Cuando no hay batallas cuando en el aire se respira paz, cuando no se espera enfrentamientos la vida de la guerrera es fácil.. No hay nada que le quite el sueño y así es fácil mantenerse en pie, confiar en Dios, declararlo como el único ayudador y Salvador de nuestras vidas... Pero cuando la guerra arrecia cuando el aire está cargado de sufrimiento de ansiedad de nostalgia de dolor es muy difícil mantenerse en pie es muy difícil decir que nuestra confianza está asegurada el Cristo pero ahí es cuando tiene que actuar nuestra fe, nuestra confianza. NO en el hombre sino en Dios porque alejarse no es opción dar un paso hacia atrás no trae nada más que decaimiento sufrimiento Más sin embargo cuando despejamos las nubes negras podemos ver despues que pase lo estamos viviendo, existe la recompensa si existe la misericordia si existe la victoria sobre esa situación. Pero el camino solo es hacia el frente nunca para atras