Instant Crush [Camren]

[21] Día 28: El helado gay.

Echaba de menos las manos del gorila golpeando mi puerta, tanto que me levanté de la cama con una sonrisa para recibirlo. Claro que... No. Keir, esto no te lo perdonaré. Estaba tranquilamente durmiendo desnuda con Camila y acabas de joder mi armonía.

— No le hagas caso a Snorlax —murmuré antes de dejar un beso en el cuello de Camila. — Quédate un poco más...

Pensaba que Camila se iba a separar e iba a irse, pero me hizo caso. No tardó nada en ponerse encima de mí y besarme.

— Ignoraré como has llamado a mi guardaespaldas —bromeó antes de atrapar mis labios.

Por desgracia, Keir insistió. ¿Tanta prisa tenía este hombre? Seguro que vuelvo a ser la última en llegar. Qué lástima, Mike Lex tendrá que esperar a que su querida novia deje de estar conmigo en la cama.

Además... Era tan bonita con las sábanas y con su cuerpo pegado al mío y... ¡Joder, Keir! ¿Quieres dejar de tocar la puta puerta ya, coño?

— Deberíamos irnos... —susurró Camila sobre mis labios.

— ¿De verdad? Y... ¿Cuándo tendré la oportunidad de volverte a ver así en mi cama? Aún no te has ido y ya te echo de menos.

— Esta noche, Laur... Con suerte hoy no tendremos que dormir en el tour bus.

— Te tomo la palabra.

Camila besó mis labios por última vez antes de levantarse de la cama para vestirse. Desgraciadamente, yo tuve que hacer lo mismo. Nos esperaban 5 horas de viaje hacia Colorado y no me apetecía en absoluto. Además, no vería a la cantante en todo el día porque tenía una entrevista con su amado tarta caducada.

— Ya salimos, Keir. —dije alzando la voz cuando volvió a golpear la puerta.

Ya vestidas y con todo recogido, abrí la puerta y salimos de la habitación. Junto a Keir estaban los chicos de mi grupo. Vaya, ahora sabrían que Camila y yo hemos pasado la noche juntas. Si las miradas matasen, Chris acababa de asesinar a Camila.

Mike estaba ya dentro del bus cuando entramos. Por el camino, aproveché para acercarme a mi hermano y hablar con él a solas.

— ¿Te ha molestado que estuviese con Camila?

Él asintió, e incluso llegué a sentirme mal. Le entendía. Si Ally fuese con Chris tal y como Camila se comporta conmigo delante de los demás, yo la habría matado, y no precisamente con la mirada. Apolo puede servir para muchas cosas.

— Eres mayor para hacer lo que quieras, Lauren. Solo quiero que tengas cuidado. No quiero verte peor.

No supe qué decirle, así que lo abracé. No podía tener cuidado cuando se trataba de Camila porque estaba dándolo todo por ella. Era imposible. También estaba totalmente segura de que me vería peor. Según habíamos acordado, Camila sería mía las noches de hotel, pero fuera de la habitación... Mike. Solo quería acabar la gira y comprobar si Camila también estaba enamorada de mi. Quería estar lejos de Mike y de la jodida discográfica.

No hablé con Camila en todo el viaje, y Mike no me molestó. Ella estaba sentada en el sofá tocando y escribiendo, él parecía estar dormido. ¿No había tenido suficiente con esta noche? Lo lógico es que yo estuviese durmiendo, pero bueno. Mientras tanto, yo le hacía compañía a mis chicos favoritos mientras jugaban una interesante partida a la playstation, incluso me animé a jugar un par de veces. Quería demostrarle a Chris que estaba bien, que Camila no me hacía daño... Lo único que hacía era engañarme a mi misma.

— ¿Vamos a por un helado cuando lleguemos?

— Claro, avisaré a Ally. ¿Tú vienes, Lauren?