CAPITULO DECIMOQUINTO

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Como una fugitiva...

Narra Karol

— Ahora mismo, nos vamos para la casa Karol — Dice aquella persona que me agarro del brazo y este era mi Tío.

— No sé de qué habla — Dije fingiendo otra voz, mientras escondía mi cabeza.

— vamos Karol, deja tu jueguito y vámonos

— ¿¡pero como de diste cuenta que era yo!? — pregunte exaltada mientras me quitaba el sombrero y la bufanda.

— puedo reconocerte hasta a mil kilómetros de distancia, puedes estar vestida, disfrazada como un payaso, pero sin embargo sabré que eres tu

— ok... — Dije mientras caminaba disimuladamente hacia atrás e iba a empezar a correr, pero este me vuelve a jalar del brazo — ¡oye! ¡Déjame!

— claro que no, tú te vas conmigo, no sabes lo que han sufrido tus padres desde que te fuiste

— no, no iré a ningún lugar en el cual nadie me quiere. — dije mientras me soltaba de su agarre.

— ¿Cómo qué no? todos en la familia te queremos

— como no aja, obvio te creo — dije yo con sarcasmo

— Karol... vámonos, al menos ven y hablemos en el auto.

— ¡no! y si es una trampa y ahí están mis padres o me llevas forzada hasta la casa.

— primero, no estam tus padres ¿Por qué se quedarían en el auto mientras su hija está desaparecida? segundo, si te intentara llevar forzada hasta la casa, seguro como eres, en el camino abres la puerta del auto como sea y te tiras — sonreo ante lo segundo que dijo porque... era verdad, así soy yo.

— pero... de todos modos ¡no! no me convencerás ¿y si esta tu noviecita? ¡No, no gracias!

— ella no está, se tuvo que ir a un viaje a Chile que dura toda una semana así que no te preocupes por ella.

— ¡no, no iré!

— ¡Karol! — dijo para volarme a agarrar del brazo, pero lo esquive.

— síguele y empezare a gritar como loca — Le dije amenazante.

— no te atreverías.

— ¿a no?... ¡AUXI...! — No pude seguir gritando pues este me tapo la boca, a lo que yo lo mordí.

— ¡Karol vámonos! ¡No me importa cuánto grites! sabes que si lo haces nos llevarían a la comisaria, donde los policías están trabajando para encontrar a una chica llamada... ¡ah! ¡Karol itzitery pasquarelli Sevilla! ¿Lo sabias? — No le respondí — ¡vámonos!

Sin más me toco seguirlo hasta el auto, entre y este se encontraba totalmente vacío, bien por ello. Él se subió y me dijo que iríamos hasta un apartamento de él, que había comprado hace unos días para irse a vivir en el ¡genial! llegamos y al entrar, este apartamento se encontraba algo vacío, a no ser por unos cuantos muebles que tenía. << ¡Esta parte me encanta!>> — ¿conciencia? ¿De nuevo tú? — << ¡calla y deja que todo fluya! ¡Sexo, sexo, sexo!>> — ¿ok...? — ignorando a mi "conciencia" me senté en un sofá y el al lado mío.

— ¿Por qué lo hiciste? — Me pregunto a lo que yo no se le respondí — ¿Karol porque decidiste escaparte?

— apuesto que ya sabes sobre toda la pelea, ¿así que para que preguntas?

Amor Prohibido &quot;Ruggarol HOT&quot; [APT1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora