La guerrera recuerda una parte de las escrituras que dice« tido tiene su tiempo, hay tiempo para nacer y tiempo para morir tiempo para matar y tiempo para curar tiempo para destruir y tiempo para edificar».
Y ella a aprendido a identificarlo.
Cuando ya no tiene fuerzas se toma un momento para recobrarlas, cuando se siente agobiada se toma un segundo para clamar y pedirle a Dios que la ayude, cuando el camino se alargado y se ha vuelto pesado tiene que ir a los atrios del Altisimo para regresar renovada.
