Cicatrices Invisibles

5: Apariencias

5: Apariencias

Las apariencias engañan. Sin duda han escuchado esa frase, la repetimos cientos de veces quizás sin saber su significado. Y es que siempre nos dejamos guiar por el exterior de una persona, confiamos más en un hombre en traje que en un vagabundo ¿Por qué? Por las apariencias.

El ser humano es un complejo sistema que aun ahora nadie consigue entender a la perfección. Amamos, odiamos, nos enfurecemos, somos un torbellino de emociones que muchas veces no conseguimos controlar. Al dejarnos guiar por el exterior de una persona dejamos que la vista nos deslumbre, que las emociones se apoderen de nosotros y podemos cometer el error de juzgar a alguien por como luce ante nuestros ojos.

― ¿Me vas a decir en donde queda esa dichosa cafetería?

Decía Natalia mientras observaba a la chica conducir. Ni en sus más locos sueños hubiera esperado que la modelo las esperara solo para salir con ella. Bueno quizás si estaba muy preocupada por el vestido o la mejor si quería pasar tiempo a su lado.

― ¿Te han dicho que eres impaciente?

― Varias veces, pero aun no me respondes lo que te pregunte.

― Bueno, ya no falta mucho para llegar

― Me hubiera perdido ― decía mirando a su alrededor ― jamás he venido por estos lugares.

Alex solo sonrió, al llegar al semáforo se enfocó en observar detenidamente a su acompañante, llevaba una camiseta sencilla color gris, unos pantalones descoloridos, converse negras y nada de maquillaje. A pesar de que no era su prototipo de mujer bella algo tenia Natalia que la hacía sonreír.

― Pues ahora ya lo conoces ― después de unos diez minutos finalmente Alex estaciono el vehículo e invito a la chica a bajar.

Parecía ser una pequeña casa, pero al entrar Natalia observo a las personas disfrutando de una buena taza de café o chocolate. El lugar era acogedor, los detalles de madera, los cuadros perfectamente alineados y varias frases decorando los rincones de la cafetería eran preciosos.

Unas cortas escaleras le daban la bienvenida al segundo piso donde había varias mesas, al aire libre y algunos arbustos flores que decoraban el espacio.

― Este lugar es hermoso ― decía mirando a su alrededor.

― ¿Sabes por qué se llama Moon?

― Creo adivinarlo ― sonrió

― Pues si en la noche tomar un buen chocolate caliente en este lugar se vuelve mágico, puedes observar la luna desde la comodidad de tu asiento y claro disfrutar de una buena platica

― Veo que vienes a menudo ― le decía sentándose

― Algunas veces, es un lugar acogedor y no te tienes que preocupar por multitudes o llamar mucho la atención

― Pensaba que te gustaba la atención ― la había visto en acción en el set y entendió de inmediato lo mucho que disfrutaba estar frente a una cámara, definitivamente había nacido para aquello.

― La disfruto no me malinterpretes solo que a veces es bueno alejarse un poco...

Natalia al crecer junto a una familia de famosos diseñadores sabía lo que era llamar la atención, desde muy pequeña había aprendido a lidiar con aquello y aun ahora le molestaba de sobre manera que la gente invadiera su vida privada.

Para Alex el mundo de la fama no siempre fue parte de ella. Solo cuando su carrera comenzó a despuntar entendió lo que era ser reconocida. Se enfrentó por primera vez a los chismes, a la atención innecesaria, a las mentiras, a los romances por contrato y a miles de cosas que ella jamás contemplo en su carrera.