painless ー hunhan

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1 de Marzo, 1988.

Querido SeHun.

¡Buenos días! Sé que quizás leas esto en un momento del día completamente distinto, pero imagina que es de mañana. Así puedes sentir lo que yo; sonido de pájaros volando en el cielo, temperatura tibia en tu piel, anhelos de reencontrarnos.

He estado hablando mucho con el doctor. Sobre todo, hablamos de mi pasado en China. Me pregunta por mis amigos, por mi familia. Creo que sospecha que no le cuento toda la verdad, pero tú sabes bien por qué no lo hago. Hay cosas tristes que no quiero sacar a la luz.

Pero también hay cosas felices. Como mi primer viaje a Seúl. Con eso, pienso en el día en que te conocí.

Le he relatado nuestra historia muchas veces. Cuando te vi en esa cafetería rebosante de gente, cuando la dependienta no me entendía debido a mi limitado conocimiento del idioma, y cuando te acercaste a ayudarme.

He pasado tanto tiempo enamorado de ti, que ya es un sentimiento casi hogareño. Conozco cómo es llenarme de emoción cada vez que recibo noticias tuyas de parte de Chanyeol, cómo es despertarme con las mejillas ardiendo porque sé que soñé algo indebido contigo. Ya no sé qué hacer con esto que tengo en el pecho, si no es escribírtelo una vez al mes. Me llena de alegría el solo hecho de pensar en que abres mis cartas y sonríes porque sabes que llenas mis días y mis noches, que pienso en ti eternamente y que todo lo que he construido te lo debo a ti.

Espero que estés feliz, porque entonces puedo estar tranquilo.

Te ama,

LuHan.

( El doctor de LuHan niega la cabeza claramente molesto.

— Lo que estás haciendo no está bien. Sé que es tu amigo, pero no ayudas, ChanYeol.

— Eso ya lo sé... Sólo necesito que tenga algo en lo que creer. Ayúdame en eso al menos, KyungSoo.

Ambos se quedan en silencio. )