2.El hospital

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Capítulo 2:

Shawn:

Tengo una pregunta importante ¿Creen en la misericordia? Voy a empezar diciendo que estaba escuchando "Without Me" de Eminen, rap a las 8 de la mañana, sin duda no iba a ser un día bueno. Odio el rap.

06 de diciembre del 2016, otoño en Manhattan, la época del año que más odio, no entiendo porque a la gente le gusta el sonido que producen las hojas al pisarlas, es tan jodidamente molestoso.

Recibí una llamada y supe quién era sin ver su nombre y su foto en la pantalla

"¿Qué pasa?"
"Buenos días para ti también". —dijo el estúpido y pude escucharlo sonreír
"¿Qué quieres idiota?". —Dije y esa música ya me estaba taladrando los oídos
"¿Estás escuchando a Eminem?" —Pregunto muy confundido James
"No se quien puso la can..." —no termine la frase

Joder, recordé la noche anterior en un segundo, estaba en un bar, bebiendo con unos amigos, había una rubia, con unas piernas demasiado largas y lindas como para no llevarla a mi departamento.

—James interrumpió mis recuerdos— "así que, anoche eeh" —no lo vi, pero sabía que tenía una sonrisa ladeada.

Y es que no era necesario verlo, me sabía sus gestos, a veces sabía lo que iba a decir incluso antes de que él lo pensará, así era nuestra amistad, éramos mucho más que mejores amigos, éramos hermanos, podría haber dado la vida por él, incluso ya lo había hecho un par de veces así como el también habría dado su vida por mí.

"¿Estás listo? te veo en 30 minutos en tu cafetería favorita" —dijo y me colgó sin dejarme hablar—

Escuche cómo caía el agua en el baño, la chica era muy linda, pero escuchaba música espantosa, así que en ese momento se me fue todo el interés en ella. Me volví a acostar y pasaron como 5 minutos cuando la chica <<de la cual no recordaba su nombre>> salió envuelta en una toalla blanca

—Cariño despertaste. —dijo mientras se peinaba en cabello con los dedos
—Si. —dije algo distraído tratando de recordar su nombre
—y ¿en dónde vamos a desayunar? ¿Aquí? O ¿quieres que vayamos a un restaurante de comida japo...—la interrumpí
—la verdad es que tengo muchas cosas que hacer, pero... te llamo después ¿no?.—Estaba por entrar a bañarme cuando me tomo del brazo
—conozco a los idiotas como tú, no vas a llamarme y estoy segura que no recuerdas ni mi nombre
—entonces ¿qué estás esperando?
Para cuando acabe la frase la chica ya se había puesto toda su ropa, cuando me di la vuelta solo pude escuchar el portazo que dio al salir, podría haberme sentido mal por ella pero... no lo hice.

A las 8:35 estaba ya estaba en mi <<cadillac cts>> rumbo a la cafetería "D'lui" mi cafetería favorita por mucho, servían los lattes y las donas de chocolate más ricos del mundo.
Estaba buscando un lugar cuando cuándo recibí una llamada, estaba por contestar pero solo pude escuchar a mucha gente gritar "¡CUIDADO!" Y a una chica justo enfrente de mi carro justo antes de frenar

Al bajar ya había varias personas alrededor de la chica y del carro. Ahí estaba la chica, tendida en el suelo, por más estúpido que suene estaba buscando indicios de sangre, porque yo sé cuándo una persona está herida, lo he visto más veces en la vida de lo que querría.

Me acerqué un poco a ella, solo podía escuchar a la gente decir "llamen a la ambulancia" "llamen a la policía" pero toda mi atención estaba concentrada en ella, pude escuchar a James justo detrás de mi

—Súbela al auto
— ¿crees que sea conveniente moverla?
Iba a hacerlo cuando un tipo alto se acercó a ella con una expresión demasiado preocupada

—cariño ¿qué paso? —me miró como queriendo matarme. Seguro era su novio—¿qué esperas idiota? Vamos a llevarla al hospital más cercano. —la cargo con delicadeza, no quería hacerle daño, la veía como si fuera algo importante en su vida, sin duda era su novio

La subió en la parte trasera del carro, puso la cabeza de la chica en sus piernas, James nos seguiría en su carro hasta el hospital más cercano, estaba nervioso, cosas peores había hecho antes y jamás había conducido con las manos tan temblorosas, en menos de 5 minutos estábamos en la puerta del hospital.

Dos paramédicos ya nos estaban esperando ahí, James se había encargado de todo, los del hospital ya nos conocían, éramos clientes frecuentes de ahí.

La metieron a un cuarto para valorarla, su novio fue detrás de ella y no se le despegó ni un solo segundo. Pasaron más de 15 minutos cuando salió el doctor Sáez

Sonrío al verme —Shawn, hace tiempo que no te veía
—y eso es bueno ¿no?
—sabes a que me refiero muchacho. —seguía sonriendo
—¿cómo está la chica?
—Excelente, le di algunos analgésicos para el dolor de cabeza, no le tocaste ni un pelo, solo estaba desmayada por el susto

Pude sentir como todo mi cuerpo se relajó en un segundo "como si no lo hubieras hecho ya" -pensé-

—Voy a verla y a pagar
—suerte chico, y ya no te metas en problemas
Sonreí irónicamente —como si eso fuera posible. —entré al cuarto

—Eres un imbécil. —reclamo

Y eso fue lo único que escuche después de mirarla a los ojos.

Robbers S.MDonde viven las historias. Descúbrelo ahora