Capítulo 3

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-Sos terca, metida, molesta, histérica e insoportable.-dice cruzando los brazos.
-No hace falta que me digas todo lo que soy-dije sentándome en el sillón.-lo sé perfectamente.
Thomas puso los ojos en blanco, me tomo del brazo y me llevo hacia la salida.
-Tienes que irte-dijo mirando hacia todos lados.-ahora.
-¿Porqué?-dije juntando las cejas.-Hasta que no me digas qué rayos está pasando, no me pienso ir.
-Por las buenas o por las malas.-dijo acercándose a mi, tanto que sentía su respiración sobre mi piel.-Bueno, me parece que ya decidiste.
Me agarro de la cintura y me cargo como si fuera una bolsa de patatas.
-¡Oye!-dije pataleando.-¡Bájame ya!
Le pegaba el el hombro con mis pequeñas manos y pataleaba con todas mis fuerzas. Thomas abrió la puerta y me bajo en el porche.
-Vete.-dijo ordenándome.-¡Que te vayas!
Estaba muy alterado. Sus manos se hicieron puños y hacia tanta fuerza que sus nudillos estaban blancos como el papel.
-Ya te dije que no me iré hasta que me digas lo que está pasando.-dije firme mientras cruzaba mis brazos.
-Si no te vas te juro que....
Se detuvo al escuchar un estruendo dentro de su casa. Entre sin permiso y vi a un hombre agachado, luego se paró. Su piel era morena, su cabello castaño oscuro, y sus ojos....sus ojos eran negros como la noche, eran tan profundos que sentía que su mirada me penetraba la piel.
Me miraba con cara de intriga. Se acercó a mí, y su mirada apuntaba hacia mis ojos.
-Wow-dijo mirándome de arriba a bajo.-¿Ya te hiciste una noviecita?
-Vete Deamon.-dijo amenazante.
Deamon me agarro del brazo y se acercó bastante, tanto que nuestras narices se rozaban.
Thomas le agarro del brazo y le dijo que se aleje de mi. El no hizo caso omiso. Solo se limitaba a mirarme.
Pasado unos minutos me soltó el brazo y volteo a ver a Thomas.
-Estas en peligro aquí-dijo agarrándole el hombro.-Y ahora expusiste a la chica...¿que rayos pensabas? ¿Que ibas a tener una vida normal después de lo que hiciste? Tú sabes donde perteneces.
-¡Largo de aquí!-gritó, sus pupilas se dilataron, sus venas se marcaban más en su piel.
Deamon hizo caso pero antes me susurró algo.
-Si te vuelvo a ver por aquí, te mataré, a ti y a toda tu hermosa familia.-dijo con una sonrisa de oreja a oreja.
-¿Porqué quieres alejarme de Thomas?-dije antes de que se vaya.
-Por que el no merece amor en su vida, solo en un maldito parasito.-dijo mirando a Thomas.
Salió por la ventana en donde entro y se marchó.
-¡Mierda!-dijo golpeando la mesa con los puños.-¡Te había dicho que te marcharas!
-Thomas por fa....
-¿Que quieres de mí?-dijo juntando las cejas.-No soy para ti...-dijo acercándose. Me acarició la mejilla. Se sentía tan bien, su piel sobre la mía.
-Ahora vete,-dijo abriendo la puerta principal-por favor Octavia.
Esta vez hice caso. Me voltee.
-Mañana va a ver una fiesta en la casa de Peter,-dije recordando que mañana es su cumple años e invita a todos los del colegio.-si vas es por que de verdad quieres estar conmigo, y si no te encuentro-dije mirando sus ojos los cuales me miraban sorprendidos.-es por que quieres alejarte de mí. Espero encontrarte allí.
Me fui y camine hasta mi casa. De verdad quiero que vaya, Thomas es diferente al resto de los chicos. Él es......especial, me hace sentir como si fuéramos los últimos en la tierra. Solo él y yo. Thomas es extraño, lo sé, pero me gusta y mucho. Pete no dejó de interesarme pero...ya es diferente.
Llegue a casa. Mis padres no estaban así que decidí tomar una corta ducha. Me puse el pijama y me acosté en la cama. Mañana será un largo día después de todo.
Estaba en el bosque. Caminando cuando siento pasos detrás de mi. Me doy vuelta y era Deamon. Saltó sobre mí y me empezó a horcar. Me quedaba sin aire, no podías respirar. Luego saca un cuchillo y me lo clava en el estomago.
Me despierto toda sudada. Miro la hora y eran las 7pm. Me levanto rápido, me visto y bajo las escaleras. Mis padres No estaban lo cual es muy raro. Agarre el teléfono y marque en número de mamá. No atendió nadie. El de papá tampoco contesto nadie. Qué raro....ay no. No puede ser. Me acorde lo que me había dicho Deamon si no me alejaba de Thomas. No....no puede ser.
Salgo de mi casa y corro hacia la casa de Thomas. Golpeó la puerta varías veces.
-Joder...dije que ya voy.-gritó enfurecido.
Cuando abrió la puerta su rostro se relajó.
Lágrimas amenazaron con salir. Pero logré mantenerlas, no era momento de llorar.
-Thomas..-dije casi sin voz-necesito tu ayuda, por favor.
-¿Que sucede?-dijo cerrando la puerta tras de él.
-Mis padres....-dije con una lágrima en mi mejilla.-no están en casa. Ellos desaparecieron desde ayer a la noche. Llame a sus teléfonos y ninguno contesto. Estoy muy preocupada Thomas...tengo miedo.
Él me mira con cara de compasión y me abraza.
-Tranquila..-dijo acariciando mi cabello.-los encontraremos, te lo prometo.
-Hay...-dije alejándome.-Hay que ir a la policía.
-No.-dice agarrando mi brazo.-Yo me encargo, no metas a la policía en esto.
Asentí lentamente.
-Ve a tu casa..-dijo poniendo un brazo sobre la madera.-no vayas al colegio, descansa.
Hice caso y me fui. Estaba perdida, mal sin mis padres. Me sentía rara.
Me acosté en mi cama y suena el teléfono.
-¿Hola?-dije secándome las lágrimas.
-Hola hija, soy yo mami.-dice con su voz dulce. Mi alma me volvió al cuerpo.
-Mamá...¿estas bien?-dije preocupada.-¿Donde están?
-Estamos viajando para California.-dijo lo más tranquila.-Te deje una nota,¿no la viste?
-No madre,no hay ninguna nota.-dije mirando hacia todos lados.
-Nos quedaremos por un tiempo hija..-dijo algo a penada.-por cuestiones laborales. ¿Te puedes arreglar sola o llamo a tu tía para que se quede contigo?
-No madre,-dije tranquila.-estoy bien sola.
-Adiós bebe, nos veremos pronto.-dijo mientras se escuchaba a papá hablando.
-Adiós.-dije aliviada.
Sentí el pitido y arroje mi celular sobre mi cama. Menos mal que están bien. Me preocupé un montón.
Mierda. Se me olvido un pequeño detalle.
Thomas.

Oscuro secretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora