Mi felicidad eres tu...

Capitulo 15

Catalina.

Luego de charlar y reirnos, salimos hacia la sala de espera, por suerte me encuentro bien, ni siquiera tengo dolor de cabeza, este chico logro sacarme todo lo malo.

Hablamos con el padre de Braden y salimos del hospital a tomar algo para poder hablar. Fuimos en silencio hasta su auto, el me miraba y sentía que lo hacia, y cuando yo lo miraba en su rostro se formaba una pequeña sonrisa. dentro del auto noto que disimuladamente toma mi mano, y nuevamente siento la electricidad que recorre mi cuerpo cada vez que eso sucede, la sostengo mas fuerte y el sonrie.

Viajamos hasta La costa y nos sentamos en una mesa frente al mar, mientras bebiamos cafe, hacia un dia despejado y no había viento por lo que era mas que agradable.

No se que decir... Que se le puede preguntar a alguien luego de cinco años y de un encuentro de diez minutos. No tiene logica.

Hasta que el habla primero:

—Ya han pasado cinco años... y todavía me recuerdas?

Lo miro sorprendida.

—Tu te acuerdas de mi... eso es raro.

y noto que es el el sorprendido

—Porque lo seria?

—porque, tu te acuerdas de lo que eras? Digo, balbuceaba como idiota, te miraba y no podía creer que fueras tan lindo... y yo no era precisamente la belleza en persona.

Debo de haber quedado de todos colores, encima el me mira divertido.

—Asi que ¿lindo eh? Tu me marcaste... no te olvide jamas Catalina, para mi eras bella no solo fisicamente, eso esta por demas porque me mareaste con solo verte, pero habia algo en ti que me atrajo, tal vez fue tu energia por eso jamas te ovide.

Me quedo sin habla, nunca me olvido, eso es mas de lo que pediría.

—Ni yo a ti, te veía en mis sueños constantemente, y cuando me ofrecieron el intercambio pensé en ti inmediatamente, sentía que estaba escrito en mi destino volver a verte.

El me mira seriamente hasta que contesta:

—Yo... gracias a ti pude escribir mi primer novela, te recordé y fue como sentir el agua caer después de una sequia me sentí tan aliviado, sentí que eras importante en mi vida Catalina.

Siento un cosquilleo en el estomago cada vez que dice mi nombre suena distinto viniendo de el.

—las ultimas palabras que me dijiste en el castillo cobran vida Braden.

Me mira impresionado al decir su nombre, nunca lo había dicho y creo que me gusta hacerlo.

Decidimos salir a caminar y me explica que hace tres año le diagnosticaron cáncer a su madre lo que acarreo que se formara un tumor, creyeron que todo estaba controado pero al parecer no. Me duele verlo asi, tan abrumado y triste. No quería que nos encontraramos por primera vez de esta manera pero también agradezco haberlo echo, quiero apoyarlo y estar con el en este momento.

Braden

Decidimos salir a caminar por la costa.

Ella va sumida en sus pensamientos y aprovecho para mirarla... hasta seria se ve hermosa.

—Y como te has sentido hasta ahora viviendo aquí?

La saco de su ensoñación

—Bueno ¿a ti que te parece? Estoy feliz! Toda mi vida soñe con estar aquí y encontrarte también.

Me dice lo ultimo tímidamente.

—Me alegro que hallas decidido venir, me hace feliz saber que volvimos a vernos.

Y es cierto me hace inmensamente feliz, es lo que mas necesito en este momento.

Tomo su mano y noto como se esremece, si, ea logra que oucrra lo mismo en mi.

—y... tienes... digo... andas con alguien o tienes ... novia?

Veo como su rostro queda completamente rojo.

—No... creo que nunca conoci el amor... no he tenido una relación seria en toda mi vida. Y pensé que tal vez me hacia falta el amor verdadero. Y tu?

Luego de contestarle noto que se relaja, y trato de no sonreir pero es tierno que hiciera eso.

—yo? No... hace cuatro meses termine con mi novio... me engaño con una chica cuando fui a darle una sorpresa de cumpleaños, al final me sorprendi yo misma.

—Vaya... lo siento.

Miento, eso no lo siento completamente.

—Yo no, si no fuese porque ahora estamos separados yo no habría aceptado venir aquí y no te habría vuelto a ver.

Al decir eso paramos y me acerco a ella suavemente, he soñado con besar esos labios desde aque dia, no lo echare a perder esta vez. Esta vez seremos solo nosotros dos.

Siento como su respiración se acelera y la mia también. Tomo su delicado rostro entre mis manos y me acerco a sus labios y es ahi cuando siento un hormigeo en mi estomago y el mayor alivio de mi vida, cuando nuestros labios se tocan siento que llegue al paraiso, fue un beso dulce y largo, siento una felicidad inimaginable y creo que ella tambien.

asi que le digo:

—Gracias.

Me mira y sonríe

—porque lo dices?

—por llegar a mi vida en este momento.

Levanta su rostro de puntillas y vuelve a besarme mas intensamente y no quiero que este momento acabe, aunque se muy en el interior que este es el comienzo de nuestra historia.

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