Capítulo 32.

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Ya se iba a hacer de noche, las estrellas impregnaban el cielo y la media luna adornaba ese mar luminoso, podría lucir más que bello admirar aquella oscuridad reluciente pero no todo iba a ser bonito, menos para siempre.

JongIn desde la tarde había cambiado su sonrisa, su constante regaloneo a ChanYeol e incluso la forma en cómo se refería a él, y como todo cambio tiene un motivo en esta ocasión sucedía de la misma manera. El pelirrojo había notado que durante la tarde el castaño estuvo recibiendo unas cuantas llamadas y que tras contestarlas JongIn salía de la cabaña para poder conversar. La última vez que atendió su móvil al parecer fue un desagrado en absoluto, ya que provocó que JongIn diera un golpe contra la pared quedando con los nudillos rojizos de tan fuerte que había sido. ChanYeol por su parte intentó calmarlo e incluso lo había llevado a la habitación que compartirían para estar a solas y poder conversar de ello pero el moreno se había negado a contestar cualquier pregunta relacionada con el asunto.

- No es bueno que estés aquí, ve con los demás. – solicitó.

- Voy a quedarme contigo, JongIn. – respondió despacio el mayor.

JongIn aun molesto seguía con su mano diestra posada sobre los cabellos de fuego del alto quien estaba apoyado en su pecho y lo abrazaba por la cintura.

- Necesito pensar – continuó. – baja, ¿sí?

- Puedes pensar, me quedaré en silencio par...

- No te quiero aquí, ChanYeol. – soltó apretando sus dientes y logró que su novio se levantara mirándolo enseguida con aquellos ojos que temblaban.

- No es cierto...

El castaño se levantó yendo a abrir la puerta e insinuó una vez más a que el alto saliera del dormitorio.

- Estoy siendo muy amable contigo.

- ¿Sabes qué? Ya me hartaste, es por momentos así, que me cuestiono si debo seguir contigo, y más cuando me tratas de esa forma. Haces que te odie tanto a veces. – agregó saliendo lo más rápido de ahí, estaba frustrado, triste y en lo posible con rabia, porque le molestaba esas actitudes siendo que solo él quería estar a su lado, le daba cólera que lo alejara cuando ni siquiera sabía los motivos. Se sentía un completo idiota realmente.

Al ir bajando por las escaleras notó otra discusión – no sería un gran fin de semana. – Patrick al parecer acababa de llegar, le decía cosas fuertes a Luke mientras su amigo se exaltaba respondiendo todavía más molesto.

Aquella pelea de la mañana estaba empeorando.

- ¡No sé en qué momento te dije que vivieras conmigo!

- ¡Eres un... enfermo! ¡Nunca debí fijarme en ti! ¡¿En qué momento me dije "Oh Luke, ve y enamórate de un asesino"?!

El pelinegro al oírlo se acercó con ira al muchacho tomándole su camiseta por los hombros.

- Pensé que eras diferente, pero sigues siendo como otro más, Luke.

Patrick lo soltó para salir de la cabaña y el menor se quedó con el corazón en la mano porque en verdad se había equivocado. Todas esas charlas que en algún momento tuvieron fueron todas en vano. Si bien P era muy reservado con sus asuntos siempre solía preguntarle al chico si su profesión complicaba las cosas, si por ello tendrían más problemas, pero Luke le había respondido siempre que no, hasta ahora.

ChanYeol inmóvil desde las escaleras escuchó ruidos a su espalda y divisó como Sehun cerraba la puerta de su habitación con una expresión seria en su rostro. Pasó por al lado suyo saliendo también de la casa y suspiró levemente porque él debería de estar de la misma forma. No quería darle consejos a Luke esta vez, no quería enterarse de otros problemas porque el ya compartían una situación difícil con JongIn y eso lo irritaba.

Crimen de sombras © ; kaiyeolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora