Amor a distancia (sin corregir)

Confesiones y miedo

-Dos meses, Chica Harry.

-Tranquilo, lo sé no es como sí me arrepintiera y decidiera no ir.-reí burlonamente.

Lucas hizo una mueca y bajo la vista hacia algo que no podía apreciar bien.

¿El estaba creyendo que me arrepentiría y no iría?

-Espera, ¿estas creyendo que me arrepentiré, no es así?

Lucas no dijo nada, solamente permanecía callado como sí hubiese esta siendo regañado.

-No puedo creerlo, ¿por qué piensas eso, Lucas?

De nuevo nada salía de su boca.

-¡Maldita sea, contéstame!

-Estoy asustado.

-¿De qué hablas?

-Hablo de que tu estando aquí, es algo que solía pensar como un pensamiento lejano. Temo que el tiempo nos cambie, Sky.-confeso consternado.-¿Qué tal sí cambias de opinión y te das cuenta de que mereces a alguien mejor que yo?

Fruncí el ceño ante lo que estaba diciendo.

-¿Por qué crees eso? ¿No confías en mi?

-Por que todos lo saben.-sonrió cabizbajo.-En quién no confió es en mi mismo, no creo ser lo suficiente.

-Si sabes que lo que dices es una completa estupidez, ¿verdad?

-Sky, yo no-

-No basta, yo ya escuche lo que tenías que decir. Ahora es mi turno.-sonreí este chico era tan inocente como un niño.

-Esta bien.

-Lucas, ¿tienes idea de lo perfecto que eres? Y no me refiero sólo a lo físico por que malditamente esta claro que lo eres.-el sonrió avergonzado.-Eres esa clase de persona que ayuda a alguien y no espera algo a cambio.

-No, simplemente me gusta hacerlo, yo no-

Sonreí mirándolo fijamente.

-Otro punto es que eres modesto y no te gusta alardear sobre eso.

-¿Modesto? Vamos yo soy la persona más egocéntrica del mundo.-ríe.

-Yo se que sólo eres así conmigo, Lucas.

-Touché, linda.

-Además que siempre logras hacerme sonreír.

-Vamos, ¿quién no lo haría con tal de ver esa sonrisa como recompensa?

-No cambiáremos.

-¿Lo prometes?

-Las promesas no son duraderas, así que no lo prometo. Te lo aseguro.

-Siempre buscas la manera de vencerme, eh.

-Por que soy la mejor.

Lucas POV

-Sky, tengo que contarte algo muy importante.

-¿Que pasa?

—No sabía que estaba pasando con mi vida.—admití sonriendo incómodamente.—Todo yo estaba hecho un desastre.

—¿De qué hablas, Lucas?—pregunto ella frunciendo el ceño en signo de confusión.

Mordí mi labio dándome algo de valor.

Tenía que contarle el secreto que guardaba, y si aún así decidía venir yo estaría más que feliz. Sin embargo si no lo hacía, la entendía perfectamente.