Mi Salvación [Dean & ____] (Editando)

9. Póker Face

–¿Y bien que quieres saber? – me pregunto Dean mientras metía las manos en sus bolsillos

El y yo caminábamos por las solitarias calles, bueno no tan solitarias calles de Connecticut, ambos mirando hacia adelante.

–¿Me responderás todas las dudas que tengo? – le respondí

El se quedo pensando un par de segundos. – Depende–

–¿De que? – pregunte confundida

–De lo que me vayas a preguntar– me miro con una media sonrisa

–Bien... am... ¿Por qué odias tanto a Sam? – le pregunte

–Eso si no preciosa, nada de preguntas personales– me respondió

–¿Por qué no? Sammy me conto su versión de la historia, ahora quiero saber la tuya– le mire tiernamente

El negó. – Ya has dicho, Sammy, yo no soy el, así que no te contare nada de eso, si quieres puedo contarte de otras cosas, pero de eso no– dijo

Solté un suspiro. – ¿Algún día me lo contaras? –

Se encogió de hombros. – Tal vez algún día–

–Bueno... entonces tu mejor pregúntame y ya yo respondo, después yo te preguntare–

–¿Segura? – me miro

Asentí. –

–Bien... bueno veamos... tu música favorita– me sonrió

Yo sonreí. – Pop y rock alternativo, y un poco del rock clásico– sonreí –¿Y la tuya? –

–Rock clásico hermosa como Kansas, ACDC, Bon Jovi, Survival, ya sabes los famosos y mas– me guiño un ojo

Yo reí. –Mm... ¿Comida favorita? – pregunte

–Definitivamente las hamburguesas– sonrió

–La mía también, pero también como ensaladas y cosas saludables–

Y así estuvimos un buen rato, charlando sobre nuestros gustos, disgustos, yo le conté a Dean sobre mi madre y lo poco que sabía de mi padre, el me conto sobre su padre y su madre e incluso me conto de Lisa, una chica que fue muy especial para él. Caminábamos sin rumbo hasta que Dea se detuvo.

–¿Qué ocurre? – pregunte confundida

–Allí hay un bar, ¿Quieres ver lo que hago? – me pregunto sonriendo

–¿Estafar gente? – le respondí con una sonrisa

El asintió. – Tengo el don hermosa –

–Puedo ayudarte– sonreí tiernamente

–¿Tu ayudarme? ¿Cómo? – me pregunto confundido

–Te apuesto lo que quieras a que puedo conseguirte 5000 billetes en una hora–

–¿De verdad? – levanto una ceja – ¿Cómo piensas hacerlo? –

–Ya verás– le sonreí –¿Entonces apostamos? – levante una ceja

–Claro, ¿Qué quieres apostar? –

Yo pensé un par de segundos. – Si yo gano, mañana harás todo lo que yo diga pero si pierdo yo hare todo lo que tu digas– sonreí

El me miro divertido. – Suena bien el tener una esclava– una media sonrisa apareció en su rostro –Trato–

Entramos al bar, rápidamente localice lo que buscaba, un par de sujetos jugando Póker, siempre había amado ese juego, incluso a los 15 años gane un concurso estatal, pero eso Dean no lo sabia y si quería ganar, no debía decirle.