Soy una montaña rusa de emociones. Me di cuenta cuando leí todo lo que vengo escribiendo.
Los días en los que estoy bien son pocos, pero creo que lentamente voy pensando las cosas para mejor.
Ahora estoy acostada, pensando en cosas que no me hacen bien, sé que la única forma de dejar de pensar en esto es escribiendo.
Hoy me siento un poco mal, quizás un poco más de lo que estoy cómoda en admitir.
Me pongo a pensar en lo difícil que va a ser encontrar a alguien para amar de forma plena, pura, sin mentiras.
Pienso en lo mucho que me va a costar confiar en un chico y simplemente no puedo evitar lagrimear un poco.
Un enfermo de la cabeza me cagó la vida, porque me vio con ojos de hombre siendo una niña. Aunque no llegó tan lejos como ese asqueroso hubiese querido, llegó lo suficiente para dejarme con miedo a las intenciones de los hombres.
Pienso en cuánto tiempo más me falta para que llegue esa persona indicada para mi y lloro aún más.
Todos mis referentes lo han pasado muy mal en el amor. Es difícil creer en algo que ahora para mi no existe. Es que lo pienso tanto que no es sano, pero es más fuerte que yo.
Por qué se aprovechan de la inocencia, la confianza, el cariño, el amor que una puede sentir.
¿Es que acaso no saben lo importante que son las palabras que salen de su boca? ¿no son conscientes de lo que una mirada de ustedes nos puede hacer sentir? ¿es también difícil para ustedes borrar besos y abrazos? ¿lo hacen a propósito? ¿los hombres ven a una chica y piensa en quitar toda la luz que una posee?
Porque justo ahora, en esta cama, con está ropa sucia, estas ojeras, el pelo mal atado y lágrimas corriendo en mi cara, justo así y ahora, no siento brillar.
Simplemente no puedo brillar, no hoy.
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Luz De Luna
Teen FictionA veces las cosas no salen como las esperas. A veces, aunque no parezca, es mejor que la vida te de lo que necesitas y no lo que quieres. A veces la luna brilla. A veces la luna cambia. A veces la luna no está. Así como no estás vos. Así...