One Shots (Camren)

Volver a ti

"Vamos cariño, llegaremos tarde" le recordó la ojiverde a Cameron, su pequeña de seis años. La pequeño asintió y bajó las escaleras del departamento de su madre.

"Ya lo sé mamá, es la tercera ves que lo dices" se quejó la niña, tomando su pequeña mochila y el sueter,. Miro a su madre con confusión, ella tenía la mirada perdida, ella sujetó la bufanda de su madre y la tiro un par de veces para captar u atención.

"Lo siento cariño, sabes que a tu mami no le gusta que llegues tarde" le dedicó una sonrisa de lado y le colocó un beanie en su cabeza para protegerla del frío de Chicago.

La ojiverde vivía a 15 minutos de su ex pareja, cerca de la Universidad de Arte de Chicago, su ex novia cerca de la Universidad de Illinois, ambas con vidas diferentes, gustos diferentes, actividades diferentes, pero sólo una cosa las relacionaba ahora; Cameron Jauregui Cabello.

¿Que había pasado entre esa pareja? Con sólo 28 y 29 años, mantenían una hija de seis años, en ese entonces su amor era el más puro y sincero, como para tener un bebé.

"Esta bien ¿podemos pasar por un helado primero?" pregunto con un puchero, igual a los que hacía su madre cuando quería algo. Por supuesto que la ojiverde jamás se resistió a uno de ellos.

"Claro cariño, ahora vamos, tu madre debe estar esperándonos" dejó un beso en su sien y le puso su chaqueta, abrigo y bufanda, los fríos en Chicago eran intensos y no quería que su pequeño sufriera un resfriado.

Salieron del departamento y la ojiverde cerró el cuello de su abrigo, sujetó fuertemente la mano de su hija y caminaron al estacionamiento, buscó su auto y subieron a él, manejaron por 15 minutos, se detuvieron para comprar un helado y Cameron quiso comprar uno de chocolate para su mamá, la ojiverde la miró con adoración, miraba sus rasgos, era tan idéntica a su ex novia, la nariz refinada, sus labios gruesos, su mentón fino, sólo que había adquirido el grueso de las cejas de la ojiverde y claro, sus hermosos ojos color verde.

"Mamá" le llamó la pequeña desde el asiento de atrás, con el cinturón bien puesto y el vidrio arriba. "¿Porque tu y mami no viven juntas?" preguntó curiosa, lamiendo su helado y manteniendo el otro de vaso para que no se cayera.

Esta pregunta hizo que la ojiverde se tensara, nunca antes había preguntado esto ¿que le respondería? No quería mentirle a su hija, pero tampoco quería causar algún problema con su otra madre, tal ves su ex pareja no quería que su hija sacara conclusiones erróneas.

"Porque....no podíamos vivir juntas, amor. Tu mami y yo queríamos....trabajar en distintos lugares lejos de casa, así que yo me vine al departamento para poder dar mis clases de arte" le explico lo mejor que pudo con palabras claras para que su pequeña hija entendiera, pero sabía que era muy inteligente, increíblemente poseía un IQ alto para su edad.

"Y mami se quedó en casa para dar sus clases de español" respondió su hija, terminando su helado. La ojiverde la miró por el espejo retrovisor, su pequeña le sonrió y ella también, apagó el motor y miró a su hija girando su cuerpo.

"Llegamos cariño, le dices a mami que no podré cuidarte la próxima semana, tengo una clase muy importante que impartir y no puedo suspenderla." le explicó a su hija, Cameron asintió y la ojiverde bajó del auto para abrir la puerta y que su pequeña saliera.

"Si mamá, pero ¿si iremos al museo las tres en mi cumpleaños? Ustedes lo prometieron." le recordó enarcando una ceja, como la ojiverde lo hacía.

"Creo que si amor, yo tengo vacaciones en Septiembre, puedes preguntarle a mami si ella puede, y después me llamas para poder venir por ustedes ¿De acuerdo?." preguntó estando en cuclillas para estar a su altura.