-No puedo creer que seas tan llorona Emily.- Ally rió, más bien se rió de mi.
Estábamos en un McDonald's cerca del cine. Mi estómago se revolvió cuando entramos, no sólo por el hambre sino porque instantáneamente recordé el beso con Thomas en un lugar como este, nuestro primer beso.
Volviendo al tema... Si, tal vez lloré un poco cuando termino la película, y en el transcurso de esta tambien, y no sólo un poco sino bastante ¡Pero no pueden culparme! ¿Qué clase de insensible no lloraria con algo así?
-¡Callate, si tu estabas igual que yo!- La acuse haciendo que las demás rieran.
-Es que no sabía que era así de triste.- Se defendió encogiendose en el siento.
-Es cierto, hasta Avalon lloro.- Sonrió Blake recibiendo una mirada de odio de la recién nombrada.
-Claro que no.- Bufo.
-Claro que si.- Reí recibiendo yo la misma mirada que Blake. Sólo que se suavizo cuando le mostré mi mejor sonrisa.
Estuvimos el resto de la noche hablando de temas comunes como el Instituto y eso. Agradecí muchísimo que no hayan sacado el asunto de Thomas.
Blake me llevaría a casa ya que le quedaba de camino a la suya, y Avalon caminaria con Ally ya que su casa quedaba a no más de dos calles de allí.
Ya estábamos por abandonar el lugar cuando mi teléfono vibró.
Avalon:
No cierres tu ventana está noche.
Al terminar de leer el mensaje automáticamente levante la cabeza para mirarla.
Ella estaba mirándome con una sonrisa mientras sostenía su celular, sin darme cuenta yo también estaba sonriendo.
Tuve unas inmensas ganas de llegar a mi casa lo antes posible.
