Robbers S.M

5.El reencuentro

Capítulo 5

Shawn:

Habían pasado exactamente 2 semanas desde que no me paraba por la escuela, no me malinterpreten, me gustaba estudiar, era excelente en todas las materias, por eso mismo me daba el lujo faltar.

Eran las 8:30 cuando decidí que era tiempo de ir, sentía que hoy pasaría algo diferente... y no me equivoque. Al entrar por la puerta de cristal, aun con mis lentes de sol pude escuchar a todo el mundo hablando a mi alrededor, no fue hasta que llegue al casillero de James que me entere.

―Shawn―dijo y me dio un golpe en el hombro a modo de saludo.

― ¿Qué pasa? ¿Por qué todas las mujeres están como locas?

―Están celosas seguro, todos hablan de una nueva que dicen que está muy buena.

― ¿Por eso andan como locas conspiradoras?

―Ya sabes cómo son las mujeres

Se acercó un amigo nuestro, ya que su casillero estaba justo alado del nuestro

―Carlos―lo saludo James

― ¿YA VIERON A LA NUEVA? Esta súper buena, los del equipo de futbol ya hicieron la apuesta

― ¿Ni un día y ya hicieron la apuesta? Jodidos enfermos ―dije sonriendo de lado

―Es una tradición, creo que esta vez entrare―dijo James

―Jodido enfermo―le dije a James y empezamos a golpearnos jugando.

La apuesta es una "tradición" en el Central siempre que hay una chica nueva, todos los jugadores de futbol y los demás alumnos que sientan que tienen la oportunidad de ganar apuestan 100 dólares cada uno y el que logre llevarse a la chica a la cama antes de la semana de estancia en la escuela gana.

Algunas veces lo hice y gane, esta vez no quería participar ni de chiste.

―Hola cariño― dijo una chica acercándose a mí y dándome un beso en los labios

Melanie era la típica chica hermosa, pero con cabeza hueca, no entendía las indirectas cuando le decía que ya no la quería más a mi lado.

― Mel...―me aparte un poco

― ¿Hoy puedo pasarme por tu departamento? ―dijo guiñándome un ojo

―Voy a estar muy ocupado, de echo... tengo que irme, los veo luego chicos, bye Mel―dije alejándome a toda prisa, solo escuche risas de los chicos a mis espaldas.

No sé si iba demasiado rápido para que Melanie no me siguiera que ni siquiera me fije y cuando vi ya había chocado con alguien y le tiré los 20 libros que parecía que llevaba en la mano

―Serás idiota―dijo la chica recogiendo los libros

―Lo siento venia...―La vi

Ella alzo la mirada me vio, abrió mucho los ojos y si estaba enojada, ahora lo estaba más

―Distraído, como siempre ¿no? Es que ¿es una costumbre tuya ir por ahí atropellando gente? O ¿es solo conmigo?

―Es solo con personas feas―Sonreí

―Idiota―se incorporo―Gracias por ayudarme a recoger los libros que me tiraste eeh―dijo sarcásticamente y se echó a caminar.

Me quede mirando cómo se le movía el cabello cuando caminaba... cuando vi que se detuvo y volteo a mirarme

―de hecho tengo una pregunta―Regreso un poco apenada― ¿Sabes dónde queda el salón de literatura?

―Si quieres te llevo ―por alguna extraña razón tenía la necesidad de pasar más tiempo con ella. ―Me llamo Shawn por cierto

―Soy Lya―Sonreí―¿no tienes clases?

―Me queda de paso tu salón― empezamos a caminar.

Mientras íbamos caminando no hablamos, solo podía observar como las chicas cuchicheaban a su paso, como muchos chicos se la comían con la mirada, esperando ganar esa estúpida apuesta.

―Entonces... tu eres la nueva ―dije porque me estaba empezando a poner incomodo el pensar en ella con alguno de los chicos del fut

―Eso parece... me dieron una beca, tenía que aprovecharla, el Central es de las mejores escuelas.

―Si, es una de las mejores... ―quería seguir hablando con ella, pero me estaba sonando el celular, cuando vi la llamada sabía que tenía que contestarla. ―aquí está tu salón, adiós ―me fui a un lugar donde nadie pudiera oírme.

"Ornan, te escucho" ―dije a quien estaba llamando

"La pieza que necesitamos está en el barco, el cargamento llega hoy por la noche"

"¿A qué hora?"

"Entre las 12 y las 2 am"

"¿Esta todo listo?"

"Todo listo Mendes" ―pude sentir como sonreía al otro lado del auricular

"Perfecto, cuando la tenga las aviso" ―colgué.

Y aquí vamos. Fui directo a la clase de biología que quedaba al otro lado del campus.