Me enamoré de una chica Pentecostal © [1] BORRADOR COMPLETO.

«Quarante-huit»

«Quarante-huit»–Explicación plus punición.

Mi sonrisa se desvaneció cuando subí a el coche, me sentía triste por la manera que las cosas habían salido, no me esperaba estar en una situación tan incomoda, escuchar a Jared decir que estaba renunciando a Adriana, dado que el sabía lo mucho que ella estaba enamorada de mi, me sorprendió.

Pensé que el chico lucharía conmigo, por lo tanto debía admitir que me sentía satisfecho y quizás un poco vanidoso de saber que entre los dos, ella me había escogido a mí.

Detestaba la idea de irme, sin besarla o abrazarla, pero todas mis emociones estaban concentradas en un punto o/y situación inexplicable, sabía que el señor Angers, me diría cualquier cosa con tal de mantenerme alejado de su hija, entendía sus motivos y esperaba que el poder de Dios estuviera de nuestro lado, yo realmente estoy muy enamorado de ella, quizás mucho más de lo que me podía imaginar.

Sobre todo hoy, esta noche fue algo que me sorprendió, jamás de los jamás ella me había enfrentado así, decirme que era un celoso e irracional me emociono, no entendí el porque de mis emociones, por lo tanto debía admitir que ella tenía toda la razón, llegue a decir cosas que quizás la hirieron, la ofendieron, no le di la oportunidad de explicarme la situación.

Estaba fuera de mi, sobre todo después de ver esos lienzos violetas en su perfecta piel.

¿Como podía un hombre ponerle la mano a la creación más perfecta que Dios ha hecho? Me sentía enfurecido, molesto e inútil.

Mi chica fue golpeada e estrangulada por un idiota, un animal. Golpeó con mis manos el volante, el saber que Ky estuvo ahí y no hizo nada me enfurece, se supone que son amigas.

Frenó delante del semáforo, pasó mi mano por mi cabello. Suspiró ruidosamente mientras organizó mis pensamientos. Debo hablar con Ky, ¿como puede andar con un hombre así? Dejar a Nano para ir con cualquier idiota, eso es intolerable.

Aceleró cuando el semáforo cambia a verde, sé a dónde dirigirme, debo hablar con ella.

Trato de tranquilizarme, dado que Ky a pesar de estar apartada, sigue siendo una oveja del señor, que se allá desviado de su camino, no significa que no sea digna de Dios y de la amistad que le brinda su pueblo.

No quiero que mi actitud, o mi manera de hablare, destruyan la poca fe que mora en ella.

No se en que momento llegue a su casa, parqueo el auto en el parqueadero y bajo, luego pongo el seguro y camino hacia el amarillento edificio, pasó mis manos por mi traje, mientras me repetido que no debo dejarme llevar por las emociones.

Golpeó en el apartamento 307, escucho algunos pasos rápidos y en cuestión de segundos la puerta se abre.

¿Adiel? ¿Que haces aquí?.—pregunta la chica frunzo un poco mi ceño, mientras la observo de arriba abajo, no parece la Ky de mis recuerdos.

¿Puedo pasar? necesito que hablemos.—clavo mis ojos en los suyos, luce nerviosa, como si escondiera algo.

Ahora no..—es interrumpida por un grito fuerte, que la hace sobresalta, supongo que está con aquel chico que casi mata a La Corona de mi vida.

Creo que voy a tomarme el atrevimiento de pasar y decirle dos palabras a tu chico.—digo abriendo con mi mano la puerta, agradeciendo que ella no ponga ninguna resistencia.

Luego de entrar, la observo, luce aterrada, ella conoce mi comportamiento, sabe que si me entero de algo no reflexionaré de la misma manera.

¿El idiota con el que estás fue el que puso sus manos sobre mi chica?—la cuestionó, muerde su labio con nerviosismo evitando todo contacto con mis ojos.—viendo tu reacción, estoy seguro de que es el.