba estar rodeada de gente con visibles complejos que solo podían ser llenados con fiestas costosas.

Natalia miraba la copa de vino en sus manos fijamente mientras apoyaba sus brazos en el barandal del balcón.

Dentro de la casa su padre brindaba una fiesta para conmemorar el aniversario número 16 de su agencia. Demasiado tiempo en la industria de la moda era motivo para festejar y aunque Natalia se sentía fuera de lugar, le daba gusto saber que su padre era feliz con su trabajo.

En su mente aun rondaba las palabras de Anthony, si bien la comunicación entre ella y Alex se había cortado por completo claro que le preocupaba lo que le sucedía. De hecho, la modelo siempre estaba presente en sus pensamientos. Es curioso como una sola persona puede transformar su mundo y la manera en la que te ves envuelto en un laberinto sin salida cuando la misma deja de formar parte de tu vida.

Profesionalmente estaba cerca de obtener su título, meses atrás había realizado un gran proyecto en base a lo sucedido con Alex lo que le había hecho merecedora a varios beneficios como aumentar su calificación final, tener la oportunidad de trabajar a penas se graduara y reconocimientos en la facultad, pero ahora con la noticia de que la modelo se estaba hundiendo sus planes parecían cambiar una vez más.

¿Qué si aún pensaba en ella? Claro que lo hacía, cada maldita noche su imagen venía a su mente.

¿Qué si aún la amaba? Claro que lo hacía.

¿Si estaba dispuesta a dejar sus planes para ayudarla? Claro que lo haría.

Estaba decidida a ayudarla, aun no sabía muy bien cómo hacerlo, pero lo básico estaba en aquel trabajo que había presentado meses antes. Se había esforzado al máximo en aquello y planeaba usarlo a su favor.

Ahora debía esforzarse al máximo, graduarse y conseguir su título.

― Luces más pensativa que de costumbre ― le decía su padre acercándose.

― Sabes que no me gustan mucho este tipo de reuniones ― trato de sonreír y volvió la vista hacia el frente.

― Puedes decirme lo que sea, vamos...

― ¿Qué dirías si te digo que ya no quiero trabajar de inmediato en la compañía que me ofrece el trabajo de mi vida? ¿Qué dirías si te confieso que deseo irme lejos por un tiempo cuando termine mis estudios?

― Diría que hagas lo que te haga feliz...

― ¿Lo dices en serio?

― Naty, yo solo quiero lo mejor para ti, quiero que seas feliz y si quieres irte a la luna pues yo te apoyare... deberías saberlo

― Te amo ― le decía sonriendo ― gracias por ser así.

Minutos después Guillermo despidió al resto de invitados dejando la casa finalmente sola, hablo con Natalia sobre sus planes y claro de Alex. El diseñador estaba al tanto de la recuperación de la modelo y sabia de primera mano que las cosas no iban del todo bien por lo que escuchar a su hija decirle que haría todo lo posible por traer a la vieja Alex de vuelta lo llenaba de esperanza.

Su agencia de modelos se había convertido en el blanco de críticas después del incidente, las personas solo buscaban más culpables, buscaban comprender como sucedió. Como un ataque tan horrible paso sin que nadie pudiera impedirlo. Guillermo acepto en una rueda de prensa que había desatendido las disputas entre las modelos, que nadie tomo demasiado en serio las amenazas y que se arrepentida de haber dejado que aquello llegara tan lejos.