Cry Baby

Sixteen

Un montón de patrullas se estacionaron en la entrada, las malditas sirenas me dejaron sorda. No pasó demasiado tiempo desde que salí del baño cuando descubrieron el cuerpo de Brenda, oh bueno, lo que quedaba de ella. La chica que lo encontró, gritó con todas sus fuerzas, aparentemente. Se escuchó hasta mi salón de clases. Minutos luego, llamaron a la policía y bueno, causó todo este alboroto. Muchas personas estaban entrevistando al director de la escuela, que no tenía intenciones de contar absolutamente nada. 

Liam estaba un tanto alterado y con ganas de llorar, por qué debe llorar por esa zorra? No merece las lágrimas de él, aún muerta la odiaba con muchas ganas. "Traté" de consolarlo, diciéndole que no era su culpa, pero nada parecía calmarlo.

-¡Ella no debía morir!-Me gritó, sobresaltándome, y dejándome sin palabras.-Lo siento Olivia, lo siento tanto.-Me rodeó con sus brazos, mientras apoyaba su cabeza en mi hombro para finalmente llorar fuertemente.

No iba a opinar nada, ya que alguna palabra mal dicha podría acabar con nuestro noviazgo.

-Está bien Liam, desahógate. A veces es bueno llorar.-Acaricié su cabeza

-Nadie se merece la muerte, yo debería ser el que estuviese en su lugar.

Agarré su rostro, haciendo que estemos frente a frente. Lo miré a los ojos.

-No digas eso Liam, no lo digas. Como tú has dicho, nadie se merece la muerte-Mentí-Eres una persona maravillosa, pero bueno, pasó lo que pasó y tú no deberías sentirte mal por ello, solo... Triste.-Ni siquiera triste debes estar.-Aunque ella era mala conmigo, sé que en el fondo, muy en el fondo, no me odiaba. Y yo no la culpo por ello.-La culpo de todos los males que me ha hecho, ojalá que se pudra bien en el infierno. Es una lástima que no vaya allí.-La perdono, donde quiera que esté-Envuelta en la bolsa negra para cadáveres-la perdono.

-Es muy hermoso decir eso de tu parte.-Se limpió las lágrimas-supongo que tienes razón.

-Claro que la tengo, ahora ve a tu casa a descansar, te lo mereces.

-Uh, agradecería que vinieses conmigo para no sentirme solo, mi mamá está trabajando al igual que papá, mis hermanas no vienen hasta la noche. ¿Podrías por favor venir conmigo?

-Claro que sí. Estaré todo el tiempo que quieras, Liam.

(...)

Parecía una manera de descargarse, nuevamente, los dos nos encontrábamos envueltos entre sus sábanas, en la misma posición de la otra vez. ¿Acaso el me usó? Para evitar otro reencuentro no deseado por la madre, me coloqué mis prendas rápidamente. Liam dormía como un bebé, sus ronquidos me daban ternura, es que eso es lo que él es, un bebé tierno.

-Mmm-se quejó-¿ya te vas?

-Sí-dije mientras me colocaba la camisa de la escuela-no lo he avisado a mi padre que estoy aquí, y en cualquier momento aparece tu madre.

-Es verdad-habló con una voz ronca típica de después de una larga siesta. Se levantó de la cama en calzoncillos, y luego empezó a recoger mi ropa del suelo. 

-Liam-Lo llamé

-Mande

-¿Por qué siento que me estás utilizando para olvidar a Brenda?-Pregunté con una pizca de enojo en mi voz.

-¿Q-qué?-Tartamudeó-¿Cómo crees tal cosa?-Preguntó nervioso

-Pregunto, porque todo lo que has hecho hasta ahora es follarme con furia. ¿Cómo debería tomármelo?-Perdí la paciencia, esta sería la primera pelea como novios que tendríamos con Liam.

Suspiró fuertemente. Yo tenía razón.

-Mira...No sabía si te lo ibas a tomar así, lo siento. Eso sobre que me desahogué es verdad, pero me quería desahogar junto a ti para poder olvidarme de ella un rato.

-¿Acaso te estás escuchando Liam?-pregunté realmente furiosa-No, no, no-Negué con la cabeza repetidas veces-Yo me largo, cuando estés dispuesto a escucharte me buscas.-Dije esto último, y salí de su habitación dando un portazo.