Mi Salvación [Dean & ____] (Editando)

II. 25. Tonterías

Deje caer el libro sobre la mesa, claramente frustrado. –Aquí no hay nada– dije levantándome de mi lugar, Sam solo me dedico una rápida mirada, para seguir mirando su laptop. –Esto está fastidiándome un poco, en especial porque no hay pay– dije tomando las llaves de mi auto

–¿Iras por el pay? – me pregunto Sam mirándome un poco confundido, con una pequeña sonrisa de lado, como si eso le causara gracia

Asentí mientras caminaba hacia la cochera. –En caso de que despierten los niños... No dejes que se vayan, no importa si para eso debes atarlos o encerrarlos, solo... no dejes que salgan ¿entendido? –

–Si Dean, descuida yo puedo manejarlo, tú ve a comprar tu pay–

Y así fue como ahora me encontraba camino al pueblo, no sólo quería un pay, bueno si lo quería, pero no era verdadera razón por la cual había salido del bunker, quería estar un momento a solas, quería pensar en las posibles soluciones de este problema. Después de darle vueltas al asunto, sólo pensé en dos cosas: la primera era dejar todo como está ahora, acabar con Ruby evitando cometer los mismos errores, incluyendo el que ___ muera y vaya al infierno, y la segunda era matarme para que todo volviera a la normalidad.

–Estúpida fuente– dije casi en susurro, un poco frustrado.

–¿Qué es lo que pasa Dean? – pregunto curioso Castiel, apareciendo justo en el asiento del copiloto, mirando a Dean.

–¿Quieres dejar de aparecerte así de sorpresa? – le pedí a Castiel, soltando un pequeño suspiro y dándole una rápida mirada

–Lamento haberte asustado– me respondió él –Fui al bunker para poder hablar contigo, pero Sam me dijo que habías salido, así que vine aquí– hizo una pausa –Sé que tu no perteneces a este lugar Dean, pero mientras investigan la manera de hacer que regreses, debes cuidar a los chicos, ellos pueden ser nuestra salvación...–

–O nuestra perdición del lado equivocado– concluí su frase –Si lo se Cass, ya no lo dejaste en claro ese punto, y te aseguro que los mantendré a salvo, no voy a permitir que nadie se les acerque–

–¿Estás enamorado de ella verdad? – me pregunto Castiel, mirándome con una pequeña, muy pequeña sonrisa en sus labios

Le dedique una mirada rápida. –Antes de aparecer aquí, antes de que todo esto pasara, ella y yo éramos felices, y el saber eso me destroza... ¿Cómo fue que fui tan estúpido para acabar con esa felicidad? – me pregunte molesto conmigo mismo

–A veces la gente comete tonterías cuando está enamorada, pero tu causa fue tierna Dean, no querías que ella saliera lastimada, tu querías su bienestar, además no sabías que esto pasaría– hizo una pausa –Pero bueno, creo que debo irme y seguir buscando respuestas, cuídate Dean–

****

Entre a la biblioteca del bunker, dejando sobre la mesa dos enormes bolsas con comida, los chicos ya habían despertado y estaba sentados frente a Sam, quien al parecer no se había movido de su lugar.

–Traje hamburguesas y un par de ensaladas, por si tienen hambre– mire a los chicos –Sam deja eso y ven a comer algo– lo mire –¿Ustedes no quieren nada? – regrese mi mirada hacia ellos, quien se miraron mutuamente. –¿Acaso los demonios arrancaron sus lenguas? –

–Aún estamos tratando de entender todo lo que Sam nos dijo– respondió Oliver un tanto confundido

–¿Y qué fue lo que les dijo exactamente? – pregunte mientras de una de las bolsas sacaba mi hamburguesa y mi pay para comer ya de ahora sí, me moría de hambre –¿Ya les contó todo? –