Ginny se había acabado de bañar luego de la cena, hubiese preferido ponerse su piyama y acostarse en su cama calentita, pero recordó que tenía que hacer las rondas con Zabini y por eso refunfuñaba en voz alta.
-Bien, llegó la hora y tengo que bajar al pié de la torre para comenzar la vigilancia, odio al estúpido de Zabini, hasta seguro es un futuro mortífago.
Se vistió con mucha parsimonia a sabiendas de que ya era la hora y bajó encontrándose con un Blaise de cara larga de nuevo.
-Llegas tarde mini-comadreja, te conviene darme una buena escusa.
-No me digas así, ese no es mi nombre, y para tu información estaba bañándome cuando lo recordé, debes agradecer que decidí venir.
-Si la próxima vez llegas tarde subiré a tu torre y te traeré en calzones si es necesario para patrullar contigo, niña irresponsable, acabas con mi paciencia!
-Hey! Ya no soy una niña, tu eres el viejo amargado. Aparte eres de un grado mayor, por qué patrullas conmigo?
-Porque Snape así lo quiso y debo hacerle caso, ahora camina! Que ya nos retrasamos demasiado.
-Qué pasó contigo? Te recordaba más bromista y despreocupado, hasta has dejado el grupo de quiddich.
-No es de tu incumbencia
-Ni modo- Ginny movió los hombros en un gesto de aceptación- solo que eras bueno, tal vez el único que podía hacerme frente en el campo de batalla.
-No dudes que puedo hacerte frente en cualquier disciplina, así que yo que tú no vuelvo a llegar tarde.
Ante la respuesta de Blaise, Ginny se irritó un poco.
-La guerra viene para todos, sean sangre pura, traidores, mestizos, sangre sucia o incluso muggles.
Luego de ese comentario Ginny consideró más apropiado dejar la charla por un rato y continuaron patrullando en silencio, con el tiempo a Blaise se le fue llendo el mal humor, ya que él era más del tipo que hace bromas al serio en el que se había convertido, ese papel era para Theo, aunque si lo pensaba, últimamente parecía él el serio y Theo el humorista, era obvio que el mal humor se le iba de las manos.
-Hey pecosa ¿Por qué tu adorado trío no ha venido este año?
-¿Por qué tu príncipe serpiente no ha venido este año?
-Bien jugado.
-Gracias, soy astuta aunque no lo creas.
-No estoy tan seguro de eso, de hecho creo que tu astucia y "valentía" se mezclan con la definición de estupidez, este año deberías ser menos gryffindor.
-Otra vez con eso. ¿Sabes algo importante? ¿Por qué no me lo dices de una vez?
-No seas tonta, no se más que tú, solo que este año es más peligroso y tu no estas bien parada en la situación, estas del lado equivocado.
-No me vengas a decir que tu estas del correcto porque eso es más falso que la materia nueva.
-Para que veas, esa es una de las pruebas de lo que digo.
-Al menos es solo teoría- dijo Ginny más pensativa.
-Por ahora si.
En ese momento ambos cortaron su respiración abruptamente y ella soltó un resuello. Mientras estaban caminando por los pasillos habían ido distraídos y no vieron el pequeño bulto en el suelo hasta que casi lo pisaron. Realmente parecía una película de terror muggle, el bulto estaba en el suelo y casi en completa oscuridad.
Ginny, que al soltar el resuello había tomado el brazo de Blaise con fuerza, casi clavandole las uñas, luego de hacer acopio de su valor lo soltó y se acercó al bulto, cuando estuvo lo suficientemente cerca notó que era en realidad un niño hecho una bola y llorando.
Ella se abalanzó sobre el pequeño y lo abrazó.
-¿Qué sucede mi amor? ¿Estás bien? ¿Cómo te llamas? ¿Por qué lloras?
A Blaise se le embargó el corazón de ternura, al verla ahí en cuclillas con la cabellera rozando el suelo pero sin que le importe, abrazando y consolando a un niño que seguro era de primero.
-Extraño a mi mamá- dijo el niño entre los hipidos que causa el llanto- y perdí su foto, la que me dio ayer para que no la extrañe.
-Oh pequeño, siempre hay solución ¿verdad Zabini? Quita esa cara de bobo y ver a ayudarme.
Eso sacó a Blaise de su estupor y se incluyó en la conversación.
-Claro, podemos enviarle una lechuza pidiendo una foto nueva.
-Eso puede hacerse?- preguntó el niño.
-Claro- contestó Ginny- ahora limpia esas lágrimas y dime como te llamas.
-Soy Liam Moastell
-Muy bien Liam levantate, yo soy Blaise y ella es Ginebra, vamos a dormir y mañana la enviamos, ¿cuál es tu casa?
-Ravenclaw, pero por favor Blaise, hagámoslo ahora- dijo con sus ojitos llorosos.
-Eres un insensible Zabini!! Yo lo acompañare si tu no quieres ir con nosotros- dijo mirándolo mal y aún abrazando a Liam como si lo protegiera de él.
-Entonces vamos- dijo Blaise con tono cansado, al fin y al cabo esos dos en el suelo lo habian enternecido, lo habían hecho sentir que necesitaban de su protección...
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Un Amor Incondicional
FanfictionUn amor incondicional es la historia de una guerra que se extendió más de lo que esperaban y dos personas que se enamoraron en el camino. Cuánto estás dispuesto a hacer por amor? Te sacrificarías? Sacrificarías tus creencias? O sacrificarías tu amor...