Love don't die. [Larry Stylinson][Alternativa][Stubborn Love]

Winter winds.

El rizado miró por la ventana de su habitación, ésta daba a un vecindario bastante pintorezco, donde las casas estaban pintadas iguales, de color rojo ladrillo con rejas negras y ventanas blancas, las personas eran amables con todos, los perros ladraban cada vez que alguien pasaba pero se detenían al reconocer alguna persona cercana, los vehículos pasaban al menos, a unos treinta kilómetros por hora y eran todos, clásicos.

Harry suspiró pasando su mano por el cabello con rizos, lo llevaba largo, pero al peinarlo hacia atrás, no se notaba. Se giró, sentándose en la cama de sábanas blancas, tomó un libro de la mesita negra de noche, intentando concentrarse en las palabras que se escribían. Sin embargo, después de cinco minutos leyendo la misma frase, se dio por vencido, en definitiva, él no estaba concentrado.

Rascó su cabeza con frustración, desde que había visto a aquél chico en el baño del 'Coffee and tea', sus pensamientos siempre caían en su pequeña conversación, en los ojos azules y se electrizante mirar, en aquella descarga que sintió al tocar su mano y el irrefutable y aterrador parentesco con Louis. Intentó sacar miles de veces aquella comparación de su cabeza, no era correcto intentar comparar a Louis con alguien más, su chico de ojos azules era único para él y para el mundo. Nadie se le podía parecer, pero había algo que hacía que Harry dudara, algo que hizo que el rizado pensara en Louis al ver sólo sus ojos.

Sacudió la cabeza, estar solo y pensar en aquello no le servía de mucho, tendría que consultarlo con alguien más; alguien que no le dijera que estaba loco, que quizá ya había perdido todo su raciocionio. Pensó en Liam, él que no lo juzgaría ni haría bromas al respecto. Se puso un abrigo largo, el celular con la foto de William en él y se fue, hasta donde vivía uno de sus grandes amigos.

                                                                        -×××-

—Es idéntico.— Harry miró la foto de arriba abajo.— sólo un poco más pálido, pero sigue siendo el mismo estilo, el mismo corte, los mismos ojos.

Liam se removió en su asiento. Estaban ambos en la casa del castaño, ahí donde las paredes estaban llenas de momentos congelados colgados en lindos cuadros de madera, donde los sofás eran negros y combinaban con los muebles modernos y la televisión de plasma que estaba a un lado del librero. El oji-miel, miró por enésima vez la foto sin dar crédito a lo que veía; Harry estaba en lo cierto, William era sin dudar una copia exacta de Louis, sólo que más albina. Su estilo, su cabello e incluso la forma en la que salía sentado en la foto, era espeluznantemente similar a la de su mejor amigo muerto. Liam miró a Harry enarcando una ceja.

—Podría ser el hermano perdido.— dijo el castaño pensativo.

—Liam...él me dijo.— Harry tragó.— él me dijo Hazz.

—A lo mejor te ubicaba de la banda.— Liam se encogió de hombros.

—No lo sé.

—¿Me dices qué sentiste cuando le diste la mano?.

Harry se sonrojó inevitablemente. Desvió la mirada mordiéndose el labio inferior. Liam soltó una carcajada.

—Fue...fue como una descarga.— comentó Harry mirando por la ventana.— como si por un momento, él hubiese vuelto a la vida. No sé si fue por el impacto de ver a alguien tan similar a él o si fue otra cosa, pero juro, Liam.— Harry le miró, de repente serio.— Te juro, que creí que era Louis, o al menos, eso sintió mi corazón.

Liam no sabía que contestar sin herir a Harry, intencionada o no intencionadamente. Ése era un tema delicado. Él no tenía idea de si los espíritus o las almas de las personas podían cambiar de cuerpo, si siquiera podían volverse algo de carne y hueso, sin embargo, no le iba a dar falsas esperanzas a Harry diciéndole que su novio estaba atrapado en el cuerpo de ese chico y que lo recordaba, de por sí el rizado ya sufría más de la cuenta, Liam no quería agregar otra cosa a la lista. Aunque, sin reconocerlo, el castaño sintió una pizca de esperanza muy dentro de sí. Talvéz, si esas cosas existían, podía recuperar a su mejor amigo y la felicidad de Harry.