agua y aceite.

Los borrachos siempre dicen la verdad

Esperé a Chris 10 minutos y cuando estaba decidida a marcharme...

- ¿a donde vas bonita?-me pregunto desde su motocicleta. 

- No me subiré a esa cosa-dije al ver que le habían dado su vehículo.

- ¿planeas irte caminando?-me pregunto. 

diablos

-Bien, me subiré, pero no abriré mis piernas como la machorra con este vestido. - me subi y me senté de lado, el sonrio, y me puse el casco.

-Eres realmente rara princesita, y no pareces de 16 - me sonrojé, estaba queriendo decir que si parecia mayor- Pareces de 12. -lo golpee y soltó una carcajada.

- no me digas princesita, ¡te odio!- La motocicleta arrancó y después de varios minutos manejando se detuvo en un bar.-¿dejan entrar a menores? - pregunte. No es que estuviera traumada ni nada parecido. 

-Aquí si, de no ser asi te hubiera llevado a Divercity.

- ¡Cállate!

Nunca dejaría de molestarme, lo presentia.

Entramos al bar y era un ambiente agradable, Kareoke, gente sonriendo, bailando, bebiendo o fumando. Había una que otra pareja,  personasescuchado-  en grupos, hombres hablando de negocios con un Whisky en la mano, en fin muchos tipos de personas reunidas.

- ¿bebes?-pregunto y yo asenti.

- por supuesto.

- ¿Quieres algo en especial? -pregunto. 

-Tequila- conteste con seguridad, yo amo el Tequila, tengo la impresión de que en mi otra vida fui mexicana y que además era una mexicana alcohólica. 

-No quiero tener que sacarte cargada de aquí idiota-dijo insinuando que terminaría emborrachandome, yo arquee la ceja.

Nuestra primera ronda de tequila llegó y al principio estabamos compitiendo para ver quien bebia mas tragos. Yo quise hacerme la mayorcita y me la empecé a beber sin limón ni sal, luchando por no arrugar la cara. Chris estaba sorprendido, de hecho el la estaba tomando al seco también, pero ya al paso de los 7 tragos mi visión se iba nublando y el seguía sonriendo con naturalidad. 

- ¿Estas bien? - pregunto al ver que casi me caia al piso.

- ¿bien? ¡tonterías, estoy de lo mejor! - exclame bailando en la silla.

-Creo que ya estas borracha princesita- se echo recosto de la silla y solto una risita.

- ¡No! Sabes, quiero que guardes silencio ahora mismo- puse mi dedo índice en sus labios.- te diré un secreto. chiquitito jejeje. Tú me gustas- le "susurre" en realidad no lo había susurrado porque estoy casi segura de que todos lo habían escuchado- Pero, no se si entiendas que no me gustas mucho, es decir apenas te conozco y supongo que si me compras un Pony me vas a gustar más.

Sus expresiones cada vez estaban mas llenas de sorpresa y se veia muy cute abriendo mucho los ojos.

-¿si? eso ya lo sabía.

- pero es que no deberías gustarme porque YO- grite- Tengo un novio, un novio tengo yo. Y además tu eres un idiota, imbécil, me la paso genial contigo y besas... besas muy, muy bien ¿estudiaste en algun sitio?

iba de halagos a insultos, no podía controlar lo que decia.

- Creo que esto es todo, vamonos antes de que te vuelvas mas loca bonita- me tomo de la mano y yo lo sacudi.

- ¡NO! besame ahora mismo- le ordene.

- lo lamento pero, no beso a chicas que no estan cuerdas- dijo el.