CAPÍTULO 7

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Las clases fueron bastante tranquilas y aburridas

Un montón de presentaciones e indicaciones para el año.

A veces Lena intentaba hablarme pero la ignoraba.. Así de simple, mejor si no existía para mí.

Luego de clases pasé por el dojo, en vacaciones extrañé ese lugar, vi a unos cuantos chicos nuevos, hablé con Jahir y les dije que entrenaran sin mí, él estaría a cargo. Hoy ayudaría a papá a organizar sus papeles ¡siempre tan descuidado!

Jahir... Ahora que recuerdo, es el único amigo que puedo llamar verdadero, a él jamás lo alejaría, es, literalmente, el hermano que nunca tuve, no fue como los demás.

Volví donde papá, me dió unos cuantos papeles, las fichas de los estudiantes, dijo que la de Lena la tendría más tarde, pues necesitaba recolectar sus datos.

Estaba en ello, y fui a la recepción,donde Susan, la secretaria del colegio esperaba por la información que le llevaba.

Y al volver, tuve un asco de "sorpresa". La tal Lena estaba con mi padre y él se veía más que feliz hablándole, no pude evitar enfurecerme ¿es que no se rendía? Iba directo a mi padre y ¿con qué? Posiblemente puras mentiras. No podía ver su expresión pero seguro sonreía para verse toda inocente.

No me detuve a pensar ni por dos segundos, le dije a mi padre todo lo que pensaba sobre ella, pero no me esperaba su reacción.

Solo se paró, se disculpó con mi padre y se acercó a mí, creí que iba a armar algún tipo de berrinche pero no... Solo me golpeó y vaya golpe, me quedé allí, parado, bastante dolorido ¿cómo podía hacer eso con un solo puñetazo? Y vaya genio, apenas la conocí hoy pero vaya forma de enfadarse, aunque no creí que iba a enojarse por tan poco, seguro se frustró ya que arruiné su plan de ganarse a mi padre.

Y bueno tres sorpresas seguidas... Mi padre corrió tras ella. Suspiré pesadamente, estaba cansado, harto de todo esto, tomé mis cosas y sin ver hacia dónde habían ido, fui a entrenar un poco, de todas formas lo necesitaba.

Los chicos seguían allí, usualmente entrenábamos hasta las 5:30 pero ya que era el primer día les daría un respiro a los nuevos antes de comenzar a entrenar en serio. Y como el trabajo fue poco, y mejor no pensar en ellos, me volvía el recuerda de esa niña y me enfurecía. Apenas eran las 3:20 así que tenía tiempo de sobra para despejarme un poco.

Saludé a todos e hice algunas presentaciones, especialmente de los nuevos, muchos ya habían competido antes, y otros solo estaban empezando, pero era bueno, teníamos a un grupo bastante numeroso, 32, a comparación del año pasado sí que habían aumentado.

Le conté a Jahir sobre lo ocurrido y él dijo que mejor lo olvidara puesto que cuando pasaban estas cosas me ponía gruñón y... Un yo gruñón más entrenamiento no eran buena combinación, o eso me decían siempre.

Me relajé y decidí que hoy solo calentaríamos y correríamos un poco, ya mañana planearíamos bien las cosas.

Volví a ver el reloj, 6:30, había dado unas cuantas vueltas antes de volver a casa, entré y me encontré con una escena extraña, mi papá estaba en la sala... Cantando karaoke y mamá tenía palomitas de maíz, estaba sentada en el sofá como si fuera un cine privado y por lo que veo... Era una comedia musical. Pero debo admitir que papá es buen cantante así que no me quejo... Y los vecinos tampoco.

Pasé por la cocina tomando un vaso de agua y fui a ducharme. Luego me puse mi pijama,unos pantalones grises holgados y una camiseta de algodón llana. Estaba estructurando los horarios para artes marciales y de repente tocaron la puerta

-Puedes pasar-dije sin quitar la vista del papel

-Hey-papá se sentó en una esquina de mi cama

-¿Qué sucede?

-Umm sobre Lena...

En ese momento alcé mi cabeza lo miré fijo, serio

-¿Qué con ella?

-No es como los demás, de verdad hijo, ella ni siquiera me habla afectuosamente, educadamente sí, pero... Incluso me dijo que creía que tú la odiabas...

Tampoco se equivocaba

-... Y cuando tú le dijiste que era una aprovechada, no lo sé Nathen, debiste ver su mirada, había algo que me hizo sentir triste

Me había dicho Nathen... Es un poco difícil que me llame por mi nombre, estaba bastante preocupado por esa niña, parece que se lo había ganado, vaya que era hábil, el primer día y lo había logrado, como la detesto...

-Hey, Nathen, solo... solo espera un poco, ¿qué tal conocerla? ¿Ser amigos?

-Ni en broma papá, ella no se merece nada... ¿Qué no te das cuenta? ¡Es el primer día y ya estás de su lado! ¿¡Acaso olvidaste lo que pasó!?- le contesté un poco alterado

-¡Basta! ¡Es suficiente! ¿¡Vas a seguir así siempre!? ¿¡Ni siquiera le das la oportunidad y la juzgaras poniéndola junto a los demás!? ¡Bien!

No tenía palabras, mi padre estaba gritando y es que él nunca grita en casa, ni en ningún lugar que este con nosotros, cuando me vió nuevamente, fue bajando de tono

-Solo recuerda una cosa Nathen, Lena no es como los demás... Ni tampoco es ella.

Se fue de mi habitación dejándome aturdido, pensar en el pasado me abrumaba, había cambiado por esa chica nueva.

¿Ser amigos? Ya, ni en broma lo haré.

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