Capítulo 6

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Dios, que dolor de cabeza tenía, sentía que estallaría en cualquier momento.

-No debí tomar tanto - dije removiéndome en la cama aún sin abrir los ojos.

-Al fin despiertas princesita - escuché decir de una voz muy conocida y me paralicé. ¿Qué mierdas hacia Connor aquí?

Abrí los ojos inmediatamente y me encontré con la imagen de Connor sin camisa sentado en la orilla de mi cama con una sonrisa pícara. Me senté rápidamente en la cama para darme cuenta que me encontraba en ropa interior. En un abrir y cerrar de ojos tomé la sábana para cubrirme, probablemente me puse tan roja como un tomate, lo que consiguió sacarle una carcajada a Connor.

-Nada que no haya visto ya princesita - dijo tumbándose en la cama de nuevo y acariciando mi espalda. Me estremecí ante el roce de sus manos.

-¿Qué pasó anoche? - la imagen de los dos semidesnudos en mi cama y el hecho de que no recordaba casi nada de la noche anterior no me daba muy buena espina - ¿Acaso nosotros..?

Connor rió nuevamente y yo lo miré frunciendo el ceño.

-Por favor April, no seas ridícula - soltó burlón mientras se trepaba a horcajadas sobre mí, me inmovilizaba entre sus piernas y se deshacía de la sábana con la que me cubría.

Observó mi cuerpo con detenimiento, de sus ojos salía fuego por la forma en que me miraba con deseo. Yo temblaba bajo su agarre, intenté zafarme en repetidas oportunidades, pero fue inútil cualquier intento, él tenía muchísima más fuerza que  yo.

Se acercó a mí y susurro en mi oído - Si quisiera hacer algo contigo no lo haría mientras estás borracha princesita - su voz ronca hizo que toda mi piel se erizara.

Empezó a depositar pequeños besos haciendo un camino desde mi oreja hasta mi pecho, mientras sus manos recorrían mis piernas hasta mis caderas. Mi cuerpo reaccionaba al roce de sus labios inevitablemente, lo que me hacía sentir culpable por estar haciendo esto sin importarme Lucas, pero si me importaba, claro que lo hacía.

-Connor por favor - rogué y este se detuvo.

-¿Es por el idiota de Sparzza cierto? - dijo furioso - aún no logro entender April, ¿Cómo fue que lo pusiste a él por encima de mí, por encima de nosotros? - esta vez no había furia en su voz, había dolor, rencor, amargura y todo esto por mi culpa.

Connor me soltó y se sentó en el borde de la cama dándome la espalda. El no siempre había sido así de orgulloso y pedante, al contrario, Connor era un chico simpático, dulce, pero todo eso había quedado en el pasado y todo gracias a mí.

Connor había estado detrás de mí mucho tiempo, cuando finalmente había aceptado salir con él Lucas lo había arruinado todo, en aquel entonces todo era una pelea y un conflicto con Lucas, una mierda realmente, que de un momento a otro se había convertido en una pasión y deseo incontrolable, me había enamorado de él.

-Vístete - dijo con desdén desde la puerta de mi habitación - pasaré por ti en veinte minutos para ir al instituto, dejaremos a Hayden en la guardería de camino, apresúrate, no quiero llegar tarde.

Abandonó mi habitación sin siquiera mirarme y escuche como cerraba la puerta principal de un portazo al salir de la casa.

Me apresuré a estar lista, mientras tomaba una ducha no pude evitar pensar en todo lo que acababa de suceder, me sentía horrible, sucia, pero era una suciedad que el agua no podía lavar. Al salir de la ducha preparé a Hayden a toda velocidad justo a tiempo para cuando oí la bocina del auto de Connor sonar fuera de la casa, tomé mis cosas, las de Hayden y me subí al asiento del copiloto.

La puertaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora