Capitulo 42 " Te quiero"

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Narra Ana:

Entramos en la hacienda, Teresa nos recibió muy alegre, nos contó que mi padre ha estado muy deprimido y que son muy pocas las veces que le demuestra cariño a Alex, eso tiene muy preocupada a Teresa, ella prácticamente nos esta rogando que no lo llevemos, pero claramente me negué, yo que podría hacer con un bebe recién nacido, no podría estar con el 24/7.

Pero si le daría el cariño que el necesita, le pregunte a Teresa si mi padre estaba aquí, lo cual dijo que no, que el solo venia por las noches y que las veces que lo hacia se aparecía borracho, por eso es que ella cierra bien la puerta del bebé para que el no le haga daño, todo esto me dejo anonada, nunca pensé que mi padre tendría este comportamiento.

Teresa nos llevo a la habitación de Alex, la habitación, estaba pintada de un color azul cielo, y con muchos adornos de bebé, mi padre se había esmerado bastante en esta habitación hay se le podía ver el gran esfuerzo, pero tanto esfuerzo para no darle cariño a su propio hijo eso si me aterra, comencé a caminar hasta la cuna y hay vi al pequeño Alex, tenia los ojos de Martín un azul hermoso, lo cargue en mis brazos, se veía tan frágil y pequeñito, me daban muchas ganas de llevármelo, pero me daba lastima de mi padre.

- Estas segura de no querer llevarlo- Me pregunto Martín por milésima vez-

- Mi padre, nos buscará hasta por debajo de las piedras si nos llevamos a Alex
y tu lo sabes- Martín hizo una mueca, para después agarrar la mochila del bebé, y pasandomelo en brazos, no pude protestar no decirle algo, ya que para eso, ya estábamos en el carro rumbo al departamento junto con Alex-

- Esto esta muy mal- Le dije a Martín mientras el me sonreía orgulloso, claro había logrado lo que el quería-

- No, princesa, el no lo quiere, si no, no tomaría, y le prestaría más atención, por lo menos lo haría sentir como su hijo pero no lo hace y dudo que algún día lo haga- En eso tenía razón Martín-

- Tienes razón, pero dime, cuando nos vayamos para París, ¿Quien lo cuidara?- Martín estaba mirando a la carretera, pero paramos en un semáforo y me miro-

- Lo cuidara Emily no creó que se niegue con tal de obtener tu perdón ella hace de todo- Rodee los ojos por el comentario de Martín, ahora me toca ir y hablarle a Emily-

- Ahs te odio lo sabias?

- Tu sabes que me amas- Me dijo mientras me guiñaba el ojo-

- Idiota!!- El comenzó a reírse, una sonrisa tan hermosa, yo al lado de el, me rio como loca psicópata, de lo fea que es mi risa, no se el como hace para tener una risa tan perfecta-

Narra Cristóbal:

Llegue a la hacienda, con miles de regalos para mi pequeño Alex, entre a la hacienda muy feliz, ya que no tenia este tipo de afectos con mi hijo desde que Lucrecia murió, al principio me dio muy duro su muerte, que solo mantenía, de bar en bar, estaba dolido, tanto que ver a Alex me recordaba a la muerte de Lucrecia, pero decidí ir donde una psicóloga, para que me ayudara con este tema, comencé a subir las escaleras hasta llegar al cuarto de Alex.

- Campeón, papá te trajo algo- Me pareció raro que Alex no hubiera llorado, o comenzara a balbucear cosas-

Me acerque a su cuna, pero me lleve una sorpresa al no verlo, no creo que Teresa lo este bañando o dándole de comer eso es totalmente absurdo, ella me lo hubiera dicho, las puertas del armario del bebé estaban abiertas, comencé a sentir mucho miedo, porque no quería que fuera lo que estaba pensando, pero a la vez quería salir de la duda, me acerque y mire que no estaba toda la ropa, solo habían dos conjuntos de playa y ya, me asuste a mas no poder y comencé a tirar todo, mi hijo se lo habían llevado, quebré un espejo que había hay cortándome, pero no sentía dolor, solo sentía rabia, vi que Teresa entro a la habitación sorprendiéndose mucho al ver mis manos y el piso con sangre y miles de pedazos de vidrios regados.

- Don Cristóbal que le paso?- Yo solo agarre a Teresa de su vestido de empleada domestica, mientras ella me miraba con miedo-

- Donde esta mi hijo!! donde!! yo se que usted tiene mucho que ver en esto, dígame!! o le juro que se va a pudrir en una cárcel junto a sus cómplices!!

- Don Cristóbal le juro que no tengo nada que ver en esto, no se donde esta el bebé, por favor no me lastime más

- Como no vas a saber sirvienta de cuarta!!- Teresa me miraba con mucho miedo, mientras yo no paraba de zarandearla-

- Señor yo no se nada se lo juro, suélteme por favor- La solté al verla tan mal, su nariz estaba sangrando y sus brazos estaban rojos por haberla apretado tan duro, al soltarla ella se fue como pudo, mientras yo solo seguía azotando las cosas, estaba muy mal, hasta que me desmaye por el dolor de las manos, comencé a ver negro hasta que no pude ver nada-

Narra Ana:

No pude dormir en toda la noche por la lloradera de Alex, realmente ser padre debe de ser algo muy duro, ya que me tuve que levantar mas de 5 en veces en la madrugada a darle un tetero, Martín solo se levanto unas dos o tres veces, pero de resto fui yo, ahora me encuentro tumbada en mi cama tratando de recobrar un poco de energías, de las tantas que perdí ayer en la madrugada, mientras que Martín ha estado de un lado para otro con Alex, eso me causaba bastante risa, pero el se lo busco, por flojo, toda la mañana ha estado de un lado para otro, hasta lo escuche quejarse más de una vez, pero el fue de la idea, así que le toca cuidarlo, la responsabilidad no es solo mía, de tanto pensar en Alex y Martín me quede profundamente dormida.

Narra Martín:

Dios no pensé que cuidar a un pequeño bebé fuera tan difícil, no se ni como poner un puto pañal, no se como calentarle su leche sin que este tan caliente, todo esto me agobia mucho, ahora veo que un futuro no sere un buen padre, Alex llevaba llorando todo el día, y yo no sabia que hacer exactamente, y Ana estaba durmiendo como un hermoso bebé mientras que yo estaba aquí matándome por obtener un manual para cuidar a un bebé recién nacido, busque en el famoso internet que tiene la respuesta a todo, hay encontré como hacer una leche para recién nacido, comencé hacer exactamente lo que decía la pagina de internet, pero desgraciadamente todo salió mal y la cocina quedo hecha una mierda, con leche regada por todo lado, y encima de Alex igual, genial, ahora me toca bañarlo, casi me pongo a llorar de la desesperación, hasta que vi a Ana, muy sorprendida por el desastre que hice en la cocina.......

Me Dejaste Ir (Primera temporada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora