CAPITULO 2

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Aeren en multimedia

Después de la Mierda de classe me dirijo de vuelta a mi taquilla para dejar todo lo que llevo en la mochila, ya que no me apetece hacer nada hoy.

Por lo que sé mi hermano no ha aparecido, lo que me parece perfecto porque si me hubiese visto fumando, ahora mismo estaría enterrada bajo tierra viva.

Justo cuando voy a cerrar la taquilla, alguien la cierra por mi más fuerte.

-Vaya...Y yo que pensé que las princesas no hacían cosas malas -suspiro y me giro para mirarlo fijamente.

-Y yo que pensé que los idiotas estaban extinguidos. A no espera, que te tengo enfrente -ruedo los ojos.

-Veras niña, no creo que a tu hermano le vaya a hacer mucha gracia que su enana fume ¿verdad? -alza una ceja sonriendo de lado.

-No soy una niña capullo, y no, no le haría ninguna gracia, pero como no se lo vas a decir -le miro con el ceño fruncido.

-¿Quien dice que no niña?-ríe.

-Veras Ethan, no estoy de humor, todo lo bueno, me lo acabas de quitar tú en un segundo, así que ve al grano ¿Que quieres que haga por tu silencio? -suspiro y lo miro fijamente.

-Por ahora nada preciosa, pero me lo guardaré para otra ocasión en la que lo necesite -me besa la mejilla y me quita la gorra -es malo robar ¿no te lo han enseñado? -se la pone justamente como la tenía yo; con la solapa hacia atrás.

-¿Es tuya? Pensé que era de Aaron -ruedo los ojos -da igual -suspiro i comienzo a caminar hacia la classe de Ciencias.

-¡Niña! -me giro frunciendo el ceño.

-¿Que?

-Esos pantalones te hacen un culo de puta madre -me guiña un ojo y sonríe de lado, me sonrojo y le enseño el dedo de enmedio, mientras camino lo más rápido que puedo hacia la classe de Ciencias.

Cuando llego me encuentro a Alex, sentado al final de la clase con el móvil, seguro que está jugando a alguno de sus estúpidos juegos.

Me siento a su lado y río al ver que pone cara rara.

-Estas para una foto -suelto una carcajada.

- Zorra -me mira mal, pero a los pocos segundos se echa a reír conmigo -¿tu no llevabas una gorra?- alza una ceja.

- Sí, pero resulta que al final no era de Aaron, sino de Ethan -ruedo los ojos - Me ha visto fumando y ha venido a hacerme una visita en la taquilla -suspiro.

-La has cagado, lo sabes ¿no? -me mira.

-No se lo dirá a mi hermano, hemos hecho un trato -me tapo la cara con las manos.

-¿que clase de trato? -alza una ceja.

-No de ese ¡cerdo! -le pego en el brazo -pero tratándose de él, miedo me da.

-Hombre, a lo mejor el chaval te pide que le hagas una mamada -ríe.

-Para eso tiene a sus putas y no se la haría ni loca, es un gilipollas de mierda y un egoc- -me corta antes de que pueda terminar la frase.

-Y es el chico del que llevas enamorada desde que tenías cinco años y el chico que te dió tu primer beso Aeren, ¿cuando se lo dirás? -suspira.

-Nunca Alex, es un puto mujeriego, no va a cambiar por mi, no soy nada para él, solo soy la hermana de su mejor amigo, algún día estos sentimientos se irán -suspiro pesadamente -y sí, es el chico que me dió mi primer beso, pero estaba borracho Alex, no se acuerda de eso -doy por finalizada la conversación y me pongo a recordar lo que pasó justamente después de que me diera mi primer beso, en el lavabo de mi casa.

Eres mía, niñaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora