Imaginas de Shawn Mendes

Quedate un poco más

Hoy, hoy era el día. El día en el que le iba a dar una sorpresa a Shawn, él estaba de gira y se me ocurrió darle esa sorpresa.

El vuelo ya aterrizó y me estoy dirigiendo al hotel en el que se instalará Shawn, me estoy poniendo más y más nerviosa a medida que llegamos. Y llegamos, oh dios, creo que voy a vomitar.

-Muy bien t/n, Shawn está dentro con Aaliyah, puedes entrar a la cuenta de tres, cuando diga ya entra- dijo Andrew.

-Ordenes recibidas y dispuestas a ser acatadas mi comandante- respondí haciendo un saludo militar y consiguiendo que se riera.

-Eres lo peor

-Nah, soy lo mejor, y lo sabes.

-Si sí, como tú digas, ahora me voy para dentro- asenti y él se fue- bueno Shawn, ¿que tal?, ¿todo bien, todo a tu gusto compañero?

-Sí bueno... Todo es muy bonito.

-¿Que te pasa?

-Ya sabes...

-t/n- dijeron al unísono

-La extrañas, te entiendo, yo también.

-Creeme, no tanto como yo.

-Bueno, dejemos de estar así y... TRES! DOS! UNO!- y nada- ¿Donde está? Tendría que haber entrado ya.

-¿Que dices Andrew?

-Oh nada, se me había olvidado, ¡Ya!

-¡Sorpresa!- dije con los brazos abiertos esperando un abrazo, entre grititos pude notar que recibir el abrazo pero no de Shawn, si no de Aaliyah así que se lo devolví.

-¡T/n! ¿Que haces aquí, sabes? No me importa, ¡estas aquí!- dijo apretandome más fuerte.

-Aaliyah yo también quiero abrazarla- dijo Shawn con una sonrisa de oreja a oreja.

-Ya bueno pues te esperas, a la cola caracola.

-¿Sabes que es mi novia, no?

-Si

-Pues aparta- dijo intentando despegarla de mí pero no pudo- ¡Muy bien! Ahora para ti, luego toda para mí, más te vale acabar pronto o te errepentiras.

-Que si, vete ya. T/n vamos a dar una vuelta y así hablamos.

No tuve opción así que hablamos y me he enterado de que Aaliyah tiene novio, sí, novio, lo he conocido y es un encanto, me recuerda a Shawn. Hablando de Shawn, he preguntado por él y está en su habitación así que ese es el lugar al que me dirijo.

Toqué a la puerta pero nada, no contestaba nadie así que la habrí y entré. Al dar unos diez pasos me encontré con Shawn echado boca abajo en su cama dormido, la razón por la que nadie contestaba.

Busqué una manta y le tapé, es tan mono cuando duerme, le aparté un mechón de pelo y le di un beso, dispuesta a marcharme, me puse de pie ya que estaba sentada en la cama y me giré para emprender mi camino hasta la puerta, pero una mano agarraba la mía.

-Te tengo- dijo Shawn con un tono de niño pequeño que me hizo reír- estás muy guapa cuando te ríes.

-Ah, ¿solo cuando me río? ¿Tan fea son cuando no lo hago?- digo haciéndolo reír con una carcajada grave debido a que estaba dormido.

-Tu siempre estás guapa y lo sabes, por eso lo utilizas muchas veces en mi contra.

-Eso no es verdad- dije indignada.

-Sí lo es, "Shawn, ¿vemos una peli?" "Shawn, ¿pedimos pizza?" "Shawn, ¿nos podemos ir a dormir ya? " Shawn, ¿podemos no madrugar?"- dijo imitando mi voz, que por cierto, la imitó muy mal.

-Yo no hablo así- dije cruzandome de brazos.

-Ah, ¿pero no niegas que lo haces?

-No niego nada porque no hago nada.

-¿Como que no?- dijo sentándose en la cama y haciendo que yo me sentara también, pero encima de sus piernas- me pones esos ojitos, y esa sonrisa, oh esa sonrisa, esa es una de tus mejores armas, te muerdes el labio inferior, enarcas una ceja y ladeas tu cabaza un poco. Eso es lo que haces.

-Me sale solo.

-No, tú solo me matas cada vez que lo haces.

-Aww, miralo, todo un poeta.

-Si los poemas tratan sobre ti, sí, soy poeta, y una de los buenos hay que decir.

-Y... Ya volvió.

-¿Que? ¿Volver el que?

-Ya decía yo que el poeta Shawn no duraría mucho.

-Puedo ser el poeta Shawn el tiempo que quieras.

-Si eso mañana, me voy a mi habitación, que tengo sueño.

-No, por favor, quedate un poco más.

-Pero Shawn...

-Quedate a dormir aquí, no te vallas, no ahora que puedo estar contigo, por fa- dijo dándome un beso en la mejilla.

-Está bien- dije rodando los ojos y el se rió.

-¡Un momento! Todavía no te he besado, ven aquí- dijo cogiendo mi cara y estampando sus labios con los mios- Ahora sí que podré dormir bien.

-Venga, callate y duerme- dije metiendome en la cama y él haciendo lo mismo. Una vez dentro él me acerco a su cuerpo y me rodeó con los brazos.

-t/n

-Mm?

-Que duermas bien- dijo dándome un beso en la cabeza.

-Tu también-dije dándoselo en el cuello y haciendo que se riera porque tiene cosquillas en el cuello.

-Como sabes mis puntos.

-Todos y cada uno de ellos.

-¿Sabias que te quiero verdad? - dijo ahora mirándome a los ojos.

-¿Sabias que yo también?- dije dándole un corto beso en los labios.

-Te quiero, te quiero, te quiero- dijo dándome muchísimos besos por toda la cada hasta acabar en nos labios y besarlos- te quiero más que a nada en este mundo y ahora, a dormir.

Y así es como nos quedamos dormidos, uno abrazando al otro.