Epílogo

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Tres años después:

Habíamos recorrido un largo camino en todo este tiempo que había pasado, estaba sentada en la banca junto al lago que años atrás Shawn me regalo, no era mi casa, era nuestra y eso me hizo sonreír, eran sábado por la tarde y yo me senté a leer un libro de educación para menores.

Shawn y yo íbamos a celebrar hoy dos años de matrimonio, no podía creer lo grandiosa que era la vida ahora.

Nuestra boda fue algo muy sencillo porque así lo quisimos los dos, nos casamos en la playa, estuvieron las personas más especiales para nosotros, que no eran muchas.

Recordé la mirada de Shawn cuando me vio de blanco caminando hasta él en el altar, transmitía amor y ternura, vi como sus ojos se cristalizaron y embozo la sonrisa más linda que alguien jamás me haya dedicado

―Eres la mujer más hermosa que he conocido en la vida y hoy serás mía por completo―puntualizo

Había sido suya desde el momento en que lo vi, solo que me di cuenta un poco tarde

―Y tú eres el hombre más guapo que he conocido y él más tonto

Me mostró los dientes en una sonrisa y me tomo la mano

―Para siempre Lya Beckett

―Para siempre Shawn Mendes

Alguien me cubrió los ojos sacándome de mi recuerdo, un recuerdo que me hacia sonreír siempre.

―Hola hermosa

―Hola feo―sonreí

Me dio un beso en la mejilla y se dio la vuelta para sentarse a un lado de mí

―¿Trabajando? ¿En sábado? ―frunció el ceño

―Una maestra nunca tiene descanso ―dije con algo de orgullo

―Eres tan dedicada en esto―Shawn miro el libro que tenia en la mano ―por eso te graduaste con honores

―Me encanta

Recordé el día de mi graduación

―¿Estas nerviosa? ―Preguntó Ian a mi lado

Tenia puesta la toga y el birrete negros al igual que él, sus ojos se veian más azules que nunca, se le veía feliz y eso hizo que me calmara un poco

―No me quiero tropezar enfrente de todas las personas

―Eso no pasará Lya, tranquila ―me miro por un segundo―Es por Shawn ¿verdad?

―Pensé que iba a estar el día de mi graduación

―No es su culpa que haya tenido que irse por asuntos de trabajo y ahora no pueda salir de su hotel por la fuerte tormenta que hay en Seattle

―Yo solo...

―Ven aquí―Mi amigo me abrazo y me sentí un poco mejor

―También esperaba que mi madre y mis hermanos estuvieran aquí

―Con esa gripe que tiene Annie... pero me tienes a mi aquí

―Tu estas porque también te gradúas

―Estaría aunque no lo hiciera

Era verdad, Ian siempre había estado en mis peores y mejores momentos.

Ian fue a sentarse con su grupo y yo con el mio, estábamos en el gran jardín de la escuela.

La ceremonia transcurrió lenta, vi como uno a uno iban subiendo los escalones para tomar su diploma, cuando escuche que el presentador dijo mi nombre me puse nerviosa, me pare demasiado rápido y estaba a punto de subir los pequeños escalones al estrado cuando una ronda de aplausos, gritos y silbidos llamo mi atención

Robbers S.MDonde viven las historias. Descúbrelo ahora