Capítulo 34

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Intentaba y intentaba y Bell aun así no me escuchaba, así que me asome por mi ventana y note que fue la primera vez en todo el año que Bell no libero, a las luciérnagas por la mañana, algo no estaba bien, así que me cepillo mis dientes y salgo a fuera, y notó que hay unos policías en la casa de Bell, Tina esta hablando con ellos y estaba en llanto... Así que los policías se retiran y me acercó hacia Tina...

-¿donde esta Bell?-pregunto

Ella pone su manos en su cara y recita:

-Entra a la casa...

Así que entró y me siento en un cómodo sofá.

-¿Que ocurre Tina? Se que tuvimos rivalidades pero puedes confiar en mi...

-ni yo se lo que ocurre...-comenzó a llorar

-¿Y Bell?

Ella respiro y dijo:

-desapareció, no se donde esta...

Desaparecer!!! Mis ojos sobresaltaron al oir eso. Mi piel se erizo y mi corazón latía.

-Hoy en la mañana, cuando hiba hacia su cuarto... No la encontré, todo fue tan de repente... Sin carta, sin aviso fue como un rayo, solo cayo inesperadamente... Quiero ami Bell

-Tina... En verdad estoy muy confundido... ¿Sabes por que?

-Si, dime...

-por que siempre odiaste a Bell y ahora te preocupes por ella y dices que la necesitas... ¿Por que?

-es muy difícil... Ehhhhh... Solo que... Cuando yo era niña... Fui como Bell gorda, confundida, rara, y sufría de burlas por eso, así que a los 15 años comencé con las dietas y ir al gimnasio y se resulto y me convertí en lo que soy ahora... No se que ocurrió... El amor no fue creado para mi... Tuve muchos divorcios, y luego tuve otro amor, el padre de Bell, sabia que el era el indicado aunque mi madre decía: "Es gordo" de igual forma no seguí eso, estaba enamorada de el... Y luego estaba embarazada; sabia que era lo correcto embarazarme de quien yo amaba, pasaron algunos 6 años, Bell ya tenia la capacidad de pensar... Y cuando hiba hacer mi boda, todo se desmoronó, el padre dijo: Tina Dickins aceptas a este hombre como tu futuro esposo? Y cuando hiba a decir el aclamado "Si" el se desmayo, y fue un ataque al corazón... Así que lo perdí, y lo único que me quedaba era Bell, ella era gorda y sentí rencor con ella, siempre le decia eres una gorda y eres fea, pero, estaba en algo incorrecto siempre le decía a Bell rebaja de peso, pero no se lo decía con mala intención se lo decía por que sabía que si engordaba mas quizás a ella le daría un paro de corazón, eso les sucede a casi todos los gordos, es horrible... Nunca la valore y lo peor, nunca supe que pasaba dentro de su cabeza, fui una madre, muy, muy estupida y lo acepto

-ahora comprendo todo...-ella asiente y seca sus lágrimas-¿podemos ir a la habitación de Bell?-pregunto

Ella asiente y nos dirigimos hacia allí. Así que miro el mueble y notó que lo boletos de avión ya no están, ahora todo parecía recobrar sentido... Ya sabía lo que pasaba... Salí del cuarto de Bell alarmado y salí de la casa.

-¿A donde vas grito Tina?

-a buscar a Bell-respondo

Entro ami casa y tomo mi celular, y llamo a Ausn. Haci que me dirigía hacia su casa... Corrí lo antes posible a casa de Ausn, Bell fue muy ingeniosa, ¿irse a París para que? No sabia cual era la razón por la que Bell se fue a París, pero lo hiba a descubrir, no importaba nada, solo ella. Y ya tenía un plan.

-estas loco hermano, ¿como puedes ir a París?

-es lo único que puedo hacer... Es mi única opción... La amo encerio

BellDonde viven las historias. Descúbrelo ahora