Te Necesito Dentro De Mi +18 | TERMINADA

Capítulo 23. Mi nueva rutina.

Desde que regrese de la casa de mis padres, y de mi sumiso, Jacob, llevo semanas haciendo lo mismo.
Despertar e ir a casa a bañarme, comer algo, ir al trabajo, follar con mi asistente tres veces al día (A la 1 de la tarde, a la hora de la comida, y por último a las 5:30 porque su hora de salida es a las 6 en punto) desde que me penetra sobre el escritorio o entre el espacio que hay entre el librero y la pared, en mi baño personal, en el sofá color guinda que hay en mi oficina, en el suelo, o simplemente en mi silla giratoria, se ha convertido en mi "mejor amigo" ya que con él, puedo ser yo misma, contarle de la manera en que me agobia el estado de Chris, lo culpable que me siento de haberme acostado con el novio de mi mejor amiga, lo culpable que me siento por haberlo hecho, y no tener cara para decirle lo cruel que fuí al hacer tal acto tan malo. Aunque Mike me dice que me calme, porque eso fue antes de que fueran novios y blah blah, pero yo aún siento ese sentimiento de culpa porque lo veo como una traición. Después de follar tres veces al día con Mike, visito a Chris en el hospital y duermo a lado de él tomando su mano y platicandole como estuvo el clima o las noticias, tengo la esperanza de que sus sentidos me escuchan aunque su cuerpo este inconsciente. Justamente a las 9 de la mañana llega el doctor a revisar y a despertame, últimamente se mete entre mi entrepierna y sus manos son adictas a querer abrir mi vagina más de lo normal, Joe me llama a medio orgasmo con mi doctor preferido y aveces se enoja por que dice que le duele no eyacular, cosa que me importa un reverendo durazno, mi hermano es mi hermano, y él es más importante que dejar satisfecho al doctor. Y de nuevo empieza mi día otra vez, bañarme, comer algo, follar con mi asistente, ir con Chris, dormir, despertar y follar con el doctor. Y de nuevo otra vez... Excepto los sábados y domingos, esos días los tomo para descansar y follar con Tony.

Y no, no me canso de que me metan penes por la vagina, al contrario me hace sentir viva, y feliz.

Aunque la pregunta de aquella periodista aún sigue en mi cabeza... ¿Algún día me casaré?

No, no creo que alguien sea capaz de satisfacer mi necesidad intensa de ser penetrada duro y sin que se canse antes de que me haga llegar al orgasmo. Sólo Jacob puede hacerlo... Pero con mi última visita a su casa quedó cerrado, para siempre, nuestra relación de amo-sumisa.

Mike... Es el que sea convertido en mi... "En mi... No se que es nuestra relación pero, le he contado todo, desde mi adolescencia, como y con quién perdí mi virginidad, lo que siento y lo que quiero, y sobre todo me escucha, aunque él no diga nada, se que me escucha....

—Señorita Gonzalez, el señor José desea verla— la voz de Mike suena por el interfono.

José... La última vez que lo ví... La última vez me violó...

—¿Señorita Gonzalez? ¿Hago pasar al señor José?

No. NO. NO. NO Y NO. Él no puede entrar en mi oficina, él no debe acercarse a mi, él debería alejarse de mi, él tiene que...

Se abre la puerta y la cara de enojo de José se hace presente en el umbral de la puerta y mi asistente detrás de él.

—¡Hola mi amor! ¿No les has dicho a tus empleaduchos que me deben de dejarme  pasar sin preguntar?

—Tu no tienes nada que hacer aquí— trato de sonar lo más cortante y agresiva posible.

—De hoy en adelante, te convendrá tenerme cerca de ti amor.

Eso nunca...

—¿Podrías decirle a tu gato que se valla? necesito aclarar unos asuntos personales contigo.

—Que sea rápido José. Puedes retirarte Mike, estaré bien— su entrecejo fruncido cambia de inmediato a uno más relajado y cierra la puerta.

José se sienta en una de las sillas que están frente al escritorio, y abre un folder, sacando un documento, sonríe al verlo, y me lo entrega.