Capitulo 27

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La semana habia sido demasiado difícil para todos, tuvieron que inducir en un coma a Marco, mi padre ya había despertado y me culpo por su accidente pues iban conduciendo mientras discutían por mi boda. Tenia meses comprometida mas no le había dicho a mi padre, tenia la esperanza de que no se enterara pues sinceramente creo que no se merecía llevarme al altar oh tan siquiera estar presente en la recepción.

Me mostré diferente con el, pues sin embargo, yo no lo abandone. Nuestro cumpleaños era mañana y la mejor sorpresa era que tal vez despertarían a Marco justo para celebrar nuestros dulces 22.

—¿Dormiste bien?—. Pregunto Ángel mientras me tomaba de los hombros. Había pasado la noche cuidando de Marco.

—Bien. Eso creo, no dormi mucho.

—Si quieres vamos a casa para que te asees un poco y duermas. Mañana sera su cumpleaños y un dia largo.

—No quiero celebrar, la pasare en el hospital amor. Le avisare a Jay para que venga a cuidarlo.

Llame a Jay y no tardo mucho en contestar, dijo que en un momento subia. Nos dirigimos al coche de Ángel con rapidez pues definitivamente se notaba cuanto necesitaba dormir. Apenas toque el sillon del coche y cai dormida en un sueño profundo, lo ultimo que senti era a mi prometido colocandome el cinturon y besando mi frente mientras me susurraba algo que no pude entender.

•••

Desperte de golpe cuando escuche un monton de ambulancias acompañadas de gritos de muchas personas y sintiendo un fuerte dolor tanto en el cuello como en el pecho, intente moverme pero me resultaba doloroso. Toque mi cabeza, me dolio muchisimo, cuando observe mi mano pude apeciar un color escarlata sobre mis dedos. Sangre. ¿Que demonios habia pasado?.

Imagenes llegaron a mi cabeza de un camion en sentido contrario con un conductor dormitando. Imagenes de un Ángel desesperado intentando esquivarlo pero fallando. Eso me lo recordo. ¡Ángel!

Como pude voltee mis ojos, estaba en una posicion extraña, su cuerpo dependía del cinturon de seguridad. Me deshice del mio para poder acercame a él; hice un total caso omiso del fuerte dolor que sentia en el pecho, una franja de color morado alcance a ver a travez de mi escote.

—¿Ángel? ¿Amor?—. No respondia. Lo acomode lentamente en el sillón, quize encontrar el origen de mi herida en la cabeza. Habia muchos vidrios vidrios rotos.

Pude ver como unas personas con traje de paramédicos se acercaban al coche, intente localizar mi celular. Estaba a mis pies y como pude lo tome.

—Ayuda...— dije en un susurro a las personas.

La primera puerta en abrir fue la de Ángel pues el no se movía. De pronto un profundo miedo me inundo, temía por la vida del amor de mi vida. Como pude abrí la puerta de mi lado, intente moverme pero todo me dolía y al parecer tenia roto el tobillo.

Los paramédicos me ayudaron a salir y me colocaron en una camilla. El frente del coche quedó completamente destrozado. Pude ver como subían a Ángel a la ambulancia con demasiada rapidez.

—¡Angel!— grite desesperada .

—Tranquila... El estará bien, lo revisaron y tiene signos vitales.— escuchar que su corazón latía fue una gran cantidad de anestesia para mi alma.

—Ahora, necesito que me diga si recuerda el nombre de ambos— apenas y escuche esas palabras asentí.

—¿Puede decírmelos?— mientras esta chica me hacia preguntas, sus compañeros me subían a la ambulancia y atendían mis heridas.

—Mi nombre es Vanessa Elizabeth James y el es mi prometido Ángel Smith— la chica escribía y escribía rápidamente en unas hojas sobre una tabla.

Por Amor || COMPLETA ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora