Mi Pequeño Omega

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Sus pasos se escuchaban por todo el pasillo, estaba nervioso y ansioso al mismo tiempo. Abrió la puerta encontrándose con su omega en la cama, la imagen era hermosa Louis se encontraba acariciando su pancita mientras caían lágrimas por su rostro.
Se acerco al menor, el cual no se daba cuenta de la presencia del rizado en la habitación.

-Un bebé..- el rizado hablo mientras veía al omega quién ahora juntaba su mirada con el mayor-.

-Hazz yo lo siento, si tu no te quieres hacerte cargo yo lo entenderé, yo fui el idiota al no cuidarme pero ya lo solucionare- el rizado se acerco al castaño besando todo su rostro-.

-Mi amor no digas esas cosas, sabes que eres lo más importante de mi vida te amo con todas mis fuerzas nunca te dejar la sólo..- la sonrisa del omega resaltaba en su rostro, sin duda se había ganado un buen alfa- Es mejor que descanses, Ahora quiero que estés fuerte para nuestro bebé- el menor aceptó con una sonrisa y se acomodó para dormir-.

Por el lado del Alfa lo veía como si fuera la cosa más delicada en el mundo, para el era el ser más bello de todos.

Salió de la habitación cuando se dio cuenta de que su novio ya estaba durmiendo, quería darle una sorpresa , quería agradecerle por ser mejor omega del mundo.

-Harry ¿Paso algo?- Niall se paró a su lado-.

-Todo esta bien Nialler, ¿me podrías hacer un favor?- el omega asintió con la cabeza- Podrías cuidar a Louis por mi, sólo será un momento iré a mi casa de daré una ducha y vuelvo- el ojiceleste le sonrio-.

-tu ve tranquilo Harry- la voz del modelo de escucho detrás del rizado- Yo me quedaré con Niall a cuidar a Louis-.

-Y también duerme un poco, no queremos que tu omega te vea con esas ojeras- Nash se acerco y abrazo a Harry-.

-Muchas gracias chicos- el rizado dio un pequeño abrazo a cada uno de sus amigos- Las debo una grande- dijo eso y salió corriendo por el pasillo, desapareciendo por la puerta principal-.

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Tiró las llaves del auto por algún lugar de su sala, comenzó a desvestirse de camino a la ducha, ya llegando al cuarto de baño entró en la lluvia artificial.

Su mente comenzó a resumir todo lo que había pasado desde que conoció a Louis, todas las sonrisas que el le había sacado, había olvidado las locuras de su pasado por enfocarse en su omega, se acordó como el omega no dejaba que lo amen.

Y de pronto una idea se le vino a la mente salió de la ducha sin siquiera preocuparse por su cabello mojado se envolvió la cintura con una toalla y salió del baño hacia su habitación, sus mejillas estaban rojas por el frío no había encendido la calefacción pero poco le importaba en ese momento tomo su agenda y su lápiz, empezando a escribir como si su vida dependiera de eso, escribía con cualquier caligrafía poco le importaba si su letra estaba del asco.

Pasó como un par de horas cuando el rizado por fin pudo terminar su canción, una canción escrita sólo para Louis.

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Entró a la habitación del omega encontrándose una imagen muy tierna, Louis estaba sentado en la camilla mientras sus piernas colgaban, le habían dado de alta hace dos horas pero Harry tenía que hacer unos trámites para poder sacar a su bebe.

-Ya está todo amor, podemos irnos a casa- la sonrisa del omega no tardó en aparecer había extrañado tanto estar en casa aunque sólo habían sido dos días-.

El castaño salió con la ayuda del rizado, la mayoría de las personas miraban con amor a la pareja, otras los veían con envidia, pero poco importaba eso ahora.