Capitulo 16

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***Narra Andrea***

Me despedí de Pat, y me acerqué a la sala de espera donde se encontraba José sentado entretenido con su móvil. Noto mi presencia y elevó la mirada dirigiéndose a mi.

"Ya estoy" le dije. El ni respondió, sólo asintió y comenzó a andar en dirección a la salida. Yo lo seguí. Nos dirigimos hacia una parada de autobús. Caí en la cuenta de que no llevaba tarjeta de bus ni dinero en efectivo.

"José... y-yo no tengo dinero ni tarjeta" dije tímida.

"Por favor, llámame Señor Parker" dijo serio. Por su tono frío algo algo me decía que estaba cabreado con alguien o consigo mismo. "Y por la tarjeta no te preocupes, la señora Delgado me dejó una para que pudiéramos volver" continuo serio. Yo asenti indiferente.

Estuvimos esperando un buen rato, en total silencio. Hacia mucho frío. Más bien estaba helando. José tenía las manos en sus bolsillos y no paraba de mover piedras con uno de sus pies. Su respiración era agitada. Salía humo de su boca debido al frío.

Gracias a Dios el bus llegó. Subimos apurados por el frío. José saco la tarjeta y la pasó por el detector. Pico dos veces y pasamos a la parte trasera. Divise dos asientos libres. Para ser las siete de la mañana estaba bastante lleno.

"¿Nos sentamos ahí?" le pregunté. Él apretó la mandíbula tenso. ¿Que he dicho? De repente se embobo mirando a la nada. "¿Señor Parker?" pregunte. Pareció salir de su trance y se volvió a poner rigido.

"Mmm si v-vale" dijo en un susurro que parecía casi más para el que para mi.

Nos sentamos y el me dejó pasar al asiento de la ventanilla. Me puse a jugar con mis dedos para entretenerme, pero me vencía el sueño. Estaba jodidamente cansada. Note el nerviosismo se Jose, sus venas de las manos estaban maecadas por los puños que hacían sus manos. Le oía respirar fuerte y agitadamente. No me lo pensé y le pregunté.

"Jos... señor Parker" rectifique. "Se encuentra bien? Le noto raro, nervioso" dije mirando sus puños. El se dio cuenta y se relajo deshaciendo los puños.

"La verdad es que no" dijo sin ni siquiera mirarme. Estaba cabizbajo. Muy raro.

"¿Puedo preguntar por que?" pregunte sin saber si querría o no contarmelo. Seguramente no era de mi incumbencia.

"Aquí la conocí" se palidecio. "Aquí conocí a Patricia" Oh Dios, eso era lo que le pasaba...

***Narra Jose***

Trague varias veces antes de volver a hablar. Ya que sabía que quería que siguiera hablando.

"Aquí conocí a Patricia" conseguí decir. Supe que era en este bus, ya que había en el respaldo del asiento de enfrente la misma pintada que había esa mañana. Ella me dio una sonrisa alentadora, como si me diera a entender que me entendía. Cosa que dudaba, y mucho. "Posiblemente mi mayor error" ella cambió su cara por otra que reflejaba confusión.

"¿Por qué dices eso?" me dijo con tono confuso.

"Porque así es, porque es mi alumna, por que le saco ocho años, porque es imposible, porque..." iba a seguir pero me interrumpió.

"¿Desde cuando la edad ha sido un problema? Y lo de que eres su profesor... No tiene porque enterarse nadie de lo vuestro" dijo en un consejo que ni me va ni me viene.

"¡Pero si ya lo sabéis dos personas! Y a saber quien más" dije negando con la cabeza. "Y con lo de lo 'nuestro', no hay un 'nuestro' no pienso así de ella" dije recalcando la palabra "nuestro". Negué la cabeza con dureza.

"No claro que no... por eso estás tan feliz, que no te cabe la sonrisa en la cara de lo grande que es" cada palabra que decía goteaba sarcasmo.

"No tiene nada que ver..." iba a proseguir pero me volvió a interrumpir.

"Claro que tiene que ver, así que deja de engañarte" me dijo aconsejando pero no haría nada que me hiciera cambiar de opinión.

"Y tu deja de intentar convencerme, no puedes hacer nada para que cambie de opinión" dije con fin de terminar el tema. Ella me miro con exasperación. Yo tenia las cosas claras. Todo esto había llegado a su fin.

"Mira haz lo que quieras, me rindo" dijo cruzandose de brazos enfurruñada.

"Mira siento ser así de duro, pero preferiría zanjar el tema" dije con el fin de que terminará esto de una vez. Ella ni quiso volver a hablar. El resto del viaje fue en silencio. Cuando me di cuenta llegamos a nuestra parada. Desperté a Andrea que se había quedado dormida pegada a la ventanilla. Bajamos y caminamos hacia el colegio. Cuando llegamos llame al telefonillo y nos abrió el ama de llaves que se encontraba en la portería. Ella nos abrió la verja y se quedó mirándonos con una gran confusión. La verdad es que era raro, un profesor y alumna llegando de fuera a las siete de la mañana. Se lo aclaramos todo y le pedimos que avisara a la directora de nuestra llegada. Esta lo hizo con gusto y cuando llegó, el ama de llaves nos dejó a los tres solos.

"¿Cómo está Patricia?" esas fueron las primeras palabras que mencionó Delgado.

"Bien, se encuentra bien, recobró el conocimiento una vez en el hospital. Sólo tiene la muñeca fracturada" informe.

"Si ella está bastante bien, dentro de unas horas supongo que estará aqui" dijo esta vez Andrea, quien después bostezo. Ella se avergonzo al momento.

"L-lo siento" dijo colorada.

"No tienes que disculparte, estás cansada, los dos lo estáis. Será mejor que os vayáis a dormir. Ya les diré a los profesores el porque habéis faltado. Ir a descansar" nos dijo y así lo hicimos. Andrea fue hacía la residencia de las chicas y yo a la mía. Abrí la puerta de mi habitación y antes de echarme me di una rápida y merecida ducha. Me ate una toalla alrededor de la cintura y me seque. Me puse un pantalón ancho y una camiseta de tirantes para dormir. Me deslice en la cama y puse mis manos detrás de la cabeza. Mi cabeza estaba hundida en mil pensamientos. Tanto y tanto pensar hizo que me venciera el sueño.

CONTINUARA...........

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