Prólogo

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POV Dean

Me encontraba en una habitación oscura, no podía escuchar nada, confundido, decidí caminar, levante mis manos hacia el frente, esperando tocar algo, hasta que sentí una fría y plana superficie, comencé a tocarla hasta que encontré algo que creí que era un apagador, encendí la luz, ahora todo era más claro, lentamente me separe de la pared, pero algo no andaba bien aquí, podía sentirlo, gire y allí habían cinco cuerpo, totalmente descuartizados, la sangre cubría gran parte de las paredes, baje mi mirada a mis manos, cubiertas totalmente de sangre, en el lugar estaba la Primera Espada, y al igual que mis manos, manchada de sangre...

Rápidamente me acerque al espejo que allí había, yo estaba cubierto de sangre, en mi rostro, mi ropa, mis botas. Sorprendido, pero sobre todo asustado intente salir de aquel lugar, corrí y corrí pero no veía la salida, a lo lejos vi una pequeña luz; aliviado, corrí hasta ella, pero cuando llegue, me di cuenta que era un enorme espejo en el cual me vi reflejado.

—Hola Dean ¿Me recuerdas? Vivimos muchos momentos juntos asesinando gente— me sonrió con malicia.

—¡Aléjate de mí!— le grite.

—¿Alejarme?— este soltó una carcajada —¿Cómo puedo hacer tal cosa? Si yo soy tu— me dijo.

—Claro que no, tú no eres yo... ya no más.

Este volvió a sonreír.— Vamos Dean esta parte de ti sigue viva y demasiado, tú lo sabes, estas enfermo, y mientras lleves esa marca en tu brazo, nada podrá salvarte de convertirte en mi... de nuevo.

—Antes muerto a volver a ser como tú.

—¿Acaso no te agradaba matar gente? ¿beber mucho? ¿El sexo?— me pregunto divertido.— Podemos volver a vivirlo amigo, solo déjate llevar— dijo este cerrando los ojos, cuando los abrió, estos eran totalmente negros.— Este será tu futuro Dean, volverás a ser un demonio y ahora si nada ni nadie podrá salvarte de esta grandiosa vida.

—¡No!— grite mientras golpeaba el espejo, haciendo que este se rompiera.

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Desperté de golpe, lleve mi mano a mi frente, el sudor caía sin cesar, mi respiración era agitada, mire el reloj, el cual marcaba las 4:25 am.

—¿Dean?— dijo Sam entrando rápidamente a mi habitación —¿Qué ocurrió?— me preguntó preocupado.

—¿De que hablas?— pregunté fingiendo que nada había pasado.

—Escuche un grito aterrador proveniente de ti hermano, ¿Qué esta ocurriendo?

Me encogí de hombros.— Desde que me curaste no he dejado de tener pesadillas.

—Dean— dijo arrastrando las palabras —Eso fue hace dos semanas, tienes que dejarlo ir, ya no eres un demonio, ahora eres normal.

—Lo se Sammy, es solo que mientras aun tenga esto en mi brazo— dije mostrándole la marca —Tengo el presentimiento de que volveré a ser ese demonio, solo que ahora nada ni nadie podrá salvarme.

—Mientras yo viva, no dejare que nada te pase, voy a cuidar de ti, haré todo lo posible para que no caigas de nuevo en eso.

—Vaya... no recuerdo que esas hayan sido tus palabras cuando yo te dije lo de Gadreel— respondí rodando los ojos.

—No empecemos con eso de nuevo— rogo Sam.

—Tu mismo lo dijiste, ahora te pido que me dejes dormir— le dije tomando mi cobija y tapandome con ella.

Sam soltó un suspiro para después cerrar la puerta de mi habitación. Me quede mirando el techo, no podía dejar que esto pasara, no podía volver a ser un demonio; mire la marca que tenia en mi mano por un par de segundos.

—Maldito sea el día en que acepte traer esto conmigo— dije en susurro.

"Fue para salvar vidas Dean... no sabías que esto pasaría", recordé las palabras de mi hermano.

"Que idiota eres, ¿Acaso no sabes las consecuencias de tu decisión?", ahora recordé las palabras de Cass.

Solté un largo suspiro, debía encontrar la manera de quitar esto de mi brazo, o al menos la manera de matarme sin regresar siendo un horrible demonio, pero no sabía qué hacer, y no sabía si aún había tiempo, ya que cada día que pasa, me siento más y más tenso, ansioso, esas ganas de matar no desaparecieron por completo cuando Sam me curo; así que ahora solo me queda esperar un milagro.

Mi Salvación [Dean & ____] (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora