No me hables, solo bésame.

Capítulo 6

Hoy en el instituto ha dado un giro de 180º, es increíble como las personas pueden cambiar tanto de un día para otro. Ayer me hicieron la vida imposible todas las chicas de mi clase, y sin embargo hoy, están más pendientes de llamar la atención de Eric que de joderme. Lo agradezco mucho la verdad, hoy voy a dar un buen respiro, voy a pasar desapercibida.

Eric se encuentra sentado al otro lado de donde estoy yo, charlando con Marga y compañía. No se de que hablarán pero me da un poco igual. Eric está distante conmigo, creo que está así desde ayer, desde que le dije que no quería nada con el. Se lo ha tomado en serio hoy no me ha saludado. Por una parte me alegro porque esas arpías no me dirijan la palabra, pero por otro lado me vuelvo a sentir sola en clase y eso no me gusta. ¿Qué haré mal? 

Veo que Eric, está marcando músculos para enseñárselo a las chicas, no puede ser más flipado, conmigo no era así. Me acuerdo cuando lo vi sin camiseta y con una toalla solo tiene un cuerpo de escándalo, al recordarlo sonrío y me estremezco un poco. 

En realidad, he hecho bien en rechazarlo me he dado cuenta que es como todos, si no consiguen lo que quieren te olvidan, como si fueras un trapo sucio. Menos mal que he cortado a tiempo, y no me ha dado tiempo a enamorarme. 

Toca el timbre para ir al recreo. Yo como siempre me dirijo a la cantina para comprar mi almuerzo y me siento en una mesa libre. Las arpías entran a la cantina con Eric, me miran todas con una mirada desafiante, y yo paso de ellas. Hasta que me busquen las cosquillas y ya explote, y se verá quien es de verdad Rocío cuando se cabrea.

Se sientan al lado de mi mesa, como les gusta picarme. Si en realidad no pueden vivir sin mi. 

Marga esta apunto de decirme algo, pero antes de que me diga nada hago el gesto con el dedo índice para que se calle. Se que lo que acabo de hacer, es un principio de una bronca. Me va a hablar otra vez, y yo me pongo los cascos para ignorarla totalmente. Uyy, se esta enfadando, que se joda.

Viene hacia a mi y me quita los cascos con violencia, ya está se va armar una buena. A mi a carácter no me gana nadie.

—¿Pero que coño haces estúpida? —dice muy pero que muy cabreada. 

Y yo sigo sin hacerle caso y me vuelvo a poner los cascos. Me encanta. Me río por dentro.

Eric no para de mirarme, pero no dice nada, no le dice nada a Marga para que se calle ya de una vez, sigue pasando de mi.

—Vamos a ver Rocío, que sea la última vez que me ignoras, ¿entendido? —dice cuando me quita los cascos por segunda vez.

Me río, me río y me río de nuevo.

—Marga, estate muy atenta a lo que te voy a decir porque no lo voy a repetir. Atenta eh, voy a hacer lo que quiera, cuando quiera y como quiera. Si te molesta, hay tienes la puerta. —Contesto y al final le pongo la sonrisa falsa.

Que a gusto me he quedado, esto es gloria. Intenta decirme algo, pero yo me pongo de nuevo los cascos. Eric se lo está pasando pipa, no para de reírse. 

Y por fin, se van menos Eric, que permanece sentado al lado de mi mesa.

—Eric, cariño vamos. —dice Marga al ver que no se mueve.

—Si, ahora os pillo. —dice Eric, sin dejar de mirarme.

Y Marga y sus amigas, se van un poco molestas porque Eric no ha querido ir con ellas.

Yo a Eric no lo miro, sigo escuchando mi música y comiéndome mi almuerzo tranquilamente. Me esta hablando, pero no lo escucho paso de él, no quiero saber nada de él.

Acto seguida me quita un casco suavemente, y a continuación me toca la cara. Yo se la aparto, y finalmente me dice.

—Lo siento.