Eres una idiota, Isabella.

3.1K 164 27
                                    

Bella.

No sabía cómo sentirme, no sabía si llorar o reír o ambas... yo sé que en mi vida es complicada la palabra "imposible" es decir, yo no la usaba muy seguido que digamos pero por ley, aquí, en China, en el mundo humano y el vampiro, no podía tener hijos con un vampiro, por lo menos hasta donde yo tenía entendido...
¿Que voy a hacer? ¿Que vamos a hacer? Edward metía las cosas en las maletas a velocidad vampírica y yo solo me quede sentada en la cama, no se que hacer, jamás me imaginé que esto pudiera pasar.
La palabra "cosa" que Edward había dicho hace unos momentos resonaba en mi cabeza... yo también estaba asustada, pero no era una cosa, no quiero que me la saquen, es mío, y de Edward, merece una oportunidad.

Mi bebe merece vivir.

Camila

Bien Cam, esto no puede ser tan difícil, solo tienes que sonreír y ya.
No pienses en el vestido ceremonial que llevas, ni en las plumas en tu cabeza ni en lo ridículo que te sientes, no pienses en que pareces una piel roja sexy y rara, ah y no pienses que tras esa puerta está toda la manada con los ojos puestos en la entrada esperando a que tú salgas...

Chicas, un consejo, jamás se dejen influenciar por ojos de perrito mojado, yo acabe con un penacho de plumas y unos lobos esperándome.

Uno, respira... dos toca el pomo de la puerta y tres... sal.

Uno, dos... ¡tres!

Mala idea, parece que la torpeza era de familia, yo que no quería llamar tanto la atención dentro de lo que era posible, me caí por el pórtico de la casa de Emily, hubiera terminado en el lodo de no ser por los brazos de Embry.

-Cálmate, Cami, aún no hemos empezado- se burlo
-Cállate- le dije enojada

Toda la manda estaba ahí, todos vestidos con extrañas prendas de colores claros y sonriendo mucho

-Camila, es un placer para nosotros estar hoy en el día de su eterna unión- me sonrió Billy
-Ah, si, si, gracias, creo...
-Tranquila- me susurró Embry al oído- Todo va a estar bien, verás que hasta vas a divertirte- me dijo contento

Le mostré una extraña mueca que pretendía ser una sonrisa.

-A ver, vamos a empezar- dijo Billy juntando las manos- Tendremos que iniciar con la ceremonia del regalo, el intercambiar un obsequio habla del amor que sienten las personas entre si, del dar y de también recibir, dejemos que los novios intercambien sus objetos- sonrió

¿¡Que!? ¿¿QUE QUE?? ¿Cómo lo había olvidado? Sentí que se me fue el alma a los pies, ¿que podía darle? ¿Que podía darle en este momento? Dios, Dios... Embry salió hacia dónde se había cambiado con una sonrisa y yo hice lo mismo, corrí como bala.

Oh, Jesús... ¿por que ahora? ¿Por qué en este momento? ¿Por qué mi distracción no pudo venir en otro momento? A ver... parece que el cielo iluminó un rincón de la habitación donde vi un peluche viejo, era un oso de peluche con una camisa que decía "Recuerdos de tu playa favorita", el oso tenía en la mano una cámara y unos lentes, no era mi favorito pero era el que me había traído para recordar mi casa, hoy me salvaría de hacer la absoluta vergüenza, me apresuré a llegar donde antes y vi a Embry con una bonita cadena y yo con mi oso de peluche sucio, trágame tierra.

-Quiero darte esto- me tendió la cadenita- Era de... de mi mamá, me dijo que el que es mi padre se la había dado hace tiempo, como promesa de que volvería y no fue así- se le aguaron los ojos- Pero yo voy a cambiar esa historia, Cami. Yo te lo doy como promesa de que nunca me iré.
-Quiero darte esto- le tendí mi osito- Se que no es mucho, pero me recuerda a casa, me recuerda que alguna vez tuve un hogar, quiero dártelo porque quiero que a partir de hoy y para siempre, tú seas mi nuevo hogar, a donde vayas tú, iré yo- le sonreí sinceramente

El contento agarro mi osito, nos dimos un pequeño beso, de oyeron muchos aplausos y algunos llantos de felicidad, había olvidado por completo que la mandada entera estaba aquí.

-Ha sido una de las más bellas ceremonias a las que he asistido- oí que decían
-Sin duda, continuemos- oí la voz de Billy 

Las horas pasaron, la verdad no fue tan difícil como creí, conocí a toda la mandada, Embry se convirtió en un lobo, me monte sobre el y corrimos por el bosque y finalmente cuando me puse la cadena de su mamá y nos besamos al parecer estábamos más unidos, era oficial, estábamos "casados", sorprendentemente no me sentí mal, incluso me sentí más completa, justo cuando todos nos íbamos recibí una llamada.

"Bella Cullen"

-¿Si?- conteste
-Cam, soy yo... tengo que decirte algo
-Si ya sé que eres tú lo pone en mi celular- reí- ¿Que es lo que sucede, prima?
-Estoy embarazada- escupió
-Ya en serio, estoy ocupada- le dije
-Cam, hablo en serio- volvió a decirme
-Bella, no estoy para juegos ahorita- conteste cansada
-No estoy mintiendo- borbotó llorando
-Mierda, eres una idiota Isabella- tartamudee nerviosa- ¿Donde estás?
-Estoy en casa de Edward- me dijo rápidamente
-Estaremos allá en unos minutos- respondí
-¿Estaremos?- me preguntó confundida
-Sí, no iré a ningún lado sin mi esposo- le dije segura mirando a Embry
-No sé si lo dejen entran- murmuró asustada
-No iré sin el, si no va el, no iré yo, decide tu, Isabella- le asegure dura

Oí que hablaba con alguien rápidamente, un par de gritos y volvió a ponerse en el teléfono

-Vengan- dijo al fin
-Eres una idiota... pero no puedo abandonarte, no ahora- murmuré algo desesperada
-Nunca lo harás- se que había sonreído

Colgué y mire a Embry.

-Bella está embarazada- le dije con lágrimas en mis ojos

El sabía que no estaba mintiendo, se puso casi verde.

-Iremos juntos, después avisaré a Sam- contestó

Huye del lobo, pequeña Caperucita.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora