CAPÍTULO 13
[NARRA NIALL]
No sabía que hacer conmigo mismo. Me sentía mal por haber besado a ___, aunque no entendía porque ella salió corriendo. Había sentido cosas con el beso que no sentía con otras chicas. Intentaba hablar con ella para pedirle disculpas, pero se negaba a contestarme.
Bajé las escaleras de mi casa hasta el garaje donde se encontraba mi moto. Justin y yo no teníamos ganas de ir al instituto, por lo que no fuimos. Lo encontré arreglando la suya, y estaba dispuesto a ayudarlo cuando mi teléfono vibró.
De: ___
Sé dónde vives, me lo ha dicho Chaz. Voy para allá.
Fruncí el ceño ante el mensaje, respondiéndole que la esperaba aquí. Justin se dio cuenta de que estaba extrañado, por lo que decidió preguntarme sobre la situación.
-¿Ha pasado algo, bro? -preguntó Justin volviendo su cabeza para mirarme.
-___ dice que viene para acá, no sé por qué. -comenté haciendo una mueca con mis labios.
-Vendrá a contarte algún cotilleo, ya verás. Todas las chicas hacen eso.
Justin rió por lo que dijo, en cambio yo no lo hice.
-No creo que sea por eso.
Fue a responderme cuando el timbre de la casa sonó. Me dirigí a la puerta, y la abrí. Me encontré a ___ cabizbaja sollozando.
-Somers, ¿ha pasado al-
-¿¡Por qué no me habías dicho nada!? -gritó mientras lloraba.
[NARRA ___]
Me sentía extraña. No salía de casa y me pasaba todas las noches llorando. Mi madre no se daba cuenta, sólo se preocupaba en la tienda en la que ella trabajaba, y el único consuelo que tenía era el de Skylar y Ashley. No le dije a Billy sobre el beso que tuve con Niall y no pensaba comentarle nada sobre ese tema. Me daba miedo su reacción ya que sabía que ellos dos no se llevaban bien. Chaz no sabía ni siquiera que tenía novio, e imagino que no le iba a interesar mi vida.
Me dirigí al instituto mientras escuchaba Stay de Rihanna. Les comuniqué a Skylar y a Ashley que no me esperaran después del instituto ya que saldría a comer con Billy. No había rastro de Niall ni de Justin, su 'amigo inseparable'.
Terminaron las clases y fui a la salida a buscar a mi novio. Lo vi en una esquina hablando por teléfono, mientras el asentía a la llamada. Cuando me vio acercarme a él, colgó el teléfono y me dedicó una sonrisa que parecía un poco fingida. Lo saludé, e iba a cogerlo de la mano cuando me detuvo.
-___, cariño, no puedo ir a comer, tengo que ir a hacer unas cosas.
Me quedé mirándolo por lo que parecían siglos, asimilando lo que me acababa de decir. Después de que siempre me evitaba porque tenía que ir a hacer 'cosas', tiene el descaro de decirme que otra vez tiene que dejarme plantada por culpa de esa estúpidas cosas que tenía que hacer.
-¿Sabes, Billy? Estoy de harta de siempre tener que escuchar las mismas tonterías de siempre. Estoy harta de que siempre me estés ocultando cosas. -suspiré- Estoy harta de que tenga que aguantar tus estúpidas excusas y, ¿sabes lo que hago? Me lo trago todo y lo dejo pasar como si no hubiera sucedido nada. Siento que me estás ocultando algo, y en las relaciones supuestamente no deben de haber secretos. Si nunca tienes tiempo de estar conmigo, ¿por qué sigues siendo mi novio? Porque yo si te quiero, pero parece que tú a mi no.
Intenté aguantarme las lágrimas que amenazaban con salir, pero no lloré. Soy lo suficientemente fuerte como para no hacerlo.
-Me voy. -respondió sin más y empezó a irse.
Pero esta vez no lo iba a dejar así. Empecé a seguirlo sin que se diera cuenta. Giró su cabeza, pero me escondí detrás de un contenedor de basura que había allí sin que me viera. Salí de mi escondite mientras volvía a seguirlo.
Después de un tiempo llegó a un sitio dónde estaban varios chicos. Pude distinguir a Dylan, el que me besó en la carrera de motos cuando fui con Niall.
Billy se acercó a ellos, y me acerqué un poco más intentando escuchar su conversación.
-Man, ¿te ha dicho algo más la tía esa?
-Qué va, he tenido que decirle que tenía que hacer algunas cosas. La dejé allí plantada. Es una gilipollas. Me sorprende que todavía no se haya dado cuenta.
Se escucharon unas risas de fondo, mientras una lágrima se escapaba por mi mejilla. No podía creer que Billy estuviera diciendo eso. Me sentía sucia, utilizada, sabiendo que todo este tiempo me había estado engañando. Me quedé allí un rato más para escucharlos.
-Tío, si no te dice nada más sobre Niall y su grupo de mierda, déjala. Esa puta no merece la pena.
Lloré desconsoladamente queriendo imaginar que Billy no me estaba haciendo eso. No confiaba en nadie, para qué, si al final todo el mundo acaba engañándome. Salí corriendo alejándome de alli. Ahora todo lo que me dijo Niall tenía sentido para mi.
*Flashback*
-Tienes que romper con él.
-No lo voy a hacer.
-Sólo lo digo por tu bien. -se rascó la nuca notablemente nervioso.
-¿Por qué? -pregunté dudosa.
-Porque él no es quien tu realmente crees.
*Fin del flashback*
Me dirigí a casa de Niall mientras lloraba. Le comuniqué que me dirigía allí. La cabeza me dolía de tanto llorar. Cogí un pañuelo de mi mochila para secarme las lágrimas, aunque fue para nada. No podía dejar de llorar. Sentía como si nunca fuese a encontrar a una persona que me quisiera de verdad. Llegué a su casa y toqué el timbre. Intentó hablarme pero le corté repentinamente.
-¿¡Por qué no me habías dicho nada!? -grité mientras lloraba. Me dejó entrar en su casa mientras yo no paraba de sollozar.
-No sé de qué estas hablando, Somers.
-Tú lo sabes perfectamente. -fui a seguir hablando, pero un chico intervino entre los dos. Justin.
-Eh, ¿qué está pasando aquí? -preguntó refiriéndose a como estaba.
-Justin, vete. -dijo Niall con voz dura.
Justin levantó sus manos en señal de disculpa y se marchó.
-Tú sabías que Billy me estaba engañando, pero lo único que haces es callarte sin decirme nada. -sollocé intentando mantener la compostura.
-No te dije nada porque no quería hacerte daño. -me quedé helada por lo que acababa de decir- Se te veía muy feliz con aquel chico, y no te culpo, eres libre de estar con quien quieras. Te advertí de cortaras con él, pero no me hiciste caso. No es mi culpa de que hayas acabado así, -me señaló- así que no vengas culpándome, porque yo no te he hecho nada.
Se quedó allí mirándome. Había terminado de llorar, pero había empezado de nuevo después de lo que me había dicho. Sólo quería salir corriendo de allí, y desear que todo fuera una pesadilla.
-Te odio Niall, te odio.