Capitulo 1

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El irritante sonido del despertador me despierta como de costumbre. Hoy comienzo otro año en la escuela, repito 4.ESO. Tuve un año bastante ajetreado. Lo único que me compensa es que repito con una amiga y que me reúno con otra que repitió en 3.ESO, mi mejor amiga, Andrea.

Me llamó Patricia, Patricia Jones. Tengo 16 años.

Estoy en el coche, de camino a mi escuela. Escuchando música, concretando, escuchando a mi cantante favorito e ídolo, Justin Bieber.

No me apetece nada empezar otro año en esa escuela. Los profesores son horribles, tanto física como psícologicamente. Sólo tenemos un cambio en el profesorado. Se nos va el de Educación Física, que gracias a Dios se prejubila. No es de los mejores, pero tampoco es de los peores, era uno de los pocos a los que se les podía torear. De seguro que el que venga será mucho peor. Siempre que alguien ha venido a sustituir a algún profesor ha echo que echaramos de menos al que sustituyen.

Que pereza me estaba entrando. Nada más llegar a clase, mi tutor, que de seguro que será el señor Fields, nos haría copiar el horario de la semana. Luego cada profesor en su hora correspondiente nos orientaran en lo que son sus criterios de calificación del curso.

Estaba tan distraída que no me di cuenta de que ya habíamos llegado a la calle donde se encontraba la parada del bus que me llevaba a mi colegio ya que mi padre no me podía dejar en la puerta del colegio porque el entra a trabajar antes que yo. Mi padre y mi madre trabajan juntos. Son visitadores médicos, pocas veces a la semana los veo debido a que viajan bastante, pero me quieren y yo los quiero mucho. Agarre mi mochila y le di a mi padre un beso en la mejilla para antes de bajar del coche. Camine unos pocos metros para llegar a la parada. Estuve esperando unos 5 minutos antes de que llegará el bus. Cuando llegó me monté y busque un asiento libre. Tuve suerte y encontré dos asientos libres, me posicione en el que estaba pegado a la ventanilla. Ahora me esperaban unos 45 minutos antes de llegar. Un chico joven se me sentó al lado. Ni siquiera me fijé bien ya que me quedaba dormida. Luchaba contra el impulso de cerrar los ojos. Pero la falta de sueño me podía. Se me cayó la cabeza en el hombro del chico que estaba a mi lado. Rápidamente la levante, abriendo los ojos como un búho y me gire para mirar al chico, el que me miraba con una sonrisa en la cara, yo no pude evitar sonrojarme.

"Lo siento" de seguro que estaba roja como un tomate.

"¿Hay sueño o que?" me dijo sin quitar la sonrisa de su hermosa cara. Había que admitirlo el era condenadamente guapo. Yo sólo asenti. Después de unos segundos en silencio, el volvió a hablar.

"Por cierto, me llamó José" me dio dos besos que yo acepté con gusto.

"Yo Patricia, encantada" le dije más que sonrojada. Después de separarnos el volvió a hablar.

"Mmm... que bien hueles" me dijo, este chico no se cortaba ni un poquito. Sabía como ligar.

"Mmm... Gracias, creo. Tú te conservas muy bien, ¿Haces ejercicio?" le pregunté. Mejor jugar los dos a este juego.

"Muy a menudo, pero me gusta más hacerlo acompañado" me dijo seductoramente.

"Pues ya me podrías dar algunas clases" me apegue más a él.

"Cuando tu quieras..." me dijo y entonces sin preguntar me besó furiosamente en los labios. Me agarró de la cintura, y me posicionó a horcajadas sobre el. No había casi nadie en el bus, ya que llegábamos casi al fin de la ruta. Y los pocos que había no alcanzaban a vernos, ya que estaban en la parte delantera y nosotros estábamos en la trasera. El puso un camino de besos sobre mi cuello, que sólo hacía que me aferrara más a su cabeza, donde mis manos pasaban ferviententemente una y otra vez. La cosa se ponía cada vez más caliente, y yo no había pasado de eso nunca. Era Virgen. Y no tenía pensado dejar de serlo en un bus. Pero tampoco pare nuestra sesión de besos. Desvíe mi mirada hacia la ventanilla y me di cuenta de que la parada siguiente era la mía. Me baje rápidamente de el y me recompuse. El me miraba con confusión.

"¿Que ocurre?¿He echo algo mal?" me pregunto, me dio ternura, para nada había echo nada mal.

"No, es sólo, que me tengo que bajar ya, en la siguiente" le informe, y entonces el cambio su cara a una de alivio.

"Yo también me tengo que bajar en esa" Me dijo. Nos levantamos de los asientos, y nos dirigimos hacia la puerta. Cuando esta se abrió, nos bajamos.

"¿Te acompañó a alguna parte?" me pregunto. Yo no iba a decirle dónde iba a ir, no es que no me fie de el, pero no se me daba cosa.

"No, gracias no hace falta" le dije con una sonrisa alentadora.

"¿Que te gustaría estudiar?" me pregunto. Porque no le diria eso, no pasaba nada.

"Me gustaría estudiar medicina en la Facultad de las Ciencias" quería ser enfermera.

"Yo también quería estudiar allí" me dijo a la vez que se miraba el reloj, y abría los ojos muy fuertemente. "Oh, lo siento me tengo que ir o llegaré tarde" me dijo, y sin darme la oportunidad de despedirme me dio un casto beso en los labios y salió corriendo. Yo me mordi el labio mientras lo veía correr, y entonces me di cuenta de que si no empezaba a mover no llegaria al primer día.

Tuve que caminar un par de manzanas hasta que por fin llegue a la calle de mi colegio. En la entrada estaban Andrea y Ania, que son las que siempre han ido conmigo a mi clase desde los 3 años. Les di un abrazo a las dos y entramos al patio. Donde estaban mis futuros compañeros de clase, los conocía a todos ya que en este colegio sólo hay una clase por curso, pero tampoco tenía la suficiente confianza con ellos. Más con Marta, que es Belieber como yo. Estábamos todos hablando de cómo nos fue el verano, el mio fue chachipiruleta, ya que tuve que estudiar siete asignaturas para luego repetir...Los demás le habían ido genial, viajaron, se enamoraron, bebieron hasta la saciedad,... El señor Fields salió a buscarnos para llevarnos a clase, una costumbre tipica de los profesores, nosotros lo seguimos hasta llegar al cuarto piso, donde se encontraba toda la ESO, andamos por el pasillo y entramos a la clase, la cual me era muy conocida. Estabamos todos hablando, sentandos encima de las mesas, otros pegados al radiador ya que hacía un pelín de frío, yo hablaba con Ania y Andrea, bueno ellas hablabanyo leía un libro. Entonces el señor Fields entró por la puerta y todos corrieron a sus sitios. El señor Fields daba miedo y no es bueno tenerlo en tu contra. Estuvo explicandos las normas, criterios, bla bla bla, lo de todos los años...

"Ahora os proyectare el horario de la semana todo el año" dijo el mientras conectaba el ordenador a los cables que hacían funcionar el proyector. "Copiaroslo en la agenda" y eso hicimos todos. Hoy me tocaba, Tutoría, (en la clase que estaba ahora), Plastica, Matemáticas, Lenguaje, Educación Física y Biologia. Cuando terminaron las dos primeras clases, salimos al recreo. Teníamos 30 minutos. Luego teníamos Matemáticas, que estuvimos toda la hora hablando de nuestras vacaciones. Era una de las pocas profesoras que me caen bien, la señora Pomfrey. Luego llegó hora de Lenguaje, que fue lo siguiente a aburrido. Agradecí a Dios a que terminará pronto, ahora teníamos un descanso de 10 minutos, y todos volvieron a sus posiciones de radiador de subirse encima de las mesas,... Yo volví a sacar mi libro, y me acurruque en mi pupitre y me dispuse a leer. Todos gritaban a voces, y entonces, entró el profesor, todos fueron a sus sitios, yo ni siquiera me gire a mirarlo, seguí leyendo. Muchas chicas murmuraban cosas que no alcanzaba a entender, pero no le di importancia. Entonces escuche una palabra proveniente de la parte de la pizzarra. "Mier*da" levante la mirada y mi estomago cayó. Era el. Me miraba fijamente. Los chicos de la clase me miraban y reían, y susurraban, en cambio algunas chicas me miraban con recelo. No había más que silencio. Yo estaba en shock, un chico comenzó a hablar.

"Bueno ya sabemos quien es la favorita del profesor" dijo con tono irónico uno de mis compañeros, José salió de su estado y hablo por fin.

"Mmm buenos días, yo soy el señor Parker, vuestro nuevo profesor de Educación Física" hablo.

Yo aún seguía en mi estado, deseando que la clase terminará, y cuando terminó José salió a paso ligero. Yo estaba conmocionada...

CONTINUARA.........

espero que os guste

Plato ProhibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora