II. 35. Confianza

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Ella sabia que necesitaba ayuda, y aunque su orgullo se lo hubiera impedido todo este tiempo, ahora era el momento para callarlo de una maldita vez y hacer lo que su mente tenia pensado. 
Estas ultimas cuatro semanas han sido de las más atareadas en su vida, desde que tuvo aquella conversación con Metatron, no la han dejado de perseguir, demonios, hombres lobo, vampiros, wendigos, incluso fantasmas, ¿Como es que los fantasmas estaban detrás de ella? Sabía que todo esto era un plan de Metatron para hacerla caer y que así, él pudiera cumplir su malvado plan, pero ella no caería tan fácil, daría pelea, una épica si fuese necesario... Pero ya estaba harta, necesitaba ayuda para poder deshacerse de ese molesto ángel, necesitaba buscar a alguien que conociera a su enemigo, que ya hubiese peleado con él.

Como cada noche, llego sangrando al cuarto de motel, en cuanto cerró la puerta de un fuerte portazo, se arranco la camiseta, dejando a la vista su enorme herida a un costado de su estomago, ella se acercó al espejo para ver esto, aunque cuando estuvo frente a él, la herida comenzó a sanar lentamente.

-Veo que no te has alimentado bien en estas semanas cariño- dijo Damon detrás de ella, con su típico tono burlón de siempre -Deberías cuidar mejor tu alimentación-

-Deja de estar molestandome maldita sea- exclamo ella un poco furiosa

-Lo haría si pudiera- hizo una pausa -Pero soy una alucinación de tu cabeza ¿Lo olvidas? Tu misma me creaste, así que solo me iré cuando así lo decidas tu-

Ella cerró fuertemente los ojos, y cuando los volvió a abrir, Damon ya no estaba, por lo que suspiro aliviada, rápidamente tomó su ropa y se metió a dar una refrescante ducha, y mientras lo hacia, medito la idea de pedir ayuda... Si quería terminar con todo esto, debía acabar con Metatron, y para esto, necesitaba ayuda.

En cuanto terminó de ducharse, se dirigió al refrigerador, sacó una bolsa de sangre del refrigerador, y mientras la bebía, medito su idea de pedir ayuda... ¿De verdad lo haría?

Seis horas después de esto, en el bunker, Dean se había despertado al escuchar ruidos, como todo un cazador con los sentidos alerta, tomó su arma y salió a investigar, caminando a paso lento e intentando no hacer ruido, para no despertar a alguien,  después de una pequeña caminata, y de revisar varias habitaciones, no encontró nada y decidió que era tiempo  de volver a su cama, tal vez el ruido solo estaba en su mente, en cuanto dio media vuelta, escucho otro ruido, pero, a diferencia del anterior, ahora sabía de donde provenía: la cocina.

A paso firme y decidido, camino hacia ese lugar, con su arma arriba y siempre alerta ante cualquier amenaza, en cuanto llegó, solamente vio el refrigerador abierto, lentamente se acercó a este, y al ver que nadie estaba sacando algo de el, decidió cerrarlo.

-Hola Dean- dijo una voz a sus espaldas, haciendolo sobresaltar y con esto, girando rápidamente, sin bajar su arma y listo para disparar -Oye amigo, ten cuidado con tu juguete, podrías matar a alguien- le dijeron al notar su reacción 

Dean se quedo inmóvil y sorprendido al mismo tiempo, eso si, no bajaba el arma, una parte de él, estaba feliz, feliz porque ella estaba de nuevo frente a él, tan hermosa como siempre, pero otra parte, sabía lo que ella era, así que debía tener cuidado.- ____ -susurró -¿Pero que demonios haces aquí?- fue lo único que logro articular, desde que ella se fue, él siempre imagino este momento, donde ambos volvieran a verse, aunque en su mente, todo era más emotivo.

-He estado desaparecida por mucho tiempo y de verdad ¿así me recibes?- preguntó ____ con una sonrisa un tanto burlona en su rostro -Vaya creí que nuestro reencuentro sería... no se, un poco más... ¿Emotivo tal vez?- 

Dean, aún apuntadole a ___ justo en la cabeza, solo se encogió de hombros.- Lo mismo estaba pensando- hizo una pausa -Y creeme cuando te digo que siempre imagine nuestro reencuentro, te abrazaba, tu me correspodias y después, ambos nos besábamos, pero, ahora, no se si pueda confiar porque...- él guardo silencio, analizando la reacción de ____, quien, por cierto, comía un yogurt

-¿Por que soy un demonio no es así?- terminó ella su frase, mientras metía a su boca una cucharada de yogurt, a lo que Dean solo se encogió de hombros -Descuida, se lo que soy, y no me molesta, me encanta ser así- sonrió ella -Pero no estoy aquí para una charla amigable o un reencuentro emotivo, estoy aquí por trabajo, y si no te molesta, ¿Podrías bajar esa arma? Prometo no hacer nada, en especial porque los necesito-

Y así fue como Dean comenzó a bajar lentamente su arma, aunque con precaución, ya que, aunque la amaba, no confiaba completamente en ella.- ¿Para que nos necesitas?- preguntó en cuanto bajo por completo su arma.- ¿Acaso el ser más poderoso del planeta no puede con ello?- preguntó en un tono burlón

Ella solo lo fulminó con la mirada.- Despierta a los demás, no quiero volver a repetir esto-

Veinte minutos después, ____ ya les había explicado a los chicos el porque había vuelto, o más bien, porque había pedido su ayuda.

-Dejame ver si entendí- comenzó a decir Sam.- Dices que Metatron esta buscándote porque quiere robar todo tu poder, que esto es posible por el hechizo que usaste para transferir magia para hacer despertar a Elena, y que no descansará hasta que caigas, ¿Me equivoco?-

Ella negó.- Desde que el apareció, cada día  un sobrenatural diferente me ataca, obviamente siempre soy mejores que ellos, pero conforme voy asesinando a su gente, comienza a mandarlos más y más fuertes y ya estoy harta de tener que estar peleando por mi vida- hizo una pausa -Por eso quiero su ayuda, ustedes conocen a Metatron, han peleado con él...-

-Y no salió muy bien el último encuentro que tuve con él- interrumpió Dean recordando el día que Metatron lo apuñalo con una espada de ángel, y con esto, él se hizo demonio

-La ventaja es que no puede conmigo, no se atreve a atacar el mismo, pero no se sus trucos, no se como piensa, y ustedes si, por eso es que los necesito, piensenlo, es un buen trato para todos, ustedes se deshacen de un enemigo potencial, y yo sigo con vida, ¿Que les parece?-

-¿Y como se que podemos confiar en ti?- preguntó Oliver -Hasta donde se, los demonios tienen la fama de traicionar a sus aliados, ¿Que garantía das de que tu no harás lo mismo?-

-Apoyo a Oliver- prosiguio Sam -Osea, a mi mejor amiga, la hubiera seguido a cualquier parte, sin importar lo que fuera, pero... No se si confió en la nueva persona en la que se convirtió-

-Yo apoyaré lo que ustedes elijan- dijo Stefan, mirando a Sam y Dean

Dean soltó un pequeño suspiro.- Yo opino que hay que apoyarla, sea o no un demonio, hay que hacerlo-

Y después de esto, se acordó apoyar a ____, ya que aún era de madrigada, decidieron descansar un poco más para despues proseguir con idear un plan.

-Oye Dean- lo llamó ___, él se giró antes de seguir hacia su habitación.- Gracias por apoyarme, a pesar de que Sam y Oliver no confiaron en mi, tu si lo hiciste así que gracias- dijo ella intentando sonar lo más agradecida posible

-No te confundas- le dijo Dean -No confió en ti, pero tengo cuentas pendientes con Metatron- y este fue su ultimo comentario antes de dar media vuelta y seguir con su camino, le dolió decir aquello, le dolió bastante, ya que, sea o no demonio, ____ es la chica a la que tanto ama, pero tenía que dejar un margen, trazar una linea para evitar el terminar lastimado de nuevo. 



Mi Salvación [Dean & ____] (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora