Capítulo 25.

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Taemin observaba a Hyung Su en los brazos del señor Choi, quien ahora lo visitaba en cualquier horario que no pudiera encontrarse con Min Ho. Al castaño le llamaba la atención como parecía no ser la primera vez que se encontrasen su hijo y Young Won, y éste tuviese la oportunidad de tomar a su hijo en brazos, porque el niño no era alguien que se lanzara a los brazos de cualquier persona que estuviera cerca de sus padres, y con el único que había tenido una verdadera relación era con Ki Bum, quien ahora estaba a su lado preguntándole cómo había estado y al igual que cada día cuando lo iba a visitar, porque el rubio y a veces el señor Choi era a los únicos que podía ver durante las horas de visita, él hubiese querido que Min Ho estuviera con él, pero sus horarios de trabajo se chocaban con los de visita, y no podía estar con Taemin y su bebé, aunque el contacto que tuviera con éste se limitaría a que lo viese a través del cristal, o al menos así había sido durante los cuatro día que el castaño estaba ahí, porque los médicos no creían que fuera buena idea que pudiera tomar al bebé en brazos o siquiera pudiera tocarlo por sólo un momento.

La risa de Hyung Su se escuchó en toda la habitación porque el niño parecía emocionado mientras el señor Choi le hacía juegos con el peluche de dragón que parecía ser el nuevo favorito por el niño desde que lo compraron y para que no llorase por tanto tiempo de estar alejado de sus padres, Ki Bum había optado por tener cerca todas las cosas que el niño prefiera, hasta que Min Ho iba por las noches a ver a su hijo, teniendo que llevarlo antes del horario de trabajo al apartamento del rubio, al menos así había sido la rutina que se creó desde que Taemin estaba en el hospital y no podía hacerse cargo de su hijo mayor.

Sin embargo eso era algo que debía terminar al día siguiente según lo que le habían dicho los médicos, porque él ya estaba recuperado, sólo que tendría que tener los cuidados necesarios hasta recuperarse por completo, lo esencial después de una cesárea, aunque tampoco tenía inconveniente en que permaneciera en el hospital, pero eso se significaría un gasto dinero innecesario que Taemin y Min Ho habían considerado no tener, pero también significaba que tenían que regirse estrictamente a los horarios de visitas para poder ver a su hijo, y esa fue la parte que no le agradó mucho al castaño ya que había encontrado momentos para poder escabullirse y ver a su hijo, que los doctores y enfermeras ya sabían en donde buscar cuando no lo encontraban en la habitación, a pesar de ser una zona un poco restringida parecía que Lee era hábil al llegar ahí.

Mientras aquella cercanía que veía en su hijo y Young Won era extraña para Taemin, no lo era para el rubio, quien había permitido que el señor Choi viese a Hyung Su más de una vez cuando se suponía que el niño pasaba con él, incluso una vez se creyó descubierto que sería descubierto por los padres del niño cuando le dijeron que irían a verlo, pero Hyung Su no estaba con él, además de que Young Won no le tomaba el móvil para pedir que lo llevase al apartamento, fueron sólo cinco minutos antes de que Min Ho y Taemin llegasen que también lo hizo el niño, con un nuevo peluche que fue cortesía del señor Choi, pero que tuvo que hacer pasar como que él lo hubiese comprado, así como algunos otros regalos que fueron también de Young Won, porque parecía que la emoción del primer nieto había hecho que quisiera darle todo lo que estuviera a su alcance, así fuera que nunca se enterasen que él las dio.

Cuando Taemin creyó que era suficiente que robasen el amor de su hijo le pidió a Young Won que se lo diese, recibiendo uno de los tantos abrazos que extrañaba cada día de Hyung Su porque no era lo mismo verlo por algunas horas que estar con él todo el día, quizás Hae Woo era una preocupación que tenía, y a quien ansiaba poder tocar, pero eso no significaba que no quisiera a su lado a su primer hijo, nunca pensó que iba a ser tan difícil el estar alejado de sus dos hijos, pero parte de aquello que parecía tortura terminaría al día siguiente cuando pudiera estar en el apartamento, ya que al menos tendría a su hijo con él casi todo el tiempo, porque habían hablado con el rubio que no tuvo inconveniente alguno en cuidar del niño mientras él hacía su visita al hospital a su otro hijo, sólo esperaba que pronto pudiera tenerlo con él.

Pequeñas Travesuras.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora