Detrás de cámaras

18 No está en mis planes.

Effie Pov.

Una vez que lleve a los chicos con el grupo que los prepararía para Cinna, fui a verlo.

“¡Effie querida!” Me sonrió y me dio un tierno abrazo. “¿Cómo estas?”

“Excelente.” Lo mire sería. “Cinna, ¿esta listo el traje?”

“Si, ¿por qué?” Me miró extrañado. “Pensé que íbamos a esperar para usarlo.”

“No viste la cosecha ¿no?” Negó con la cabeza. Bufé y camine hacia la tele, puse el video. “Creo que hay que probar. Ella ya demostró tener valentía.”

“Si, va a funcionar.” Hizo una pausa. “Effie, vamos a intentarlo, y ella puede que realmente lo logré, pero…” No terminó la frase.

“¿Qué?” Lo mire extrañada.

“No quiero que vuelvas a pasar por lo mismo.” Me agarro de los hombros y me miró directo a los ojos. “Ya sufriste demasiado con Anna y Mathew, no quiero que sufras si no llegamos a salvar a alguno de ellos.”

“¡Oh! Ya es tarde para tu preocupación.” Me aleje de él y le di la espalda. “Ella me hace acordar mucho a Haymitch, y él es un sol.” Tomé aire. “Además los vi hace un par de años. Y sé que si hacemos las cosas bien, pueden  lograrlo.”

“Si, pero incluso si lo logramos, Snow puede matarlos." Me obligó a mirarlo. “Tiene mucha valentía, y puede que eso lo vea como un signo revolucionario y ese sería su fin.” Me acarició el cachete. “Mantene distancia de ellos, no quiero verte llorando sus muertes, como si fueran tu familia.” No le contesté, sólo le di un abrazo y me fui directo al penhouse.

“Princesa.”  Llamó Haymitch cuando me vio entrar, le di una sonrisa y seguí mi camino escaleras arriba. “¿Qué pasa?” Pregunto cuando entro en la habitación.

“Nada.” Levanto una ceja, pero se encogió de hombros y empezó a sacarse la ropa y entro al baño. Lo seguí en cuanto deje la peluca en su lugar y el maquillaje abandono mi cara. Ya estaba en la ducha, así que sólo me saque la ropa y entre con él.

“¿Qué se supone qué estás haciendo?” Intento ocultar su sonrisa, pero no le salió muy bien. Lo bese, como toda respuesta, y él no pareció disgustado con la idea, ya que rápidamente me empujó contra los azulejos.

Tres horas más tarde, justo para ver el desfile, salimos del penhouse.

Cinna se había encargado de todo, y le estaba profundamente agradecida. Necesitaba estar a solas con Haymitch.

El desfile empezó y los chicos se lucieron con el traje que habíamos pensado con Cinna. Cuando se agarraron de las manos y las levantaron la gente enloqueció.

“¿Fuego?” Pregunto extrañado Haymitch cuando íbamos a buscar a los niños.

“Supongo que le tenemos que agradecer al whisky por la idea de las llamas.”

“¿Al whisky?” Estaba más confundido que antes, así que suspire y le conté.

“Hace un par de años con Cinna estábamos tomando en su casa, y cuando ya estábamos muy borrachos se me ocurrió desafiarlo a que haga un vestido con fuego. Empezó a dibujar y terminó haciendo un vestido rojo, con un solo hombro y que al girar hacia llamas en la parte de abajo. Nos reímos de esa idea, pero después a Cinna le empezó a gustar la idea y descubrió como hacerlo… y bueno ese es el resultado.” Me encogí de hombros. En ese momento llegamos a donde estaban los chicos, con Cinna.

“¡Fue asombroso!” Los felicito Cinna mientras se acercaba, lo hizo tan alto que nosotros que todavía no llegábamos a ellos lo pudimos escuchar.