Shadow kiss - Un Cambio En La Historia

Capítulo 8

No pude dormir esa noche a pesar de que sabía que la mañana siguiente tendría entrenamiento temprano.

No podía dejar de darle vueltas a lo que dijo Dimitri y a como se había comportado. Era realmente doloroso saber que ella era más importante que yo.

Aunque así debía ser ¿no?

Cuando quieres realmente a alguien pones a esa persona por sobre todas las cosas sin importar que suceda. Dimitri hacia eso, había puesto a Tasha sabré mi porque ella era más importante para el que yo.

Pero no solo eso me atormentaba.

Me dolía la forma en la que utilice la oferta de Dexter para darle celos a Dimitri. Había funcionado, pero no por evitar sentirme como una basura.

Mañana le pediré perdón.

La última cosa era las pruebas de campo. Estoy cansada respecto a eso. Si tengo que estar con Christian lo aceptaré con seriedad y compromiso al igual que si tengo que volver con Jesse.

Tengo que comenzar a pensar como una guardiana más que como una adolescente.

–¿Cuánto tiempo llevas aquí? – preguntó cuando llegó

–No mucho – mentí. Tenía mucho tiempo aquí parada, no podía dormir así que me levante temprano y decidí llegar un par de horas antes. –¿Qué es lo que vamos a hacer?

–Bueno – abrió la puerta de gimnasio –, estuve pensando en retomar en donde se quedaron tú y Dimitri, pero después decidí que mejor quiero empezar contigo desde cero.

–Esa es una broma ¿no? – señale las cosas en el suelo

Él se volvió para mirarlas– No. En lo absoluto, mi entrenadora utilizaba esa técnica conmigo.

–¿Te entrenaba una mujer? – deje mis cosas en uno de los casilleros

–Si, Rose. – él sonrió – Me duele que no me recuerdes, Alberta me entrenaba.

–¿Tu estudiabas aquí? – pregunte sorprendida

–Si, me gradúe el año que tú y la princesa se fugaron. Yo era mayor y nunca compartimos ninguna clase pero nos encontramos un par de veces en las fiestas.

–Lamento no recordar – respondí y después me coloque en el lugar que él me indicó.

Él tomó una de las almohadas del piso y me la mostró – Sé que esto es ridículo y que te estas riendo por dentro, pero te servirá para mejorar tus reflejos. Yo la voy a lanzar y tu la esquivas. ¿Entendido?

–¿Robaste todas las habitaciones de la academia para conseguirlas? – me reí – Calmate, solo bromeaba no pongas esa cara.

Después de eso comenzamos con el ejercicio más estúpido que e llevado a cabo jamás. Así que lo volví divertido.

Comencé a devolverle las almohadas.

30 minutos después nos encontrábamos riendo y teniendo una guerra de almohadas.

Un carraspeo de garganta nos interrumpió.

Dimitri se encontraba de pie en la entrada.

–Veo que siguen con los entrenamientos – su cara reflejaba disgusto total y no puede evitar comenzar a reír como un maníaca provocando que ambos me miraran. –¿Qué es tan gracioso, Rose?

–Nada – respondí entre risas

Dexter y Dimitri cruzaron miradas antes de que Dexter me empujara hacia la puerta– Vamos a correr, Rose