Al llegar a la fiesta, quiza si llame un poco la atención y a Chris casi le daba un infarto, para hacerme molestar comenzó a entablar una linda conversación con Alice. Yo me fui con otro chico de la fiesta y también intentaba charlar con la misma fluidez que Chris y Alice, pero no podia dejar de mirarlos.
- ¿quieres ir a alguna habitación?-me dijo.
- Ella no va a ir a ninguna habitación- apareció Chris y me tomo de la mano. - Tu irás directo al hospital si no la dejas en paz.
- hey, hey, no te molestes hermano-dijo haciendo una seña con la mano.
- largo de aquí- dijo chris y el se marchaba.
- ¿ terminaste de charlar con Alice?- pregunte molesta.
- ¿podemos dejar de ser tan inmaduros? - pregunto.
- Tu eres un idiota creyendo que me das celos con Alice-dije cruzando los brazos.
- No lo hice para darte celos.- dijo enseguida.
- Claro. - le dije y comence a caminar en busca de bebidas y el me seguía.
- ¡Annabella! ¿como la pasas?-pregunto Alice de forma tierna.
- Genial...-dije con una sonrisa fingida
-Me alegro tanto- dijo y vi como si se abalanzaba sobre mi y todo el contenido de su vaso caía en mi vestido.
- ¡¿QUE HACES?!- grite.
- ¡lo lamento! -chillo ella.
-¡Lo hiciste a propósito!-exclame molesta vaciando toda mi bebida en su cabello.
Luego de camino a casa solo escuchaba a Chris parloteando sobre que yo estaba celosa y otras tonterías que no son ciertas.
- No estaba celosa imbécil. Ella vacio su bebida en mi vestido y yo solo le devolvi el favor- dije por enésima vez.
- Claro, creí que dejaríamos de actuar como niños. Veo que se te da imposible.
- ¡no seas tonto Christopher!-grite seria.
- Estoy cansado de pelear por tonterías. Debemos tener una palabra, algo lindo que haga que dejemos de pelear. - sugirió. A veces tenía unas ideas tan locas que no podía creerlo.
- ¿Como cual?-pregunte entre risas.
- no se, a ver dime tu.
- Algo como... Pollo frito con papas fritas y aderezos- dije imaginándome esa comida en mi cabeza.
- ¿En serio? - dijo mirandome arqueando una ceja.
- Es lindo-dije yo- ¡Ya estas intentando llevarme la contraria de nuevo! -chille.
- Es patético, ¿no piensas nada bueno?
- ¡Callate Chris! - grite.
- pollo frito amor, pollo frito- dijo besándome.
- Pollo frito.- dije mientras continuaba besandolo.
-Ves que si funciona- dijo.
- si, si funciona.-le susurre.
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- ¡Por el amor a Dios cállate! - exclamó Chris aturdido por mi canto.
- ¿A caso no te gusta como canto?-dije haciendo un puchero.
- Me gustas mas con la boca cerrada-dijo- O cuando me besas- dijo acercandose para besarme yo me tape la boca.
- No más besos por hoy, estas castigado. - le dije dandole la espalda.
-¡Annabella!-no respondí- Amor, cielo- seguí en silencio- ¡¡¡Imbécil!!!- grito.
- ¿Como que imbécil? ¿Así tratas a tu novia? ah, cierto, olvide que eres un idiota.
Al paso de unos quince minutos Chris seguía fastidiandome para que le hablara y yo lo ignoraba.
- Amor, no es que no me gustes como cantas, pero creí que sería mejor que te dedicarás mas a tus estudios... Y que sigas estudiando.. Y estudiando- lo golpee y el se echo a reir.
- te odio. - le saque la lengua y el me sonrió.
- pollo frito ann...- al recordar nuestro estúpido trato no pude evitar reírme y el también.
- Pollo frito amor- le di un beso en la mejilla, el me miro arqueando la ceja y termine dandole uno en la boca.
-¿quieres que vayamos por pollo frito? - pregunto y yo asenti.
Fuimos a un restaurante de comida rápida donde vendían pollo frito y nos sentamos en la mesa a ordenar.
- ¿Que vas a ordenar?-pregunto la joven camarera guiñandole el ojo a Chris.
- Creo que usted quiso decir que VAN a ordenar- dije para que se diera cuenta que yo estaba ahí y Chris es mi novio y que ahora mismo estabamos ordenando comida en un restaurant.
- ah, claro...-dijo posando la mirada en mi. Yo sonreí de forma hipócrita y ella también.
- ordenaremos pollo- dijo Chris tratando de romper la tensión en el ambiente.
-Frito- dije haciendole una mueca con la mano.
ella se marcho con nuestra orden y Chris se echo a reir.
- ¿que ha sido todo eso?- pregunto casi llorando de la risa.
- Ella quería ligar contigo.
- pero si solo nos ha preguntado la orden.
- Claro, a ti.
Estaba molesta. No sabía que salir con Chris sería tan difícil. Me encanta, pero no estoy muy feliz con tantas zorras en esta ciudad. Tal vez deberíamos considerar mudarnos a otra ciudad, o país, o quiza otro continente o al fondo del mar.
Ella volvió con nuestra orden y accidentalmente echo toda la salsa de tomate en mi camisa. Yo iba a matarla.
- ¡¿Que crees que haces?!- grite levantandome de la mesa.
- Ups, lo lamento-dijo poniendo su dedo en la boca y miraba descaradamente a Chris mordiendose el labio inferior.
- Me largo de este lugar. - dije saliendo del lugar
-¡Annabella! - exclamó Chris tomandome de la muñeca.
- ¡¿que?!-grite.
- pollo frito ann- dijo mirandome con ternura.
- ¡Pollo frito nada!- dije soltandome de su mano.
-¿eres tonta?
- Ya no lo soporto. Esa chica se te estaba insinuando y tu no hiciste nada.
- Te miraba a ti. - dijo y yo casi me pongo a llorar. Me abrazo y yo también lo abrace- Ahora, que tal si vamos a casa, vemos pecezuelos y preparas algo de comer.
Yo me eche a reir. "preparas algo de comer" repetí en mi mente recordando la última vez que oi esa frase.
-Pensandolo bien... Yo prepararé algo de comer. - corrigió y yo lo bese.
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agua y aceite.
Lãng mạnAnnabella VanCamp es una chica de 16 años que llevaba una vida perfecta, llena de cosas caras, amigos y con un concepto errado de enamorarse. Hasta el día en el que conoció a Chris Bennett, un joven apuesto, seductor y mujeriego quién llegó para cor...