Nota de la autora:
¡Buenas! Hoy toca el capítulo 13. ¡Espero que os guste, que lo disfrutéis y que por supuesto, comentéis! Mucho besos <3
Foto en la multimedia y la canción "Y si te vas" de David DeMaría, sé que ahora mismo no pega demasiado, peeeero necesitaba ponerla y el ritmo sí que encaja perfectamente.
Las manos de Mario se deslizaron por todo mi abdomen hasta que él quitó mi camiseta.
-Cuidado con lo que haces, a ver si te vas a arrepentir.- Susurré cerca de su oído y mordí suavemente su oreja.
-Estoy muy seguro de lo que hago, rubio.- Me guiñó un ojo y yo deslicé mis manos por su pecho, llevaba una camiseta ajustada que hacía notar más de lo normal sus pectorales.
-Nunca vas a cambiar, nunca vas a quitarte estas camisetas.
-No, porque sé que a ti te vuelven loco y eso es lo que me gusta, que estés loco por mí.
Sabía como provocarme y yo se lo permitía.
Le arrebaté su camiseta.
-Es justo, yo estoy ya sin ella.
-Lo veo muy justo.- Rio Mario.
-Me encanta tu cuerpo, Götze.- Murmuré observándole.
-Y llevabas mucho tiempo sin verme así.- Sonrió él haciendo que sus mejillas volviesen a ponerse rojas.
-Quiero que tengamos una bonita mañana de sexo.- Sonreí al pronunciar esto.
Mis dedos bajaron por todo su abdomen, repasé con mis propias manos cada línea que marcaba sus abdominales.
-Has mejorado mucho... Tus abdominales ahora están más marcados.
Mario me recostó en la cama y comenzó a besar mi torso, acarició cada parte de mí y luego fue mi turno. Finalmente, nos unimos en uno mientras que las ventanas de mi habitación no paraban de agitarse por el viento mañanero en Dortmund y a la vez que los rayos de sol invadían la habitación dándole un tono mucho más cálido a nuestro reencuentro entre las sábanas.
-Te quiero.- Pronunció Mario con su cabeza aun apoyada en mi pecho. Yo acariciaba su pelo una y otra vez.
-Te quiero, moreno.- Susurré y luego solté un largo suspiro.
-He esperado mucho tiempo por esto, Marco.
-Yo también, Mario.
-Pero ya estamos juntos.- Dijo Mario a la vez que levantaba su cabeza y me miraba con sus grandes ojos marrones.
-Y nadie va a separarnos esta vez. Vamos a pasárnoslo muy bien el campo, vamos a celebrar muchos goles, vamos a disfrutar en los entrenamientos, volveremos a dormir juntos en las concentraciones, en nuestras casas, jugaremos al Fifa, volveremos a besarnos, a darnos la mano, a mantener esto en secreto frente a las cámaras, volveremos a salir a un restaurante a comer, a tomar unas copas, volveremos a estar felices, volveremos a estar en un mismo equipo, volveremos a darnos amor, a protegernos, a cuidarnos...
-Volveremos a ser una pareja.- Finalizó Mario antes de que yo pudiera decir nada más.
-Sí, como siempre hemos querido.
-Siento haberme asustado aquella vez, sé que fui un estúpido y han sido tres años en los que ambos hemos sufrido y la distancia muchas veces nos ha jugado malas pasadas, pero ya nunca más.
-Nunca más.- Afirmé seguro.
Narra Mario:
Al día siguiente fui a pasar reconocimiento médico con el Borussia Dortmund. No fui yo solo ya que Schürrle, Guerreiro y Weigl también se unieron ese día al equipo.
-Te veo feliz, Mario.- Me dijo André.
-Lo estoy y tú mejor que nadie lo sabes.- Sonreí.
André era un gran amigo mío y también de Marco. Siempre estábamos juntos en la selección porque Marco y yo éramos de esas parejas con las que se puede estar a solas y no van a dejarte de lado, no te hacen sentir incómodo y eso le gustaba a André.
-He oído rumores de que has roto con Montana, ¿es cierto?
André asintió con la cabeza.
-Lo siento, tío. Sé que estabas muy enamorado.
-Pero ella no es para mí, Mario. Ella pasaba demasiado de mí... No quiere ni venirse a vivir conmigo cuando nos íbamos a casar así que sé que no me ama realmente, que no le importo.
Algunas lágrimas se escaparon de sus ojos y rápidamente le abrace intentando aparentar que no pasaba nada porque unas cuantas cámaras nos rodeaban. Hoy era el día en el que llegaban los nuevos fichajes así que estaba esto repleto y querían inmortalizar cada momento, no podía permitir entonces que grabasen a André destrozado.
-Míralo por el lado bueno. Ahora estás en un gran equipo en el que seguro que serás valorado, eres joven aún y podrás conocer a muchas mujeres y alguna, estoy seguro de ello, que te va a amar muchísimo, como nunca lo ha hecho Montana.
ESTÁS LEYENDO
Será nuestro secreto
Fanfiction¿Qué haces cuándo te enamoras de tu mejor amigo? ¿Qué haces cuándo eres un hombre enamorado de otro hombre?