Bang vs Zelo

Capitulo 11: Stay with me

La falta de aire los obligó a separarse por fin las neuronas de Bang lograron hacer conexión por lo que lanzó al menor lejos, era seis casi siete años mayor que él, era su alumno, esos besos eran ilegales y tenía la posibilidad de ir a parar a prisión, la madre de Jun lo acusaría de corrupción de menores o pedofilia, sus sueños de tener una beca y viajar por Europa se derrumbaba sin poder hacer nada, sus ojos se cruzaron con esas orbes cafés, esa dulce mirada estaba borrosa simulando querer llorar, llevó los dedos a su cabello para despeinarse "¿En qué diablos estoy pensando? Es un niño, un bebé que quiero cuidar ¿pero por qué no puedo detener el latido de mi pecho? ¿Qué diablos pasa conmigo? " Jun observa como el pelinegro se sumerge en un mar de emociones confusas que causan que su rostro se contraiga dudoso, como si despertara de un sueño y se diera cuenta que ha cometido la peor equivocación.

—Me gustas, te quiero, estoy enamorado de ti.— Gritó tratando de calmar los espasmos que recorrían su espalda, no había vuelta hacia atrás, cuando se toma un camino se debe asumir las consecuencias de nuestra decisión Jun no podía retroceder. —No quiero ser tu amigo, ni tu aprendiz, ni tu alumno, en caso de que no correspondas a mis sentimientos no quiero volver hablar contigo. —El tono de voz descendió, su mirada se clavó en la arena.— No puedo estar a tu lado con todos estos sentimientos ahogándome.

Bang se encontró entre la espada y la pared, debía elegir entre una relación por la cual podía ir a parar a la cárcel o dejar de tratar al menor, jaloneo cada hebra de su cabello con desesperación no podía asegurar que estaba enamorado de Jun pero tampoco le era indiferente, los celos, las ganas de pasar el tiempo con él, la terrible atracción que sentía por su piel blanca no eran normales, dio un paso hacia adelante dudoso de lo que debía contestar era como estar frente a la decisión de su vida, dar un salto de fe a lo desconocido que solo tal vez lo lleve al abismo o lo embarque al camino correcto, sus manos se abrazaron a esos hombros, a ese cuello para jalarlo y besarlo, sus labios acariciaron esos rosados que temblaban por el contacto, su lengua se deslizó a esa cavidad ya conocida, sabia a miel, a vainilla, a dulce, a gloria, Jun se aferró a esa espalda arañando la prenda clavó sus uñas deseoso de un contacto más profundo.

—No quiero engañarte, no quiero mentirte lo prometí antes y quiero cumplirlo, no estoy seguro de lo que siento por ti.— Susurró mordisqueando el labio inferior del pelirrosa.— Pero no me agrada la segunda opción, no quiero dejarte ir .— Sus manos se deslizaron por ese blanco cuello, acariciando esa aterciopelada piel.— Si para no poderte debo amarte creo que puedo aceptar el reto pero debes tener paciencia, ser mi pareja oficialmente no es un trabajo sencillo.

Aquella confesión traía un poco de paz al menor quien tenía en claro que Bang no era bueno descifrando lo que sentía, le daría el tiempo que necesitaba para descubrir que ya estaba enamorado de él, se aferró más a ese cuerpo comenzando a besarlo por las mejillas nunca antes había tenido una pareja pero claramente haría lo que le plazca con el mayor debido a que con esa confesión Guk le demostraba lo necesaria que era su presencia, YongGuk al verse lleno de besos trato de alejarse un poco pero en medio de la huida sus piernas se doblaron causando que cayeran en la arena, los dos soltaron una carcajada para dejarse caer completamente, miraron el cielo, el ruido era mínimo solo las olas golpeando ligeramente la orilla, Jun tenía las mejillas rojas, el corazón de Bang latía como si estuviera apunto de escapar de su pecho se incorporó un poco para girar en dirección de su ahora pareja, se agacho para volver a besarlo.

—Creo que esto es lo que más me a gustar de tenerte como novio.— Susurró deslizando su pulgar por esa blanca piel mientras se dejaba caer un poco sobre el menor aprisionando en los granos de arena, una de sus piernas se acomodó entre las del menor.— Vamos a dar la vuelta.