(Mix)

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Hoy era el día en el que llegaba Shawn de descanso y no podía esperar más, sólo quedaban 2 malditas horas para poder verle, abrazarle y besarle, sólo 2 horas, y cada vez me estaba poniendo más nerviosa así que me tumbe en el sofá y me puse a ver una película.

Sentí una presencia y un susurro.

- Hey, ¿(t/n)? - abrí los ojos y le vi sonreír.

- Hey- dije perezosamente.

- Hallo- volvió a saludarme con una sonrisa pero esta vez más alto.

-¿Qué haces aquí? Si no llegas hasta dentro de 2 horas.

- Ya han pasado, lo que pasa esque te dormiste.

- Ay dios, lo siento, no... No he ido al aeropuerto a buscarte, dios ...

- Tranquila, no importa, a demás así me daba más prisa en venir a casa a por mi dulce, guapa y perfecto novia- dijo dándome un beso en la frente- por cierto, te voy a saquear la nevera que tengo muchísimo hambre.

- No, espera- me levante corriendo y me puse delante de él para impedirle el paso- como no he ido al aeropuerto, hoy cocinare para ti.

- Vale, de acuerdo, pero solo si me dejas mirar como cocinas- y cruzó los brazos.

-mmm...- crucé yo también los brazos- vale, pero ...

- pero qué.

- No puedes irte comiendo lo que acabe de cocinar- Shawn se empezó a reír súper alto- no Shawn lo digo enserio- aunque me estaba riendo yo también, le intentaba deshacer sus brazos cruzados.

-Está bien pero tienes que hacer magdalenas- me hizo un pucherito, él sabe perfectamente que no me puedo resistir a sus pucheros.

-Ahy... Venga vale- puse los ojos en blanco e hice una mueca para que Shawn notara que no me molestaba hacerle magdalenas.

Shawn me abrazó por detrás y me dio un beso muy fuerte en la mejilla, me soltó para darme la vuelta y posar sus labios en los mios, fue un beso corto pero dulce, al separarnos Shawn se sentó en una silla de las tres que había en la isla así podía ver todo lo que hacía.

Empecé a sacar las cosas que necesitaba, los huevos y todos eso hasta que me di cuenta que no tenía ningún cuenco en el que mezclar así que me puse a pensar donde podría haber uno, claro en el armarito de arriba asique intente cojerlo pero no podía.

-¿Amor, te lo cojo yo?

- No, puedo yo pero gracias- no, no llegaba asique me subí a la encimera para alcanzar, me imagino que Shawn estará flipando hasta que escuche unas risitas y ahí me di cuenta de que se estaba riendo- ja ja muy gracioso- esoble hizo reírse más, yo estiraba el brazo pero aún así estando de rodillas en la encimera no llegaba, noté que me desequilibraba, me iba a caer, noté que ya no estaba en la encimera, si no en los brazos de Shawn.

- Te tengo- dijo sonriendo.

- Que susto me he dado- apolle mi cabeza en su pecho y le abracé.

- Más asustado estaba yo, que pensé que te perdería.

-No, creo que me voy a quedar muchos años más y a molestar todo lo que pueda- eso hizo que Shawn se empezara a reír.

-¿por qué será que siempre te cargas los momentos románticos con alguna cosa de esas- dijo entre risitas.

- No las estropeo porque siempre te ríes.

- Será porque eres una payasa- junto su nariz con la mía y nos dimos un pico.

- Eso seguro- me bajé de sus brazos y él me cogió el cuenco- gracias.

Shawn se sentó de nuevo y yo empecé a cocinar.

- Me aburro, ven aquí y ayudame- se me ocurrió que podía jugar un poco con Shawn.

-¿En qué te ayudo?- se levantó y se puso a mi lado.

-Saca la leche porfa- Shawn pasó detrás asique me separé un poco para que él tenga menos sitio y funcionó porque tubo que ponerse de puntillas y poner las manos en mis caderas.

Me di la vuelta para poner la cuchara en el fregadero y sin querer Shawn se me puso e medio, se le calló toda la leche encima de la camiseta, ya no era azul oscuro, ahora era blanca.

-Oh- me puse las manos en la boca porque me iba a reír.

- Ba, da igual, me la quito y ya está, a demás así estoy más cómodo- al acabar se quitó la camiseta y me guiñó un ojo, al perecer él también sabe jugar.

-Sí, vale, ponla en el sofá y secate.- siempre que veía a Shawn sin camiseta me quedaba en blanco y no decía muchas frases largas, verle sin camiseta me distraía mucho.

Shawn lo sabía perfectamente por eso no paraba de sonreir , cuando ya la había posado en el sofá vino y me dio un beso en la frente.

-¿que hago ahora?

- ehm.... No sé, vete poniendo los moldes o algo así.

-Vale- Shawn no paraba de sonreír y sabía perfectamente lo que estaba haciendo asique era mi turno.

Me recogí el pelo en un mono simple y puse música, Shawn y yo empezamos a bailar a nuestra manera.

-Que calor, entre el horno, la calefacción y entre que no nos paremos de mover esto se está poniendo muy caliente.

-Ya lo creo- tenía sus ojos entrecerrados cuando o dijo asique me desabroche la sudadera y me la quité quedándome en una camiseta blanca de tirantes, al verme sin la chaqueta Shawn no me quitaba el ojo de encima.

Nos pusimos a cocinar para acabar las magdalenas y sin darme cuenta empotre a Shawn contra la isla quedando mi culo en su parte íntima, noté como Shawn se ponía tenso y aprovechando ese momento me restregue un poco, noté como cada vez se ponía más tenso y como su miembro se ponía más duro hasta que me dio la vuelta y me empezó a besar.

- ¿Subimos?

- Hay que acabar de hacer las magdalenas.

- Que le den a las magdalenas

-Pero, ¿no tenias hambre?

-Ahora no quiero magdalenas, ahora te quiero a ti.

-Pues vamos- me cogió y puso mis piernas a su alredor para poder cargarme mientras subíamos.

(Lo demás lo dejo para tu imaginación 💜)

Imaginas de Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora