Trato a palabra

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— Un simple beso era capaz de calmar a Myungsoo, lo sabía más que bien Sungyeol ¿Pero ¿qué pasará cuando eso no sea suficiente? Aquello en realidad poco importaba, luego de esos el día debió seguir de forma normal, al menos ese punto lo agradecía Sungyeol, ya que su nuevo aspecto y todos los rumores que salían lo agotaban, eso sí, debía agradecer que las fotos que se filtraron aplacaran los rumores ¿Quién se iba a meter con alguien que estaba ya catalogado como un modelo?.

— Aquella idea le daba gracia a Sungyeol, pero no podía hacer mucho por ahora. — Hey, solo ten calma que ese idiota no me hará nada. En menos de 10 minutos estaré libre — Calmar a Myungsoo no había sido simple, pero había trabajado en ello todo el día, y al final con un leve suspiro, el azabache sonrió y le dio a entender que todo estaba bien.

— Solo promete que no demoraras más de 30 minutos. Estaré con Sungkyu. — Una suave caricia en su mejilla le hizo luego de mucho tiempo tener tintes rojizos en su mejilla. El alto le dedicó una sonrisa, y no supo si era porque tenía suerte o qué, pero se perdió en la sonrisa que le regaló y en como el viento jugaba con el cabello ligeramente largo de Sungyeol— Nos vemos guapo — Tras un guiño se alejó y Myungsoo comprendió que Sungyeol era una persona de muchas facetas, de muchos colores, aquellos colores que lo enamoraban cada día más.


— Sentado en una de las bancas del gran patio de la escuela, estaba Joon. Tenía un libro, del cual lo único que pudo reparar Sungyeol era que estaba en inglés, y en realidad no le importó mucho al decir verdad. Como le había prometido a Myungsoo, el solo se encargaría de dejar las cosas claras y irse lo antes posible. Si aquello era en menos de 15 minutos, tanto mejor para el.

— ¿Qué deseas? — No se sentó, se quedó de brazos abiertos mirándolo fijamente —

— ¿Desear? Muchas cosas si te veo así, pero ese no es lugar apropiado para poder realizarlas — Sungyeol abrió sus ojos como si fueran dos grandes lunas llenas, y sus mejillas se tiñeron de rojo, pero más que por la vergüenza, lo hizo por la rabia que tenía en aquellos momentos —

— ¿Qué mierda vienes a pensar? Este no era el trato. Habla de una vez antes de que me vaya... — Sungyeol estaba molesto y esto lo notó de inmediato quien fue su novio. Más que mal el tiempo juntos le sirvió para entender al alto.

— Te debo una disculpa... Por todo lo que te hice pasar anteriormente. Era un tipo inmaduro — Murmuró al entender que debía ir al grano si no quería que se fuera — Solo espero que sepas entender eso, y que me des una oportunidad para acercarme para ti como amigo. — Se paró y acercó lentamente a Sungyeol, como un cazador a su presa para no asustarla — Se que en tu mente ronda la idea de que yo fui el de la foto, y sí, yo fue él se aseguró que ahora salieras en la revista, y es porque en verdad tienes material. Sé cómo vives y se de tu familia — Este último punto, logró poner en alerta a Sungyeol, mas antes de hablar Joon sonrió y se explicó ante la mirada contraria — Es obvio que si quería encontrarte debía de buscar pequeños datos de ti, como en donde vives y con quien, lo que no sabía es que ya vivías con otro — El silencio se tornó incómodo para Sungyeol pese a que no fue muy largo — No te estoy infiriendo nada, solo quiero que aceptes el trabajo que te van a ofrecer y trabajes conmigo en buenos términos. Esto no tiene por qué ser malo para ambos. Tu ganas dinero, puedes mantener ese departamento que tienes, y de pasada ayudar a tu familia.

— Una parte de Sungyeol quería decir que no, pero otra gritaba que si. Era una buena oportunidad que no le quitaría tiempo de estudio, y con lo cual podría ayudar incluso a Myungsoo — Lo voy a pensar ...

— Muy bien cariño — Aquella palabra le hizo recorrer por la vértebra una descarga eléctrica diferentes a las que producía Myungsoo en el. Esta no era para nada agradable —

No ver es una florDonde viven las historias. Descúbrelo ahora