Imaginas de Shawn Mendes

Stressed out

Me estoy lavando los dientes para luego meterme en la cama aunque no me iba a dormir, esperaría a Shawn viendo una película o leyendo, lo que más me apetezca.

Estoy a punto de acabar de cepillarme los dientes cuando escucho la puerta de la entrada abrirse y cerrarse de un portazo.

—¿¡Shawn?!— grito con el cepillo y la espuma en la boca, aunque no se me entendiera mucho.

Escupo la espuma y aclaro el cepillo y la boca para bajar corriendo y así saber lo que pasa.

—¿¡Shawn?!— digo bajando la escalera.

Una vez abajo encuentro a Shawn con las manos en los ojos y el pelo revuelto. A medida que me acercaba veía mejor como su espalda se movía de arriba a bajo.

Llegué hasta él y lo primero que hice fue quitarle las manos de la cara y así confirmar que estaba llorando, y eso me preocupó aún más.

—Hey, ¿estás bien? ¿Qué ha pasado?— Shawn no hablaba y tampoco dejaban de caer lágrimas de sus ojos así que le abracé, le abracé fuerte para que sepa que estoy aquí.

Shawn lloró aún más fuerte mientras sus brazos me estrujaban contra su pecho y me dejaban casi sin aire, pero no dije nada, seguramente él se sentiría peor.

—¿Quieres que nos demos un baño de agua caliente?— siento la cabeza de Shawn asentir débilmente así que me despegué de Shawn y él se secaba los ojos con las mangas en vano porque cuando una se secaba caían dos más.

Ese gesto me pareció tan inocente y tan infantil que por un momento olvidé que era Shawn y me imaginé a un hijo nuestro con un parecido increíble con él.

Supongo que Shawn se habrá dado cuenta de que me quedé mirándole como una tonta porque su mirada era como si me preguntara que me pasaba que no le dejaba de mirar, tal vez se avergonzaba de llorar y pensaba que le estaba juzgando por ello.

Vi en los ojos de Shawn al chico que en realidad es. Uno lleno de inseguridades y buenas intenciones. Uno que hace todo lo posible por hacer feliz a todo a los que le importa. Uno que se preocupa y protege a los suyos, pero sobre todo, vi a un chico cansado, uno que tiene mucho peso sobre sus hombros y aunque intente aparentar otra cosa o incluso disimularlo, hay a veces en las que uno ya no puede más, y cae. Cae para levantarse con más fuerza o simplemente cae. Shawn está estresado y le entiendo así que como soy su novia estoy aquí para él y eso haré y eso voy a hacer siempre.

Me pongo de puntillas y apollo las manos en el pecho de Shawn para no ceñaer y así poder conseguir mi objetivo, darle un beso en la mejilla.

—Vamos— digo con una sonrisa y le cojo de la mano, dándole un beso en ésta y guiándolo hasta el baño, en el cual llené la bañera y añadí al agua una bomba de vainilla.

Voy desabotonando la camisa de Shawn poco a poco hasta casi acabar cuando siento algo frío en mi clavícula que me hacer dar un respingo. Miro y veo la mano de Shawn a pocos centímetros de mi piel.

—Menos mal que el baño es de agua caliente porque estás congelado— digo riendo un poco para no hacerlo sentir culpable porque Shawn se hecha la culpa de todo siempre y eso no está bien. Todos le ven como un chico muy fuerte y decidido, pero yo le veo tal y como es, duda de todo y le hiere mucho los comentarios negativos, incluso cuando dice que no.

Acabo de desabrochar la camisa de Shawn y se la quito mientras él me desabrocha los dos botones que tenía mi camiseta. Al acabar de quitarlos se queda mirando a la camiseta, sus ojos están hinchados y rojos, ya no cen lágrimas, pero los tiene muy acuosos como si las lágrimas se estuvieran acumulando para caer juntas.

Me quito la camiseta y me voy desabrochando el pantalón mientras Shawn hace lo mismo. El silencio que hay en el baño me recuerda que no he escuchado a Shawn hablar desde que entró en casa.

Una vez los dos ya sin ropa cierro el grifo.

—Tú primero o yo— le pregunto y él hace un gesto con la mano para que me meta yo antes así que lo hago, Shawn se mete después y se tumba en medio de mis piernas. Agradezco que la bañera se bastante grande porque si no Shawn no entraría.

Me mojo las manos y empiezo a peinar el pelo alborotado de Shawn, su respiración se vuelve muy suave y casi imperceptible dando a entender que le relaja así que lo sigo haciendo. Juego con sus rizos mojados y le hago mini trencitas para luego deshacerlas. Tiempo después empiezo a masajear sus hombros, Shawn se acomoda mejor y más cerca de mi apoyando su cabeza hacia atrás en mi hombro.

Bajo mis manos hacia sus pectorales y hasta su abdomen para volver a subir, mientras le doy pequeños besos en el cuello, en la mandíbula y en la mejilla. Como respuesta, Shawn acaricia mis muslos haciéndome cosquillas. Yo siempre le comparo con un gato porque cuando quiere que le hagas mimos se pone entre mis piernas y tumba la cabeza hacia atrás posandola en mi hombro, y como esas caricias le gustan, en vez de ronronear, las hace el también, enncierto sentido es muy mono.

Shawn empieza a jugar con mi pelo, mojándolo, haciendo que flote en el agua... Una vez ya cansados de estar en el agua salimos y nos secamos para yo volver a ponerme el pijama, que eran unos pantalones cortos y una camiseta de manga largar, y Shawn fue a ponerse su pijama, que era como el mio, pantalones cortos y camiseta, pero la suya era de manga corta.

Nos tumbamos en la cama para dormir porque habíamos estado tres horas en la bañera.

No se si Shawn se había dormido mientras le acariciaba, lo siento pero es que cada vez que lo tengo cerca es imposible no tocarle. Su piel es tan lisa y tan suave que me da envidia, y como no la puedo tener pues la aprecio. Sus mejillas se han vuelto sonrosadas puesto a que estamos tapados con un edredón y éste da bastante calor una vez está caliente.

Le aparto un mechón de pelo rebelde que se le pone en la cara y le hace cosquillas haciendo que Shawn haga muecas, y eso en parte me hace gracia, alguna vez tengo que grabarlo.

—Te quiero— escucho que dice Shawn y me detengo justo cuando lo escucho, pero tiene los ojos cerrados y la respiración profunda así que lo habrá dicho dormido— ¿lo sabias? — dice abriendo un poco los ojos.

—Pensé que estabas dormido.

—Adormilado, pero no dormido— su voz, adoro su voz cuando es así de grave y rasposa. Y ahora que lo pienso es la primera vez que habla en todo el día, y me alegra porque eso significa que se encuentra mejor.

—Pero igualmente un poco ido— digo haciendo la rima que le hace reír por lo bajo. Shawn se me queda mirando y yo a él — ¿Qué tanto me miras?— digo sonriendo y con las mejillas rojas haciendo que él también sonría.

—Te quiero— vuelve a decir y yo me pongo aún más roja— te adoro t/n, de verdad.

— Uy que calor así de repente, ¿no?— mis mejillas van a explotar, uno por lo rojas que están, y dos porque me duelen de tanto sonreír.

—Eres adorable— dice Shawn y me abraza. Nos quedamos callados durante varios minutos.

—Yo también — le digo en bajo y él frunce el ceño— yo también te quiero— la mirada de Shawn baja a mis labios y la mía a los suyos y el tiempo pasa despacio hasta que los juntamos en un beso lento en el que sentimos los labios del otro como si fuera los nuestros propios.

— Gracias por estar ahí para mi siempre que he necesitado apoyo, y han sido muchas— dice riendo y no dice nada en unos segundos— tienes todo mi apoyo en todo y mi respeto, pero sobre todo, tiene todo mi amor— dice abrazandome fuerte y yo se lo devuelvo como si mi abrazo fueran las mismas palabras que ha dicho él pero de mi parte porque yo siento lo mismo.

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Sorry de veras por la inactividad, pero entre la Navidad y que hay que estar con la familia, cuando hay clase hay que estudiar cuando hay exámenes y cuando no mandan deberes que te tienen ocupado toda la tarde, y ahora en Navidad también han mandado deberes y también hay que estudiar para recuperaciones (sólo uno pero es una recuperación) y para los exámenes que hay nada más llegamos de navidad así que empezamos bien en 2° trimestre.

Bueno, ese era el porque de la inactividad, deprimente, ¿a que sí?

Siento la inactividad, de verdad, intentaré ahora escribir todo lo que pueda, si es que sigue alguien ahí que me lea :,D.