(One Piece) Princesa Pirata. 1a Temporada.

Capítulo 23: Navegando en Shinsekai.

Varias semanas en el mar, parando en pequeñas islas por alimento, comenzaba a aburrirme, desde el encuentro con Mugiwara, Grace-san estaba distante, no sabía qué decirle, pero no podía estar así, me acerqué a ella, quien estaba sentada en el césped.

-Medanne-san ¿pasa algo?- me senté a su lado.

-Eso debería preguntarte ¿qué pasó?- la mire tranquila y ella suspiro.

-Desde que vimos a Luffy-sama... yo- lo sabía, se trataba de Mugiwara, toque su hombro.

-Sé qué esperabas otra situación al encontrarte con él, pero el que me odie a mi, no significa que tú no puedas cumplir tu sueño...-

-Es que ahora no estoy segura, Barto-sempai me describía a un Luffy-sama diferente, pero ahora parecía como cualquier otro pirata-

-Mi madre también me contaba cosas sobre Mugiwara, ella lo describía como un pirata diferente de noble corazón y sentimientos valientes, pero ahora...- Cora-san se acercó a nosotras, acostándose en el pasto.

-No eres la única que se sorprendió, Law-san me decía que Mugiwara era un pirata extraño... sus palabras exactas eran "es un idiota que presta atención a otras cosas menos a lo que realmente importa"-

-Mugiwara no Luffy, usuario de la Gomu Gomu no mi, actualmente conocido como el "rey pirata"...- Gally hablaba mientras escribía, sin embargo no pudimos seguir hablando un enorme barco se nos acercó, nos abordaron unos 50 tipos.

-¡Vaya! ¡Vaya! ¡Este barco no se ve muy valioso pero encuentren algo que valga la pena!- nosotros suspiramos y nos levantamos.

-Al fin algo de distracción- dije mientras sacudía mi falda y Cora-san tronaba sus nudillos.

-Pero no durará mucho...- los piratas se detuvieron en seco al vernos.

-¡Capitan! ¡Ellos son... la generación sin esperanza!- nos molestamos por el sobrenombre, un hombre de gran tamaño se puso delante de todos y nos miraba meticulosamente, su mirada posó en mi.

–¿Entonces ella es la hija de Hiken no Ace?- carcajeo. –Pese a tener mucho parecido con ese tipo es bastante hermosa...- su mirada trazó mi cuerpo, no pude evitar molestarme. –Dime linda ¿no te gustaría venir conmigo? Una hermosura como tú no debería estar rodeada de perdedores- volvió a reír y sus nakamas lo siguieron, comenzaba a perder la paciencia.

-Lo siento pero odio el cerdo...- él se ofendió notablemente, pero hablaron sus hombres.

-¡Desgraciada! ¡Cómo te atreves a hablarle así al Capitan!- todos se dirigieron contra nosotros, sólo estábamos de brazos cruzados.

-¿Acaso no pelearán? ¡sin sus capitanes son niños miedosos!- uno se posó frente a mí y con espada estuvo apunto de golpearme, sin embargo lo esquive inclinado mi cuerpo hacia atrás, di una vuelta dándole una patada que lo saco del Sunny, cayendo al agua.

En ese instante Cora-san derribó a varios, otros dispararon armas y Grace-san tomo a uno de esos tipos, poniéndolo frente a ella.

-¡HOGO HOGO... ENEMY!- las balas chocaron contra el cuerpo quién gritó del miedo, volvió a la normalidad cayendo aturdido.

Por otro lado un grupo atacó a Gally, para sorpresa de todos, incluso nosotros, él esquivaba muy fácil, mientras escribía en su libreta, iban ataques de todos lados y los esquivaba pulcramente.

-¡Oye! ¿Creí que no sabias pelear?- exclamó Cora-san, Gally volteo a verlo.

-Si lo dije... pero que no sepa pelear no significa que no sepa defenderme- dijo con su tono tranquilo, se agachó y tres sujetos que lo atacarían se golpearon entre ellos.

Grace-san transformó su palma en escudo, defendiéndose y atacado, Cora-san usaba su daga y sus puños para derriban a sus atacantes, Gally esquivaba y hacía que el enemigo se tropezara con sus propios errores, yo luchaba dando patatas, hasta que solo quedaron cuatro sujetos, entre ellos ese remedo de Capitan.

-¡Malditos niños!- nos gritó uno de ellos.

-¿No tienes a nadie competente en tu tripulación?- dijo Cora-san viendo al capitán.

-Alef, Junha, Laund, encárguese de los otros mocosos, yo me encargaré de la princesita...- pasó su lengua por su labio inferior, fue asqueroso.

La pelea comenzó, yo lance una patada que él esquivo, no me lo esperaba, era muy rápido para su tamaño, cuando me di cuenta unos brazos gruesos me rodearon, apretándome, yo luchaba por zafarme, el aire comenzaba a faltarme.

-¡Qué hermoso cuerpo tienes!- carcajeó. –Cuando te lleve a mi barco me divertiré mucho contigo...- nunca había sentido tanto asco en mi vida, mi furia fue tal que saque fuerzas y comencé abrir su agarre, él se sorprendió.

-Sé supone que mis brazos son los más poderosos de Shinsekai, como esta niña...- cuando tuve el espacio lance una patada hacia atrás, apartándolo, él cayó y yo no tuve problemas en mi aterrizaje, pues caí en el lomo de Deuce, quien me mantuvo elevada.

-¡Te arrepentirás de haberme tocado!- dije tan furiosa que incluso mis nakama se asustaron.

-¡Medanne-san es hermosa, inclusive si está furiosa!- dijo con ilusión Grace-san.

-"No hacer de enojar a la Capitan..."- escribía Gally en su libreta.

-Las mujeres son extrañas...- dijo con cierta preocupación Cora-san.

Voltee a ver al capitán ese, quien temblaba de miedo...

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-¡Gracias por todo!- dije mientras cargábamos sus tesoros y provisiones al Sunny, mientras ellos estaban arrodillados en su barco.

-¡En verdad lo sentidos Portgas-san!- aún no me acostumbraba al nombre de mi padre, pero estaba bien, nos alejamos de ese barco y con una sonrisa me acerqué a Grace-san.

Narra Gally.

Leía un poco cuando vi que la Capitán se iba con la Comerciante a su habitación, después de eso pasó un rato, Corazón dormía en el césped, más tiempo pasó y de la nada salieron, la Kuja salió con un nuevo look, o algo así, ambos volteamos a verla y pude notar cómo Corazón es un humano normal, fue gracioso.

-¡¿Acaso no es hermosa?!- preguntó emocionada la rubia, la Capitan traía sus típicas faldas de Amazon Lily de color rojo, se cortó un poco el cabello, usa el sombrero de su padre y en su oreja derecha se puso el arete de la Emperatriz pirata, solo usa la parte superior de un bikini negro, con unas sandalias de plataforma.

-¡Claro!- dije sonriendo. –Eres todo una belleza- ella se sonrojó, volteo a ver a disimuladamente a Corazón, quien estaba rojo y desvío la mirada.

-No importa- la pelinegra se desilusionó, bajo un poco la mirada. –Pero así pareces toda una Kuja, apuesto que tu familia estaría diciendo "¡Medanne-sama eres hermosa!"- dijo esto dándole la espalda, pero yo veía que parecía un tomate.

-Gracias...- dijo la capitana.

Sin duda este viaje será muy interesante, algo me dice que con ellos mi libro será el más completo del mundo, en esta ocasión subí al barco correcto...